Ella era considerada la belleza más rara de Goryeo. El había crecido con una marca en el rostro.
¿Su amor será más fuerte que la ambición y los prejuicios de aquella época?
Historia ficticia basada en el K-Drama Moon Lovers: Scarlet Heart Ryeo.
Ide...
"Tu belleza esta en tu sonrisa, en tu seguridad. Tu belleza esta en lo fuerte que te vez a ti misma"
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Narrador:
Todos peleaban, los guardias también entraron en acción al ver que otros hombre trataban de atacar al Rey. Sin embargo, su objetivo era distraerlos para matar al Príncipe Heredero.
Elizabeth no dudo en tomar una espada de un guardia caído y así defender al Rey.
—¡Princesa! ––el Rey se asustó al ver que la Princesa clavaba la espada en un hombre que intento lastimar al Rey.
Taejo Wang Geon sabía que ella era hábil con la espada, pero temía exponerla y que resultará herida.
Elizabeth bajo los escalones haciendo caso omiso a los gritos de él Rey, ella iba a defender al Príncipe Heredero sin importar que resultará lastimada.
La Princesa peleo con valor, el Rey en ese instante tenía recuerdos de la Princesa Mary Ann, esa fortaleza que no cualquier mujer era capaz de cultivar en ese tiempo.
—¡Omo! Majestad, la Primera Princesa puede salir herida —declaró la Reina Hwangbo.
Pero Elizabeth era ágil y los ataques los esquivaba rápidamente.
Ella noto que el Príncipe Heredero chocaba con otro, y eso le costaba trabajo para defenderse. La Princesa se dirigía hacia él, pero fue detenida por otros dos asesinos. En un abrir y cerrar de ojos, fue herido en su brazo izquierdo.
––¡Moo-yah! ––gritó desesperado el Rey.
Elizabeth mató al segundo asesino y corrió para proteger al Príncipe Heredero, poniéndose frente a él, clavando su espada al hombre que trataba de asesinarlo.
Nadie se esperaba que la Princesa fuera a matar a varios hombres. Las Reinas y Princesas miraban fijamente a Elizabeth.
Ante ello, los asesinos comenzaron a huir. El Tercer Príncipe quito su máscara y veía asombrado a Elizabeth, el plan no salio como lo esperaba.
––¡Atrapenlos! ––dio la orden el Tercer Príncipe a los soldados, mientras veía fijamente a la Princesa, sin duda la chica iba a ser un estorbo en sus planes o una aliada muy fuerte.
––¡Ejército real, sigame! ––ordenó el Octavo Príncipe viendo que el Príncipe Heredero estaba herido.
Elizabeth estaba con la adrenalina al mil, aunque ella sabía artes marciales, jamás había matado a alguien. Veía la sangre gotear en la espada, su mano temblaba, no creyó que llegara el día en que iba a usar esa habilidad para proteger a un ser amado.
Reaccionó al escuchar con desespero al Rey llamando al Príncipe Heredero.
––¡Príncipe Heredero! ¡Moo-yah! ––decía el Rey tomando de los hombros a So y quitando la máscara–– Tu... eres el Cuarto Principe ––Elizabeth volteo al escuchar las palabras de él Rey.
