Lizzie
El día tan esperado llegó después de días de organización, también el acercamiento con Matías Howard y sus amigos, que claramente venía en consecuencia y que tanto me alegraba. Estaba tan cerca de la verdad, pero lo voy a admitir, mi forma de verlo estaba cambiando drásticamente.
Las 2 horas que pasé con él en el ascensor fueron divertidas, al menos al final cuando hubo tomado confianza conmigo, pero el sonrojo de sus mejillas nunca desapareció y eso me dio mucha ternura. Matías era muy tierno.
Hicimos bromas, planeamos el evento y traté de sacar un poco de información sobre Mawritter, pero el tema fue olvidado muy rápido, ni yo le di la importancia, de alguna manera quería conocer un poco más a Matti
Pero no fue lo único drástico que pasó en la semana, ¿me creerán si les digo que en las dos publicaciones del periódico Mawritter no publicó su cotidiana historia?
Me sorprendió realmente, ¿Cómo rayos? Y no era debido a mi seguridad, una vez entraron, quedó registrado, pero después de intentar rastrearla de pronto desapareció, no como la vez pasada que me descubrió, esta vez la seguí sin delatarme y desapareció sin modificar nada. Y si, había recibido quejas por ello, pero el evento en el emporio rápido reemplazó la historia de Mawritter en cierto sentido, en los pasillos su nombre aun resonaba.
— Son 5 Euros —pidió Matías con timidez y volví al mundo real.
—Disfruten el evento— Las tres chicas alegres frente a mi asintieron emocionadas y se adentraron.
— ¿sucede algo Lizzie? —cuestionó Matti guardando los billetes en la caja metálica que teníamos, si bien teníamos dinero aun el club de cocina necesitaba ingredientes y considerando que cada que pueden ayudan en la cafetería pensamos en darles ingredientes para sus platillos.
—Nada, solo pensaba — respondí y él rio ligeramente.
—lo noté en tu cara, pero dime en que pensabas.
—pasó algo raro, con Mawritter. No sé qué pasó por su cabeza para que dejara de publicar. El otro día estaba por encontrarlo y de pronto...
—¿el otro día? —el chico a mi lado comenzó a ahogarse con el agua justo después de gritar eso.
Di palmadas en su espalda procurando que estuviera bien. Eso me asustó.
—sí, la última vez me detectó y opté por la próxima vez esconder mis códigos y eso hice, pero desapareció antes de encontrarlo. — aclaré una vez él estuvo a salvo.
Estaba pálido, eso me preocupó aún más. Generalmente tiene las mejillas un poco sonrosadas.
—¿quieres decir que si no se hubiera desconectado lo habrías atrapado? —preguntó con voz ahogada mirando el suelo.
Definitivamente estaba muy mal. Quizá el agua en sus pulmones le había causado algún daño o era muy tímido para estar afuera.
O quizá él era Mawritter.
Fruncí el ceño ante este último pensamiento. ¿Será...?
—No lo puedo creer Lizzie, estas mucho más cerca de atraparlo —dijo con emoción interrumpiendo mis pensamientos.
Pestañee sorprendida.
¡RAYOS!
—eres un idiota, ¡pensé que eras tú! — grité al borde de un infarto.
Realmente pensé que él podría ser, ¡vamos! ¡Tenía todo! Es amigo de Emily, es tímido, es amigo de dos Hacker. ¡Tenía que ser él!
— ¿Yo? ¿Qué tendría que ver yo? —exclamó de nuevo mostrando su timidez.
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El escritor secreto
Teen FictionLuego de la tormenta viene la calma; es lo que los alumnos del colegio Constell tienen muy presente y es que luego del triste invierno en el que su amado colegio fue invadido y un chico resultó asesinado, la alegría vuelve a los pasillos. Elisabeth...