Austin: —Buenos días preciosa. ¿Dormiste bien?Ese mensaje es con el que me he despertado. Quiero dormir otra vez. Son las 8:30 am.
Yo:—Buenos días mi niño. No mucho, sigo cansada y tú?
Austin:—También. Ayer tuve partido de fútbol y no descanse lo suficiente.
Yo:—Si te conté ayer que le hice de portera a mi hermano en su entrenamiento para la final.
Austin:—¿Es hoy no?
Yo:—Si. Es hoy.
Austin: —Una princesa tiene que pararse a desayunar.
Yo: —No quiero, tengo que dormir más.
En los siguientes 15 minutos Austin me convence, lo extraño es que no escuche ruido de nadie. No creo que mi familia haya ido a un lado sin mí.
Para mí sorpresa salgo y voy por el pasillo buscando voces de mis padres o mis hermanos. Bajo a la sala y está totalmente limpia, siguiendo la cocina.
Entro a la habitación de mis hermanos y veo a los dos en sus camas.
—¡Aaron, Trevor. Ya es tarde! —Grito en frente de la puerta de su habitación. Hago lo mismo con mis padres.
Baja Trevor con su pijama de dinosaurios verdes y Aaron de balones de fútbol. Al parecer no descansaron bien.
Mis padres bajan susurrando algo, pero no alcanzo a escuchar. Papá me mira extrañado, cada que me mira así es porque he hecho algo mal.
—¿Y ese milagro que tú nos levantas?
«¿Ehhh?»
—¡Es cierto Emy! —Dice Aaron.— Siempre eres la última en llegar a la mesa los domingos.
Me miran todos con la misma expresión que siento que tengo, decido bloquear sus miradas y volver a contemplar mi bello plato de choco crispis con leche y avena.
Pasan unos segundos y ellos preparan su desayuno. Todos decidieron desayunar café y galletas oreo. Por cosas tan pequeñas como está me confirman más que soy la oveja negra de los Taylor.
Termino de desayunar al mismo tiempo que ellos y nos vamos a recoger nuestras habitaciones.
—¡A las 11:30 tienen que estar listos para preparar las aguas!—Grita mamá en cuanto Aaron, Trevor y yo subimos las escaleras.
—Okay. —Soy la única que responde.
—Emy. —Dice Aaron antes de poner un pie en mi habitación.
—¿Qué pasa?
—Tengo nervios.
—No te preocupes nene, ya sé que es el primero torneo, y aparte serás delantero. Lo harás bien, papá y Trevor te entrenaron muy bien.
—¿Y si fallo?
—No fallarás. Sólo imagina ese trofeo en el buró vacío. Anda, que ya es tarde.
—Lo haré pero promete algo. —Eso no me lo esperaba.
—Qué.
—Que tú también vas a aclarar qué vas a ser cuando seas grande.
No tengo palabras, solo asiento.
—Vale hermanita.
Cierro la puerta de mi habitación, sin comprender aún que acaba de ocurrir. Al parecer el hombre más pequeño de la casa sabe qué problemas existenciales tengo. Lo he subestimado, es un niño bastante listo, y de hecho tiene más intuición que mi hermano mayor.
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Dreamer 🌸 Llénate de lo que no has vivido.
Подростковая литература-ELLA QUERÍA SER ALGUIEN, ÉL QUIERE SER ALGUIEN PARA ELLA. 🌟 . Una adolescente en busca de su identidad al lado de su familia y amigos comienza a tener un concepto del amor al mismo tiempo que vive otra dimensión en las noches. ✨