#33 traición

750 47 1
                                    

Narra Jade

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narra Jade

Papá llegaría está noche a casa, Lucifer se iría por unos negocios,  termine de arreglarme (imágen en galería) calce mis tacones dejando mi cabello amarrado en una coleta alta.

Termine de revisar que la cena fuera perfecta para recibir a papá, me senté en uno de los escalones de la recepción esperando su llegada.

Escucho las camionetas aparcar frente a la casa las sirvientas corren abrir las dos gigantes puertas principales, de la camioneta negra blindada sale mi padre acomodando su traje me levanto dispuesta a correr, me detengo de golpe al observar como una chica delgada de pelo corto y piel morena clara toma su mano para caminar a su lado.

Una sortija de oro.

Es lo que mis ojos captan desde el inicio, un par de sortijas de boda posan en los dedos de ambos, mi padre levanta su vista sorprendido al verme, mi furia es inreparable una sirvienta grita de miedo un reflejo de mi me sorprende.

Mis ojos son llamas, como los de Lucifer o peor.

Siento mis mejillas cada ves arder más, mi padre deja atrás a la chica intentado protegerla, camino hasta el intentado calmar mi rabia.

Jade: no quiero está perra en mi casa (siseo entre dientes)
Martín: ella no se irá, es mi esposa y la respetas.
Jade: he dado una orden (aprieto mis puños) no quiero a esa puta en mi casa.
Martín: perdón hija, pero está ves tus órdenes no serán realizadas.
Jade: ¿Disculpa? (Pregunto ofendida)
Martín: cómo escuchaste, te presento a Cristal Flores, mi esposa.

Esposa....esposa..esposa...

La puta de papá: buenas noches (me sonríe)
Jade: eran buenas noches hasta que tu presencia lo arruinó.
Martín: Jade (me reprende)
Jade: simplemente digo la verdad (habló sin importancia)
Martín: tenemos que hablar.
Jade: lo estamos haciendo.
Martín: en privado (habla entre dientes)
Jade: ajá (rodeo los ojos)

Camino al despacho con mi padre a mis espaldas, entramos a la habitación sentándome en la silla de cuero intentado calmar mi furia.

Jade: habla (lo miro sería)
Martín: no quiero que la maltrates.
Jade: lo tomare en cuenta, más no prometo nada (veo mis uñas)
Martín: no es una sugerencia es una orden.
Jade: no soy tu maldita esclava para seguir órdenes.
Martín: me vale una mierda (me mira)
Jade: a mi me vale más (lo reto)
Martín: ¿Sabes? Me cansé de tus niñerías, me tienes arto.
Jade: tu zorrita lleva menos de una hora en mi casa y ya me tiene arta.
Martín: ME VALE UNA MIERDA, ELLA VIVIRÁ CON NOSOTROS TE GUSTE O NO.
Jade: no es que me guste, es desagradable tener una maldita cazafortunas en mi casa.
Martín: estoy arto de ti (se cabrea) de tus niñerías, de tus putas órdenes ¡DE TODO!
Jade: entonces, ¿Por qué no te largas de aquí?
Martín: por qué si te dejo, toda mi fortuna se esfumara.

Observo como su rostro está rojo de la furia, su respiración es agitada por la furia que recorre cada parte de su cuerpo, intento estar tranquila pero simplemente no puedo, el hombre que creí perfecto me había traicionado.

Jade: de todas las putas traiciones que has hecho, está la pagarás muy caro (salgo del despacho)

Doy un portazo caminando rápidamente hasta las escaleras, en mi camino se atraviesa esa perra y sin pensarlo la empujó sacando la de mi camino como el puto estorbo que es.

𝑳𝒂𝒃𝒊𝒐𝒔 𝑹𝒐𝒋𝒐𝒔 💋 ||En Edición||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora