Instant ramen love / Showho [En Emisión!]

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Ceño fruncido, brazos tensos, sudor casi imperceptible cayendo por su frente, lentos y circulares movimientos e interminables rastros de ketchup que limpiar. Podría sonar exagerado, hasta tonto, pero fregar mesas y en general limpiar el área de comida eran su punto débil. No sabía si era culpa de los fabricantes de inmuebles o por propia torpeza, pero ya no estaba dispuesto a que le volvieran a descontar otra mesa de su sueldo, cuando él había logrado sacar cada mancha, graffiti y chicle pegado. En el medio rompió una que otra pata pero solo por hacer bien su trabajo.

Cuando vio terminada su labor, levantó la vista buscando el reloj. Recién eran las once de la noche, horario en que los clientes disminuyen. Sin mencionar que los últimos días también se había vuelto los momentos idóneo para conversar con su preciado cliente número uno. El mismo Wonho le había mencionado que gustaba de ese horario para charlar, ya que sus clases lo mantenían ocupado durante el día, sus horas nocturnas eran preciosas. Shownu solo podía estar más que encantado con que el castaño le regalase su tiempo.

Y casi como si fuera a propósito, las puertas corredizas se abrieron cortando toda paz.

-¡HYUNWOO!- Llamó una chica mientras miraba para todos lados.- ¡TU BELLA Y CONSIDERADA JEFA VINO A VERTE!

-¿Noona?- El moreno se acercó aún con el trapo y el limpiador aun en sus manos.

-¡Ah! ¡Ahí estás!- La chica le sonrió ampliamente al verlo.

-¿Necesita algo?

-Me hieres Hyunwoo.- Finge secar una lágrima con la punta de una de sus uñas esculpidas.- ¿No puedo venir a jugar a veces?

-Oh, perdón... por su ropa pensé.- Era verdad, que cualquiera que viera la bajita chica en esos momentos pensaría que se dirigía a tomar una copa en algún lugar caro, en vez de ir a una tienda de conveniencia a saludar a un dongsaeng.

La estrepitosa risa de la chica cortó su habla.- ¡Solo te estoy molestando nada más!- Exclamó, dándole un pequeño golpe en el brazo.- ¡Waaah! Tus brazos nunca me decepcionan, ¡Son como dos troncos!

Shownu se limitó sonreir, aunque se conocían hace mucho Hyolyn era la noona más extraña que hubiera conocido.

En eso el alto recuerda algo.- ... Capaz noona, ¿Vino por el inventario?- Haciendo memoria si no le había faltado nada.

-¿Eh? Nooooo, eso lo hace papi.- Hace un gesto con la mano, restándole importancia.- Yo no entiendo de esas cosas

-¿No estudiaba administración?

-¡Solo hasta que mi carrera levante vuelo, corazón!- Dice con firmeza, brillandole los ojos.- Me reuní con algunas personas del medio estos días, es cuestión de tiempo, ¡y me vas ver en todos lados!

-Oh... Felicidades.

La bajita se carcajea.- Tu emoción siempre me conmueve Hyunwoo.- Éste sólo volvió a sonreír como respuesta. No tenía nada que decirle, confiaba en la palabra de la chica, ya que conocía bien sus dotes escénicos y sus esfuerzos por entrar al mundo del entretenimiento.- Y no te preocupes, cuando sea famosa no me voy a olvidar de mis amigos... - Hyolyn se alzó de puntillas y apretó las mejillas del chico.- Podrías ser mi compañero de baile~

Sin que se dieran cuenta, la campanilla de las puertas sonó. -Eh... ¿Puedo pasar?

Un Wonho con cara expectante los mira esperando una respuesta. Shownu no da señales de contestar, la súbita aparición de su cliente favorito lo hace perderse unos momentos en su imagen, imagen que cabe destacar es la misma de siempre, pero no por eso menos poderosa ante el cajero.