Doppelgänger

CAPÍTULO 2 - Una vida "normal"

        - Sam ¿Qué... Qué es todo esto?

        - Silencio.

        ¿Espera que haga silencio mientras veo que lanza un polvo raro por toda la habitación? ¿Acaso es normal? "Hola, soy Sam Connors y vengo a hacer brujería en tu casa".

        - Sam...

        - Deja que vengan, déjalos. ¡Déjalos!

        Todo esto se veía como un rito misterioso, debido a aquella escena mejor cerré la puerta.

        

        Al medio día buscaba en el refrigerador algo para comer, no tenía nada en mente, de repente el timbre sonó.

        - Alguien me había dicho que necesitabas compañía. - Era Ethan, llevaba unas bolsas en la mano.

        - Pues estaba equivocado, dile que ya estoy con alguien. - Dije mientras le besé.

        - También me dijo que quieres que haga pizza.

        - ¿Pizza? ¿Que hagas pizza? No sabes hacer pizza...

        - Hay muchas cosas que no sabes de mí, Gwen Smith.

        

        La cocina fue empapada con harina por todos lados, la camiseta negra de Ethan ahora era blanca, jugábamos con la masa.

        Al cabo de un rato comencé a cortar tomates para hacer salsa, y él se me asomó por la espalda tomando el cuchillo junto a mis manos, su olor me encantaba, aún sabiendo que tenía algo que decirme.

        - Déjame ayudarte Gwen. - Cortaba tomates más rápido que yo, era notable que antes había hecho esto. Sentía sus abdominales trabajados en mi espalda.

        El silencio nos invadió, traté de sonreír pero no lo lograba, había un presentimiento, algo que me hacía sentir rara. Quizás sea el hecho de tener a Sam aquí.

        - Ethan...

        - ¿Gwen...?

        - Necesito que me digas la verdad, ¿qué hiciste mientras finjiste tu muerte?

        Se separó, se acercó hasta la otra encimera y tomó un pañuelo para limpiar sus manos.

        - Gwen... - Alargó sus dos brazos apoyándose.

        - Ahora.

        - Eso no importa, Gwen, por favor, intentemos ser normales hasta que podamos. Lo que... Lo que ocurrió hace semanas sólo fue algo que pasa, algo que pasa y se supera. Algo que ambos superamos, ¿sí?

        - No somos normales... - De repente un temblor explosivo removió todo, venía del cuarto de Sam, corrimos hasta allá.

        Al entrar a la puerta, todo estaba normal, Sam arreglaba algunas cosas y parecía en silencio.

        - ¿Se les... ofrece algo? - Levantó una almohada.

        - ¿Qué fue eso? - pregunté.

        - ¿Qué "eso"? ¿Quién es ese chico guapo? - Sam se arregló el pelo al ver a Ethan.

        - Ethan, un gusto.

        Cerré la puerta y terminamos de hacer la pizza, Ethan y yo nos lanzamos al mueble a charlar. Acerqué un pepperonni a mi boca y la curiosidad no dejaba de molestarme, tengo que saber qué hacía Ethan todo este tiempo. 
Después de todo, ¿era tan malo lo que escondía? ¿Por qué no quería decirme nada?