Almas Gemelas (Saeyoung ×MC) [Terminada]

XXV

(...)

Ambos iban en silencio, no habían dicho nada desde lo antes sucedido.

MC buscaba alguna oportunidad de hacerle algo a Mary, tenía que darse prisa si quería matarla antes de que Saeran lo hiciera.

Iban a pie para ir a la casa de la pelirroja, ¿Por qué estaba tan lejos?

Ella no recordaba que era demaciada distancia.

Se detuvieron al llegar a una casa con puerta metálica.

Luciel se acercó y murmuró algo que no escucho la castaña. La puerta se abrió.

Entraron.

—No te muevas de aquí —la miro de reojo y frunció el ceño.

—Tch, no eres nadie para decirme que hacer —se cruzó de brazos.

Suspiró y se dirigió a su cuarto para poder cambiarse, ya se había hartado de las faldas.

MC se sentó en el sillón que estaba y bufó.

Volvió a buscar algo con que atacar o defenderse si es que le hacía algo.

No había nada, solo ropa tirada además de estar oscuro.

(...)

—Bien, andando —la castaña alzó la mirada de sus zapatos al haber escuchado una voz masculina.

Miro algo confundida al sujeto delante de ella; entonces se dió cuenta de algo: Mary no era ella, si no él.

—¿No me escuchaste? —dijo cortante.

—Ni que fueras mi padre para hacerte caso —suspiró y agarró del antebrazo a MC para levantarla bruscamente.

—No estoy de humor, ¿Okey? —la miro sin ninguna emoción.

—De acuerdo señorita Mary Vanderwood —dijo irónicamente.

—Ja, ja, muy chistosita —la agarró de la muñeca y jalo a la cochera.

En otro lado

—Sí, salvadora. Ella está trayendo a el pelirrojo a nosotros.

—Bien —se levantó de dónde estaba y sonrió—. Ve haciendo los preparativos, vamos a darle una cálida bienvenida.

—Por supuesto —hizo una reverencia y se fue del lugar.

—¿Lo ves, Jihyun? No necesito tu ayuda —miro hacia una celda y allí estaba él, encadenado y con la mirada abajo.

—No les hagas nada Rika, son inocentes.

—¡Necesitan ver las cosas de otra manera! Esa niña se lo busco por desafiarme y hacer que Saeran dejará de beber el elixir. ¡No necesito personas débiles!

—¡Ella tenía buenas intenciones! —la rubia río secamente.

—¿Buenas intenciones? Quiere deshacer mi paraíso, quiere lavarle el cerebro a mis seguidores. Cuando menos me dé cuenta, ¡Todos estarán en mi contra! ¡Así como tú!

—No estoy en tu contra... Solo quiero que...

—¡Cállate ya! —agarro un jarrón que había cerca y lo lanzó al piso.

Con MC y Seven

—¿Por dónde se entra?

—¿Quieres que haga todo yo? ¡Solo mátame de una vez! Dentro de poco te seré inútil y me matarás. Prefiero morir afuera de ese asqueroso lugar.

—Si tanto quieres eso lo haré, solo que no es el mejor momento.

MC no respondió y solo se limitó a suspirar.

¿No era el mejor momento?

Entonces solo la iba a usar para eso y después la mataría delante de su hermano.

¿Quería ver si él aún conservaba humanidad?

—Discúlpame... —lo miro. ¿Por qué dijo eso?— Yo no quería hacerle eso a tu madre es solo que... Necesitaba seguir con vida para poder ayudar a Saeran. Desde pequeños sufrimos mucho, en especial él, así que quería darle una vida feliz...

—¿Vida feliz? El lugar en el que está no es exactamente "feliz", ¿Sabes?

—No lo sabía... Deje de tener contacto con Saeran hace años y la persona con quién lo deje...

Se quedaron en silencio.

MC se puso a pensar en lo que sufrió el tiempo que estuvo a causa de su padre.

¿Felicidad? Ese lugar era el infierno.

La castaña conoció a Saeran pero se hacía llamar Ray.

Esa fase era la más vulnerable, el lado "inútil" de él según su salvadora. Un estorbo para lo que le necesitaba.

—Hay que entrar... —el pelirrojo sonrió levemente— Solo lo hago para que Saeran deje de sufrir, a pesar de lo que me hizo, hay algo de bondad en él.

—Gracias.

Salieron del vehículo y caminaron en dirección a Mint Eye.

(...)

—Esta todo listo, salvadora.

—De acuerdo, mira como sufren ellos a causa de tu traición, V.

El de cabello turquesa solo agachó la mirada.

¿Por qué su amada hacia eso ¿Qué le hizo cambiar tanto?

Todo era a causa de su niñez...

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Marintia-chan