Capitulo 5: Recuerdos infantiles y accidente encantador.
-¿Por qué con el tío Louis?-suspiré hondo, la verdad… no tenía las palabras para explicarle.
-yo… no lo sé, el tío Louis es muy guapo y todo… pero cuando empezamos, fue como adrenalina, como algo prohibido, no lo sé, amé ese sentimiento. No voy a negar que me siento algo… culpable, y más por la tía Emma, pero… sentí confianza con él.-bajé mi cabeza.
-Ally… tú y yo sabemos que él no era el indicado como para… fajarte casi todos los días, quizás con uno de tú edad…-
-¡¡Marco!!-le gritó Kayla. -¡cállate!-lo reprendió y él obedeció. –lo que él quiso decir es que… el tío Louis… mala idea.-negó con la cabeza.
-lo sé.-bufé. –pero ya, pasó todo, lo único que me queda es seguir con mi p*** vida.-rodé mis ojos.
-como sea, vamos a clases o nos matarán.-reímos.
Los tres comenzamos a caminar por todo el campus, sentía que estaba en mi casa, cuando era niña siempre venía con mis padres, jugaba en los jardines y corría por los pasillos cuando todos estaban en clases.
*Flash Back*
#Narrador.
-¡¡wiiii!!-Ally corría por los pasillos de esa universidad tan grande mientras ____ (tn) la perseguía por todas partes.
-¡Ally!, ¡no corras!-____ (tn) trataba de atraparla pero no podía.
-¿qué pasa aquí?-el padre de ____ (tn) salió de su oficina con Harry a su lado.
-Ally corre por todos lados y es muy difícil de atrapar.-ambos caballeros sonrieron y la vieron correr.
-yo me encargo de ella.-dijo Harry, entonces fue corriendo con Ally y la cargo con sus brazos.
-¡Papi!-reía mientras Harry le hacía cosquillas.
-Sabes que no debes de correr en los pasillos.-le dijo ____ (tn) y recibió a la niña con sus brazos abiertos.
-solo jugaba.-dijo con su voz tierna de 6 años. -¡Papi!-llamó a Harry.
-tu hija te quiere más Harold.-bromeó, Harry sonrió y la tomo en sus brazos.
-y yo quiero a dos hermosas chicas.-entonces beso la mejilla de su hija y los labios de su esposa.
*Fin Del Flash Back*
#Narra Allyson.
-Ally... Ally... ¡¡Allyson!!-me percaté que Kayla me llamaba, parpadeé varias veces y logré regresar a la realidad. -¿qué tienes?-mi miró.
-ammm… yo… nada, ¿qué clase tienen primero?-les pregunté.
-química.-respondió Marco.
-álgebra, amo lo que estudiaré… pero odio esa materia.-hizo una mueca. –Por suerte, el tío Harry me sabe enseñar.-dijo pícara. Apreté los dientes y me puse roja.
-¡hey!, con mi padre no te metas.-me di la vuelta y la amenacé seriamente con el dedo índice.
-perdón.-alzó las manos a la altura de sus hombros en forma de rendición. –pero… tu padre… y lo sabes… es todo un…-
-¡cállate!-la interrumpí. –Te prohíbo que digas esas cosas de mi padre.-asintió y caminamos.
Yo sé perfectamente a lo que se refiere Kayla, durante toda mi vida he visto a más de una mujer volteando a ver a mi padre en los centros comerciales cuando vamos de paseo o a comprar cosas para mí, a mi madre se le suben los intestinos a la boca cada vez que una chica se acerca y le coquetea poniendo sus ojos en más de una zona del cuerpo de mi padre, tomando sus extensiones de cabello en los dedos y jugueteando para ver si mi padre caía en uno de esos trucos, por suerte… él no es así. Últimamente a mí me confunden con una “amante” que los empresarios como él suelen tener, aunque eso sirve de que no se le acerquen, es algo… incómodo.
Por otra parte, mi madre también tiene lo suyo, varios hombres se acercan a ella, le coquetean y hasta preguntan si soy su hermana, odio esos momentos. Una vez mi padre estuvo a punto de pelearse con un chico que le hablaba a mi madre, fue uno de los momentos más alarmante de mi vida.
Saliendo de los recuerdos me encontré con las escaleras y un par de salones más hacia el fondo, cuando me di la vuelta, los chicos se despedían de mí para irse a sus clases. No me quedó de otra que seguir el camino sola, subí las escaleras hasta llegar a un segundo piso. Miré a ambos lados por los pasillos y fui hacia el lado izquierdo. Saqué mi horario y lo observe por unos minutos mientras caminaba, en ese momento, sentí una fuerza muy dura chocar contra mi cuerpo haciéndome perder el equilibrio. Una mano tomó de mi muñeca y me hizo recuperarlo.
-¿estás bien?-me dijo cuando regrese en sí.
-¡¿pero qué rayos te…?!-me detuve al ver al chico que tenía en frente de mí.
Perdón
Perdón
Peerdooon...
Lose me odian sorry