El escritor secreto

Un plan en marcha

Lizzie

— ¿Vamos al centro comercial Lizzie? — preguntó Sherry con la vista en el celular mientras revolvía la comida en mi plato sacándome de mis pensamientos.

Aún seguía pensando en lo ocurrido, quería investigarlo, ¿es posible llamar a las almas y hacer que se presenten a nosotros? ¿Esto tendrá consecuencias? ¿Qué se necesita exactamente?

No podía irme de aquella tarde de viernes. La sonrisa del gemelo de mi mejor amigo no se iba de mi cabeza, ahora yo sentía que tenía algo que decirme; ahora sé cómo se sentía Tyler. Tengo la necesidad de ir de nuevo al jardín fotográfico, pero supongo que necesito el celular de Nathaniel o quizás solo necesito un objeto de él y no creo que Ty...

—¡Elisabeth! — gritaron dos chicas cada una junto a uno de mis oídos y lo único que atine a hacer fue sumirme en mi lugar tapándolos. Eso había dolido.

—¿Estás bien Lizzie? — pregunto un chico tomándome de los hombros y acercando su cabeza a mi oído.

Tenía cerrados los ojos, me dolía la cabeza por los gritos.

— Creo que debería llevarla a la enfermería, ha estado algo perdido estos días — exclamó otra voz ayudándome a levantar de la banca. Esta voz la reconocí al instante, era Tyler.

— Espera Ty, déjame unos minutos más aquí — dije volviendo a sentarme.

Agh, ¡como dolía!

— En nuestra defensa estuvimos llamándola de buena manera, ¿verdad Cely? — escuche defender a Sherry y podía jurar que a su lado su hermana había asentido.

—Es cierto, caminó como zombie y no nos puso atención. ¡Estábamos hablándole sobre un tema importante para que agregara a su periódico y venía ignorándonos! —frente a mi vi a Tyler rodar los ojos divertido, se había sentado ahí para verme mejor a ver si ya podíamos ir a la enfermería.

Esto solía pasar hace mucho, aun suele pasar cuando me presiono demasiado y supongo que el tema de Mawritter y lo de Nathaniel, sobre todo lo segundo me tenía de esa manera.

—Déjenme adivinar ese gran tema, ¿la moda? — escuche decir a Matías detrás de mí con su mano sobre mi hombro.

—Por supuesto, pero eso a ti no es tema que te involucre, aun no sé qué rayos haces tú aquí, las mesas comunes están por allá. Los demás están por llegar así que anda — exclamó Sherry con desagrado y la mano sobre mi hombro ejerció presión por unos segundos.

—Estoy aquí viendo por Lizzie, no les afecta que este aquí — murmuro Matías con timidez.

—Sí que nos afecta, el hecho de que te guste no significa que a ella también. Ahora si te puedes retirar, nuestros amigos están por llegar y no sé qué pensarán al verte a ti en la mesa de los populares — dijo Sherry con sorna, seguramente con una sonrisa de oreja a oreja.

—¿Qué te pasa muñequita? Matti ya dijo que no te molesta ti que este él aquí con nuestra amiga — defendió una chica llegando. Sin temor a equivocarme diría que es Emily, a su lado sin duda alguna debe estar Carter y Eliot.

—No te atrevas a hablarnos así — se quejó Sherry y me levante cansada de eso.

— ¡Basta ya! Tengo un dolor de cabeza de mil demonios y no quiero soportarlas — exclame levantándome. Vi a Tyler hacer lo mismo y venir hacia mí. Sherry y Cely Chasquearon los dedos tres veces alrededor de sus rostros y comenzaron a caminar detrás de mí. Me pare en seco. —me refiero a ustedes dos. Me canse oírlas sobre moda...

Me miraron atónitas.

—¡Pero tu madre está en la industria de la moda! — exclamaron sorprendidas al unísono.