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Ese día no era como cualquiera.Era muy amargo.

Se encontraba sentado en el sofá,fumando un cigarro como cada día de su miserable vida.

El timbre de su vieja casa sonó,esto lo espantó y también lo extraño un poco.

¿Acaso era un acto de suicidio? ¿Quien lo estaba visitando?

Se levantó del sofá y a pasos pesados se dirigió hacía la puerta.

La abrió esperando a alguien que viene a cobrar la renta, o una persona amenazándolo de pagar lo que había robado.

Pero no era ninguna de esas personas en las que pensó...

Era incluso peor.

Le cerró la puerta en su cara y cuando estuvo a punto de irse,un grito de la mujer llamó su atención.

-Traigo a la niña-

Sonrió inconscientemente.

Deshizo su sonrisa a su cara amargada de siempre para que ella no sospechara de que estaba feliz de ver que aquello que alguna vez llamó escoria.

-Pasa y no molestes-

La castaña sonrió victoriosa y se adentró a la casa en cuanto me abrieron la puerta.

-¿Que es lo que quieres,Lucía? Ya no tengo más dinero.Amenzame con la policía,me da igual-

Fue directamente a la cocina para sacar una lata de cerveza.

Le arrojó una a la mujer la cual atrapó con éxito y la dejó en la mesa más cercana.

El hombre se volvió a acostar en el sofá y a jugar con las pequeñas manos de su hija biológica.

-No es por eso por lo que vine a tu pocilga-

Furioso se levantó del sofá y le dio una fuerte cachetada a la mujer.

-¡Puedes meterte conmigo y hacer lo que quieras! ¡pero no vuelvas a llamar así a mi hogar!-

Con el seño fruncido se volvió a acostar en el sofá evitando no golpear con la pequeña niña.

-Enogado-

Murmuró y río la pequeña niña mientras reía.

La azabache acarició su mejilla.

Por un momento había olvidado el temperamento de el hombre.Eso solo la hacía preguntarse ¿cómo su hermana se enamoró de él?

-Bien...Necesito de tu ayuda-

-¿Que no entendiste el mensaje? No pienso ayudarte en nada-

-Solo déjame que te expliqué.Es por una buena causa-

-Claro,como cuando me aléjate de mi hija-

Tomó a la pequeña en brazos y empezó a jugar con ella.

-¿No me vas a ayudar? Me preguntó que va a pensar Jane de todo esto...-

Colocó una sonrisa maliciosa.

Había tocado el punto débil de aquel hombre.

-¿Que? Es imposible,tu la llevaste a un maldito internado-

-¿Quien dijo que no puedo ir?-

-Eres el maldito diablo,me aléjate de ella y me hiciste decirles las palabras más hirientes del puto planeta.¿Que otras cosas has hecho eh? Deja de arruinar las vidas de las personas-

-¿Que más he echó? Pues...-

Fue interrumpida.

-Ni lo menciones,maldita.Dime que tengo que hacer-

-Agarrate de tu asiento.Esto se pondrá interesante-

Tal vez en otro universo...

En otra vida...

En otro tiempo...

Tal vez ella hubiera sido buena persona.

Amar a las personas no siempre es bueno.

Porque que veces llegas a hacer cosas malas.

EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora