Solo una cosa te diré, con la hija del diablo jamás desee que sea tu enemiga, su padre es el rey del infierno y castigarte será un placer.
Un mafioso después de muchos intentos con su esposa no logran concebir un hijo, Martín Diamonds hace un trato...
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Narra Jade
Baje las escaleras tomada de la mano con mi novio, mi padre no tenía voz ni mando en esta casa mucho menos en esta relación, tomamos asiento en el gran comedor del salón, sentada alado de mi abuelo el cual ocupaba el cabezal de la mesa me sonreía con ternura mientras acariciaba mi mano, mi padre sentado del otro lado en la cabecera con su puta de lado izquierdo las sirvientas comenzaron a servir la cena.
Martín: no sabía que los guardaespaldas cenaban con sus jefes. Jade: no sabía que las putas se tenían que alimentar después de usarlas (sonrió satisfecha) Manuel: solo para que estés al tanto Martín, Raymond Ayala es el novio de mi nieta por lo tanto es parte de la familia. Jade: mi abue y yo nos vale madres lo que pienses acerca de la relación. Manuel: además, si no quieres que ataquen a tu mujer, no ataques (habla con asco) Jade: si eso se le puede llamar mujer (rodeo los ojos)
Seguimos una cena agradable con una plática entre el abuelo, Raymond y yo ignorando a toda costa a mi padre y su puta, terminamos de cenar levantando nos de nuestros lugares mi abuelo y Raymond se encaminan en la sala mientras la zorra sube a la habitación para "descansar".
Jade: abue, no sabía que dabas posada para prostitutas (miro a mi abuelo) Manuel: cuando tu hijo la llama mujer debes darles posadas pero eso sí (me sonríe) tengo un inventario de todo para que no me robe nada (nos reímos) Martín: Montserrat, tenemos que hablar. Jade: vuelvo en unos minutos abue, cuídate trajecitos (beso sus labios)
Caminamos hasta el despacho de mi abuelo, apenas entramos a la habitación mi padre me hala del brazo hasta apretar fuerte su agarre sin pensar nada estampa la palma de su mano en mi mejilla.
Jade: ¿Pero qué mierda? (Lo miro furiosa) Martín: te dije que respetaras a mi mujer (me da otra bofetada) Jade: ¡DEJA DE GOLPEARME MALDITO! Martín: la llamas puta, y la puta eres tú (me toma del cabello) la golfa que se acuesta con el hombre que se le cruce por el camino. Jade: SUELTAME .
Me tira al sofá viéndome con odio, de su bolsillo saca un fajo de dinero tirándolo en mi cara.
Mis ojos están llenos de lágrimas me está tratando cómo una maldita prostituta que ha hecho sus servicios y exije su pago, me siento humillada y ofendida salgo del despacho llorando sintiendo como una brisa fría recorre mi cuerpo.
Escucho a dos personas correr detrás de mí sin voltear atrás llegó a la habitación donde comienzo a llorar apenas mi cuerpo se deja caer sobre la gigante cama.
Narrador Omnisciente
Un fiel guardián de Lucifer observo toda la escena sin pensarlo regresa al infierno buscando con prisa a su rey.
Cuando creyó todo perdido encontró al señor estrella de la mañana haciendo su trabajo.
Lucifer: ¿Por qué me interrumpen? Xx: señor, han maltratado a su hija. Lucifer: no puede ser posible (ríe sin gracia) Xx: señor, el humano que cuida de ella la abofeteó y la ha humillado. Lucifer: pero que mierda (lo mira) Xx: señor fue horrible, su hija está hecha un mar de lágrimas.
