Sin importar que seguiré a tu lado [Bakugo x (T/N)]

27

Después de la pequeña disputa con bakugo, (T/N) se fue a su habitación y se quedó dormida. No paso mucho para que volvería a tener un sueño como los que tuvo las dos veces que estuvo en el hospital, producto de ellos despertó bastante agitada.
Ahora no solo era ver a los villanos, era como estos tenían una pelea con all minght, como algunos héroes fueron gravemente heridos y quizá hasta uno se murió. Esos sueños iban transcurriendo todas las noches, en algunos la volvía a tratar de secuestrar y al despertar veía una sombra en una parte de su habitación.

Ya iban tres noches en las que no podía dormir, bueno al menos una de ellas pudo dormir unas horas, pero sentía que algo había olvidado. Se sentía en una gran laguna mental.
Desesperada, se dio la vuelta, quería dormir y las ojeras comenzaban a marcarse demasiado. Miro por la ventana y vio a una persona, rápidamente se levantó y acercó a la ventana pero aquella figura había desaparecido, dejando a la chica algo asustada. Simplemente ya no podía. Cerro la cortina y pego su espalda a la pared deslizándose en esta hasta caer sentada y hacerse bolita sosteniéndose la cabeza.

El no poder dormir le estaba haciendo daño, se estaba torturando a si misma y lo sabía, pero el hecho de sentir que algo que podía ser bastante importante le molestaba. El no poder recordar aquello. Las lágrimas comenzaron a brotar de sus cuencas.
Producto de la desesperación, se sentía un asco, por hacerse sufrir a su misma de esa manera, por ser débil, por no dejar pasar ese simple dato. Por seguir pensando en la idea de dejar de ser héroe, se sentía débil y furiosa, pues sentía que todos esos chicos tenían razón a decirle débil.
Después de estar llorando se terminó por quedar dormida.

Bueno fuera que les hubiera dicho que despertó en la cama con bakugo al lado suyo, abrazándola de forma protectora. Pero no fue así. Ella despertó en el frío suelo, su cuerpo dolía, se sentía débil.
Con delicadeza se levantó y se dirigió al cuarto de baño, se miro al espejo.
Se veía patética, unas ojeras el doble de marcadas que las de aizawa, sus ojos levemente hinchados por llorar.
Su piel, casi pálida, por como dejo de comer a sus horas o por no comer.
Se alejo del espejo y se comenzó a desvestir, para meterse a la ducha.
Una calida ducha que le venía haciendo falta.

Izuku: (T/N) que te está ocurriendo, llevas rara durante una semana y media y ahora estás de está forma. No estás bien, que pasa?

(T/N): yo... Es algo extenso podríamos hablar después

Izuku: pero -la miro a los ojos y suspiro- está bien

(T/N): gracias

Izuku: ven vamos al comedor

Al llegar, todos se quedaron viendo el aspecto de la azabache quien solo se sentía inútil por demacrarse de tal manera. El más sorprendido al verla así fue bakugo, sabía que había estado rara toda la semana pasada, pero el verla así ya era un limite, iba a tragar todo su orgullo de nuevo y hablar con ella. Se sentía culpable por su estado, ella no lo había estado pasando bien desde antes, la obligó a volver a la escuela prácticamente, no había recibido ayuda profesional y recién habían tenido una pequeña disputa y no se acercó a disculparse.

(...)

Aizawa: (T/N) quédate por favor

(T/N): claro

Mientras los demás se iban al receso, ella se despidió de su hermano y se dirigió hacia el profesor.
Y para ser sincera estaba algo nerviosa, pues casi nunca le hablaba.
Una vez frente al profesor, este le pidió que se sentará en la banca frente a el, cosa que hizo.

Aizawa: bueno debido a tu estado, dejaras las clases de batalla por un tiempo, esto debido a que te mandaremos con una psicóloga a esa hora. Se que debimos hacerlo desde un principio y siento eso. Pero espero que no sea tarde y te podamos ayudar en algo.

(T/N): yo... Gracias

Aizawa: no tienes por qué agradecer, ven acompáñame.

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Hola

Yo sé que me eh tardado demasiaaaaaaaaado en actualizar
Pero desafortunadamente no puedo evitarlo la escuela me absorbe bastante.