Lo que pareció un hecho paranormal

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Lizzie

Matías me ayudó a bajar del pequeño salón por una escalera que estaba ahí junto. Realmente no tenía ni idea de que rayos hacia ahí.

—¿Cómo pudiste arriesgar así a mí mejor amiga Matías? — regañó Tyler una vez ambos estuvimos abajo.

Rodé los ojos.

— Vamos Ty, lo hemos hecho más veces. — comenté a la defensiva y mi mejor amigo me miró mal.

— Por donde nosotros pasamos es más seguro que un saltó así de grande Elisabeth. — dijo señalando el otro lugar con la pared más pequeña que permitía un salto seguro y aún lado el árbol que se necesitaba subir.

— Bueno, perdón Tyler. Cuando encontramos a Jordán y a Logan lo hicimos así. — exclamó Matías a la defensiva cuando a lo lejos se escuchaba el leve sonido de un piano.

Fruncí el ceño, en el colegio no había pianos, ¿De dónde podía venir ese sonido?

Y mientras una leve discusión ocurría entre mi mejor amigo y el chico al que cuidaba yo me guíe por el sonido hasta llegar al lugar donde reposaba un celular junto a una gran mancha, ese celular lo reconocía a la perfección, la funda dorada con un corazón rojo junto a un león pertenecía a Nathaniel, Holly los había pintado en la funda junto a Jordán y Logan cuando ambos niños tenían 11 años.

Y entonces supe lo que mi amigo estaba haciendo. Tyler estaba escuchando la música del celular de su hermano tratando de buscar un mensaje y es que no era la primera vez que lo hacía, al parecer, Tyler creía que su hermano le había dejado un mensaje y había intentado recuperarlo por dos días mientras se velaba a su hermano, según él tenía el presentimiento de gemelos. Es tonto, yo lo llegue a pensar así al menos, pero no destruiré las ilusiones de mi mejor amigo que solo quiere a su hermano de vuelta contra todo lo que los demás puedan decir.

"Es la mujer perfecta, sé que no te equivocabas"

Escuché en la canción y levanté el celular del suelo.

" Que no te importe lo que diga la gente,

ustedes rondan siempre en mi mente.

Solo hay que aceptar el presente."

—¿De dónde sacaste esa canción Elisabeth? — preguntó Tyler sin expresión alguna en el rostro recién llegando a donde estaba.

"Y no quiero que le vayas a fallar, como una vez yo le falle.

Solamente amigo te pido,

cuídala bien"

El celular se apagó de repente y no logré encenderlo de nuevo así que bajo la atenta mirada de mi amigo solo mantuve el celular entre mis manos analizándolo un poco.

Había escuchado esa canción antes, pero no sé dónde. Tyler por otro lado miró a Matías con enojó.

— ¿A qué carajo han venido? ¿Tratan de que me rinda ante Holly? Ella ama a Nathaniel y no quiero ser su reemplazo. ¿Es que no entienden que me hace daño que traten de llamarme como él? ¡No pueden fingir que ahora sí funcionó el plan que tenían y ahora soy yo el que estoy viajando! — exclamó con enojo. Lo miré confundida, ¿De dónde sacaba tanta pendejada junta?

— ¿De qué rayos hablas Tyler? — pregunté acercándome. El celular en mi mano comenzó a vibrar, se había encendido de nuevo.

Pestañeé atónita. Estaba 100% segura de que no había apretado ningún botón

— No ocuparé su lugar Elisabeth, nunca lo haré. Las personas cercanas me toman como su consuelo, como su reemplazo. Denis era su mejor amigo y ahora quiere ser el mío. Finge tener la amistad de hace años conmigo. Holly me cuenta a veces las cosas pensando que soy Nathaniel, dándome recuerdos que tuvo con él y seguro Nathaniel donde sea que esté me está maldiciendo por estar con la chica que quería...

El escritor secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora