- señorita Lena Miller ¿cuál es su motivo para viajar a la ciudad de México por tres días ? - preguntó el hombre con un leve acento latino mientras revisaba mi pasaporte y tiquetes de avión
- pasaré algunos días con unos primos que viven en la ciudad, ya sabe, es verano y mi cuerpo pálido necesita algo de sol- le explique al guardia de inmigración
- ¿intenta ingresar algún tipo de sustancias ilícita o dinero ilegal al país? Recuerde que mentir bajo la ley es severamente castigado, sobretodo con delitos tan graves--trague un poco de saliva y mire a los ojos al guardia era un poco más alto que yo, de ojos cafés y traía un bigote espeso, probablemente pasaba de los cincuenta
- no señor, soy completamente legal, puede revisarme si no esta seguro de eso- no sabia como podía mentir tan bien en un momento como este, pero estaba funcionando
- continúe, hemos terminando de revisar su equipaje - dijo mientras me empujaba hacia la máquina escaner, esta alumbró en luz verde lo cual indicaba que podía pasar sin ningún problema
Había llegado a la ciudad de México, había sido unas largas horas de viaje desde los Ángeles, habia estado preocupada pero el saber que Lena y sus bebés estarían bien me tranquilizaba un poco
Se preguntaran como logre convencer a mis hermanos de hacer su trabajo sucio, no fue muy difícil, luego de insistir bastante tiempo al final fastidie tanto a Jean y Tyler que logré que aceptarán, inmediatamente Jean llamó a su mejor amigo Mark Darell, un experto en falsificación de documentos para que realizara una identificación, pasaporte, y visa falsas y así poder comprar los tiquetes de avión
Ty comenzó a idear el plan perfecto, consiguió que nuestros primos por parte de papá, bastante lejanos, dejaran que me quera en su casa por los tres días que estaría en la ciudad, Ty no logró conseguir tiquetes de avión por menos tiempo, pero al menos tenia mi pasaje de regreso, Lena no se enteraría nunca de esto, nos aseguramos de que Marcó la llevara de visita con sus padres ese fin de semana.
Todo estaba saliendo justo como lo habíamos planeado, respecto al polvo de ángel, la manera en cómo me toco transportarlo era la parte más desagradable, había tenido que tragarme la pequeña bolsa con el contenido, lo más peligroso es que esta pudiera romperse dentro de mi sistema digestivo y yo pudiera morir, luego debía cagarla, si lo se, bastante desagradable, había podido llegar sana y salva a casa de mis primos, mis tías me habia recibido con muchísima comida lo cual fue bastante provechoso a la hora de obtener la mercancía nuevamente, la había limpiado y colocando en otra envoltura, jamás había sentido algo tan incomodo en mi vida y jamás volvería a repetirlo, Hannibal iba a caer, costará lo que me costará, ese hombre no dañaría más a mi familia
- Hija ¿estas bien? - pregunto mi tía Gloria tocando la puerta del pequeño baño
-he.. Si no se preocupe tía, creo que fue el picante, pero todo bien-respondí con nerviosismo
- ay mija, eso es mientras se acostumbra, si quiere le preparo alguito-- volvió a hablar, era una señora bastante insistente pero yo debía ser lo más amable posible
- no tiene que molestarse--insistí, ya había guardado las cosas en el bolso y entonces decidí abrir la puerta
- debería encenderlo algún fosfórito, ya se lo traigo- dijo retirándose de la puerta
Mi rostro se puso rojo de la vergüenza y decidí entrar a la habitación que habían preparado para mi, era pequeña pero cabía lo justo, una cama y un armario, debía compartir el baño con el resto de ellos pero no tenía ningún problema con eso
Le había pedido la clave del wifi a uno de mis primos, Jose el más joven, podía tener mi edad, era un chico bastante recatado y silencioso pero parecía ser divertido cuando tomaba confianza, ellos eran tres, el segundo se llamaba Rafael, ese chico hablaba hasta por los codos, no hacia pausas para respirar y sólo hablaba y hablaba, y su hermano mayor Miguel Ángel, el si era un poco más maduro, pero bastante divertido y bien vestido, también hablaba bastante pero no tanto como su hermano Rafael, cabe resaltar que sólo viven con su madre y la hermana de su madre, nuestra tía Marta ellas eran sobrinas del papa de Greg, quiere decir, primas de mi padre, los árboles genealógicos dan dolor de cabeza lo se, no hablaré más de eso, a lo que venía
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Ellos Y Yo [#1]
RomanceZenda Miller, la perfecta chica de papa, criada en los lujos de Los Ángeles, es la menor de una numerosa familia, vivió toda su vida por debajo de sus hermanos mayores quienes desbordaban apariencia y sobretodo renombre. Aunque nunca le faltó nada...