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‹Viernes, 26 de septiembre del 2031›

Pov’s Adrien›

— Un aliado de Hawk Moth planea robar un banco no muy lejos del Río Sena, tienes que detenerlo a toda costa, ese villano quiere llevarse el dinero en barco hasta España —explicó Viperion. Nos dirigimos a una mesa en la sala de descanso con el motivo de seguir con el tema de conversación—.

— Ojalá no vayas a fallar como las dos anteriores —mencionó Pegase, su comentario no hizo para nada gracia, lo miré directamente a los ojos para hacerle saber que no me simpatizaba—.

— Si...¡JAJAJAJA! —estalló en risas Azul junto al de rastas, yo bufé— Oye~ —se limpió una lágrima falsa tratando de regular su respiración— ¿Por qué no las has conseguido? De lo que llevas aquí nunca habías perdido.

—suspire apoyando mis codos en la mesa y la cabeza en mis manos— ¿Recuerdan cuando Fu dijo que un espía español robaría La Mona Lisa?.

— Claro.

— Resulta que “el espía” era una chica de la cual ahora estoy enamorado y en nuestro último encuentro se enojó conmigo y yo de ella pero a mi ya se me pasó pero no sé si a ella igual, parece que siempre nos asignan las mismas misiones —digo rápidamente dejando a mis compañeros perplejos y asimilando lo que acabo de decir—.

— En resumen: ¿El espia no era “un” sino “una” y te enamoraste de ella quien sabe porqué y en la última misión se molestaron mutuamente, tú lo superaste pero ella tal vez no? —inquirió mi amigo moreno—.

— ¡Exacto! —espeté dándole la razón—.

— Vaya, enamorado del enemigo...¿Qué se siente? —rió un poco el azabache—.

Ya venía siendo hora de irme. Me despedí de mis molestos amigos y me dediqué a llegar al lugar, rezando por que a _____ no se le ocurra hacer acto de aparición. No fue sorpresa que al llegar al banco la peli-roja estuviera detrás de una columna gigante esperando con (según sus expresiones) impaciencia.

— Buenas noches, bella dama —me manifesté a sus espaldas—.

—se giró exaltada— ¡Joder, tío! {De ahora en adelante los que este escrito así, estará dicho en otro idioma, en este caso: español} ¿Qué haces aquí? —cuestionó de brazos cruzados— ¿No te ha quedado claro que no te quiero cerca? —sentenció. Iba a formular algo, más no gasté saliva en una cosa en la que no lograría nada, así que solo me brindé a rebajar la cabeza— ¿Hablarás o te quedarás ahí parado?.

— Lo siento... —anuncié en un renacuajo de voz—.

— ¿Có-mo?.

— Lo siento... —lo dije un poco más alto— La última vez que nos vimos no te tuve que tratar así, quizá solo haya sido un accidente, no debí actuar de esa forma.

— No Chat, yo lo lamento —masculló—.

— ...

— No tuve que ponerme así, tú solo quisiste protegerme en el embrollo en el que nos metió mi drama —pude notar un pequeño sonrojo en su blanca piel— ¿Me perdonas?.

«Si estoy soñando, no me despierten»

— Por supuesto —me lancé a ella, abrazándola como si mi vida dependiera de eso. Consiguientemente me separé admirando sus rasgos tan finos—.

Las alarmas de la zona saltaron, advirtiendo que el ratero se hallaba acá. Nos acomodamos de espaldas vigilando que el asaltante no se nos acercara por ningún lado.

— ¿Sería tan amable de acompañarme a derrotar a este intruso? —me volteé y me aferré a su mano para besarla—.

— Con todo gusto, gatito.

Un chico enmascarado se nos presentó enfrente y sin decir algo corrió hacia _____, a pocos milímetros de impactar en su contra un elemento lo hice tropezar con mi vara, la oji-azul por inercia le quitó el objeto que al verlo mejor era una bomba de gas lacrimógeno.

No satisfecho, él mismo con una especie de vara láser, cortó una de las columnas que mantenían en pie el sitio. Originando un pequeño temblor y crujidos, al verlo saltar por una ventana supe que si no salíamos terminaremos aplastados por los pedazos de cemento que caerían.

— Hay que salir de aquí.

La sujete del brazo y en un intento de imitar su acción, una gran parte del techo cayó tapando la única salida que se me ocurría.

Corrí junto a ella a las escaleras para bajar al segundo piso, pero igual que la ventana fue acaparada con un trozo de techo que detuvo nuestro escape. Genial, atrapados en un tercer pi- ¡Claro!. Fui al balcón mirando el piso de abajo, si bajamos allá tan solo nos faltará llegar al primer piso y salir.

Extendí mi bastón hasta que llegara a abajo.

— Solo tienes que deslizarte por aquí, como los bomberos —le expliqué—.

Al ver que no nos daría tiempo a bajar uno por uno sin ser derribados, la tomé por la cintura y bajé como dije. Esa escena pasó como en cámara lenta, ambos nos veíamos directamente a los ojos; lástima que al aterrizar tuvo que acabar.

Pudimos visualizar al mismo hombre escapar nuevamente por un agujero en el suelo posterior a cortar otra columna principal. A la par saltamos por el mismo hueco, la salida estaba a pocos pasos.

—corrí a afuera, por fin salimos— Al fin este sufrimiento terminó ¿No? —miré a los lados y ella no se encontraba por ninguna parte— ¿Linda?.

— ¡CHAT! —un grito desgarrador me llamó— ¡Ay-uda!.

Regresé a la entrada y vi como su pierna estaba atrapada por una viga. Traté de atraerla hacia fuera pero sus quejidos y gimoteos de dolor no me dejaban tranquilo. Opté por confiar en mi fuerza para retirar la viga, al no poder con mis manos, con mi bastón la levanté lo más que pude dejándole espacio suficiente para que pueda sacar su pierna. Al terminar, la cargué estilo nupcial y salimos del área casi en ruinas.

— ¿Estás bien? —la dejé en el piso para atender su pierna derecha. Esa parte del su traje estaba desgarrada, salía sangre de los raspones y algunas pequeñas heridas—.

— Si Chat, son solo raspones, nada que no pueda soportar —me sonrío—.

«Si que es hermosa»

♠♣♠♣

¿Felices y contentas con este capítulo?

Tarde exactamente 3 horas haciéndolo y me duele la espalda de estar jorobada :-)

Bueno, aquí se los dejo pa' que se lo gozen

¡Au revoir!/¡Adiós!

Agente 00Perfeción [Semi-AU] [Adrien Agreste/Chat Noir y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora