Solo una cosa te diré, con la hija del diablo jamás desee que sea tu enemiga, su padre es el rey del infierno y castigarte será un placer.
Un mafioso después de muchos intentos con su esposa no logran concebir un hijo, Martín Diamonds hace un trato...
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Narra Jade
Él niñero piensa que soy una rubia tonta verá que soy más inteligente que él. Termino de ducharme para arreglarme (imagen en galería) tome mi bolso y salí de la habitación evitando a toda costa el niñero.
Tomé uno de mis autos saliendo poco a poco, conduje por las calles de la isla hasta llegar a uno de los edificios más altos dejando unas letras gigantes en color rojo "LUXE" se podía leer desde lejos aparque entrando al club.
La música del momento sonaba a todo volumen, personas bailaban tan pegadas mientras sostenían un vaso con alcohol, drogas, mujeres, sexo y un buen ambiente era lo que este club ofrecía. Un hombre de mirada profunda observaba desde un pequeño balcón con dos mujeres a su lado bebiendo.
Tomé asiento en la barra pidiendo al barman un poco de vodka, al voltear pude ver a mis dos amigas entrar bailando al ritmo de la música mientras se acercaban hasta mi.
Danna: ¿Estas lista para esta noche? Jade: siempre (le sonrió) Ivanna: esas son mis perras (nos levantamos a bailar)
Narra Raymond
Observo una vez más la puerta de aquella niñata, las luces estaban apagadas al ver la hora supuse que estaba dormida.
Mi hora de dormir estaba llegando cuando decidí espiar un poco y confirmar que ella estuviese durmiendo note que su habitación estaba completamente sola y su cama tenía un bulto de almohadas alarmado llame a todos los hombres a buscarla.
La niñata no estaba en casa, se había escapado.
Con los nervios de punta buscamos a la adolescente, en el garaje faltaba un Audi A3 blanco, su celular estaba apagado era algo abrumador, mi jefe jamás debería enterarse.
Raymond: ¿La han encontrado? (Pregunto al otro guardia) Xx: están rastreando el auto. Raymond: tenemos el tiempo contado. Xx: lo sabemos, dicen que esa chica es peligrosa cuando anda suelta. Raymond: lo sé (acarició el puente de mi nariz)
Después de mucho la ubicación del auto estaba en tiempo real, un club de los más lujosos daba una fiesta como todo los días, con escoltas de más nos encaminamos en busca de aquella niña.
El tiempo del camino se hace eterno, cuando por fin llegamos tratamos de no levantar sospechas entramos al dichoso club con un pequeño show que tres adolescentes estaban dando al bailar tan sensual con el jodido dueño del bar.
Vestidas tan provocativas y bailando sensualmente eran el plato fuerte de la noche, tres guardias se encargaron de alejar a las chicas de los ojos de esas personas, cargue a Jade como un saco de papas hasta la camioneta estaba demasiado ebria como para negarse, pataleaba y gritaba para soltarle.
Raymond: deja de moverte. Jade: bajame (gruñe) es una orden niñero. Raymond: no lo haré y guarda silencio. Jade: te ordenó que me bajes (golpea mi espalda con sus puños) Raymond: ya te lo he dicho niñata, no lo haré. Jade: no soy una niñata (intenta bajarse)
Llegamos hasta el auto, la dejé lentamente para no golpearla le puse el cinturón mientras maldecía a todo mundo a los pocos minutos de camino quedó profundamente dormida.
