Muerte

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Puedes saber el momento en el que la muerte llegará a ti, quizá no es como una carta o una llamada, esto no es una película, solo hay un presentimiento en el fondo de nuestro corazón y una extra ansia que invade y nos hace querer hacer ciertas cosas. Las personas en los velorios suelen comentar ese tipo de cosas.

"Él volvió a su ciudad natal" "Habló con su hermana después de años de no hablarse" "Empezo a decirme como quería que la enteraran". Aunque la muerte sea sorpresiva y violenta, algo que no se esperaba... Bueno que no sé esperaba para los humanos. Ustedes saben, planes, pequeños planes que se enlazan para llevar a cabo el gran plan divino.

Y para seres que la muerte sólo es un paso para algo mayor, a Dios no le importaba acabar "inesperadamente" con alguna vida para lograr su juego perfecto.

Tadfield es un pueblo pequeño y bastante agradable. Originalmente el padre de Deidre era de ese lugar al que siempre añoro volver, ya saben ver a sus amigos de infancia, ver la casa donde creció. Ver aquel gran jardín donde jugaba y de vez en cuando robaba manzanas que sabían tan dulces que bien sustituian a cualquier caramelo.

Así que un día lo hizo, viajo de forma repentina a este lugar y se llevó con el a Dreide que para entonces era una jovencita de 16 años. No... No, quiten el pensamiento de que el padre morirá, al menos el de ella no lo hará. Justo un día después de una reunión de amigos de infancia, como si sólo esperase por eso, el corazón del señor Young se detuvo de manera repentina y vaya que él era unq persona con una salud muy envidiable.

Entonces todo el pueblo vistió de luto y sintió la sincera tristeza por aquel tan buen vecino. Pueblo pequeño, todos se conocían. El velorio fue muy solemne y sencillo, lleno de gente que andaba de aquí para allá dando el pésame a la esposa e hijos de aquel buen hombre. Aunque Arthur intentaba ocultarse de todo este protocolo que le parecía terrible por el momento. Él sólo quería lloraré la muerte de su Padre de manera solitaria y si por él fuera, en ese mimo instante le gritara a todos que se fueran y les dejaran en paz, lloraría en el sueño como un niño que hace berrinche.

Pero ahora sólo soportaba aquella incomoda y estúpida ropa, asi que se armo de valor y siguió estrechando manos de los vecinos, intentando ser fuerte por su madre que parecía que en cualquier momento se desmoronaria. Cuando la mano de Dreide le estrecho l suya él ni la noto, pero la notaria, el padre de Dreide que también era amigo de la madre de Arthur, había insistido por ayudarles.

Con los días se notaron de manera mutua, de pronto se sonrían y de pronto cruzaban charla burda de alguna que otra cosa, después de unos meses ya iban por helados. Aunque a Dreide le aburría lo limitado de los sabores, no le aburría la compañía en absoluto y cuando ya acordaban la boda de ambos se llevaba a cabo.

La mayoría de los humanos no conocen a la persona ideal y la mayoría son demasiado supersticiosos para llegar a pensar que un velorio es el lugar donde encontrar una. Pero los planes de Dios son demasiado extraños, así que esa fue la forma en que decidió que se conocerían los padres del anticristo. Aunque ni el padre del anticristo lo supiera y de mientras lo dejó jugar con una pareja distinta en un país muy distinto y el tiempo hacía que otra pareja se uniera para cuidar a un niño diferente. Aquello sería un juego divertido a tres cartas que quedaría gracioso de contar.

Fictober 2019 Good omensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora