I want you [Billy Hargrove - Fanfic ST]

CAPÍTULO 22

[Editado]

BONNIE

Abrí los ojos subitamente al notar una fría gota resbalar por mi pierna, que descansaba bajo el grifo de la bañera.
En algún momento me quedé dormida, habían pasado horas, incluso ya podía ver la oscuridad a través de la pequeña ventana del baño.

Estaba atada de pies y manos así que no tenía movilidad, prácticamente. Y mi cabeza aún tenía la zona del golpe resentida.

Cuando me adapté mejor al despertar, intenté agudizar el oído para saber si Billy seguía allí, y poder buscar una forma de escapar. Hoy era 4 de Julio para mi desgracia, ninguna familia se quedaba en casa en esta fecha, todos iban a la feria o por el centro del pueblo; cosa que queda lo más lejos posible de aquí, dejándome ilocalizable si empezara a gritar por ayuda en caso de desespero.

Me incorporé un poco para quedar más cerca de la puerta, puse toda mi atención en los sonidos; solo escuchaba el goteo de la bañera y el agua pasando por las cañerías del retrete.

Me sobresalté cuando la puerta se abrió de golpe, dejando ver a Billy. Bueno, al cuerpo de Billy mirándome fijamente.

—¿Qué piensas hacer conmigo? —me adelanté antes de que pudiera hacer o decir nada.

Mientras hablaba le miraba fijamente a los ojos sin pestañear ni un segundo; sus ojos estaban llorosos, algo rojos y oscuros, pero esta oscuridad era diferente.

—...Mantenerte al margen —me miró unos segundos antes de contestar.

—¿Qué? ¿Por qué? —mi idea era empezar a aceptar mi esclavización, con lo cual, mi muerte también.

—Recuerda, estoy en su cabeza, y tú... —se acercó a pasos lentos, agachandose junto a la bañera, posando una mano en esta mientras la otra me señalaba levemente —. Tú eres un arma muy potente. Si te llevara conmigo, tendría que acabar también con esa cría, y tu querido hermano —su voz era lenta y profunda, como si hablara a través de un walkie distorsionado.

—¿Es decir, que me has retenido aquí para nada? —solté una risa seca.

Quizá el pensaba que me mantendría al margen atandome en una bañera, pero haría todo lo posible para salir de aquí y luchar junto a los demás, dejando libre a Billy de una maldita vez.

—Claro que no. Eres una distracción.

—¿Para quien?

—Para ellos. Si tú estas aquí, tendré el camino libre para acabar con ellos, para acabar con todos —su tono era cada vez más fuerte; insisto, no pestañeé ni un maldito segundo, cosa que me dejó ver la fina lágrima que corrió rápido por la mejilla del chico.

—Billy...por favor, no hagas esto.

—Billy ya no está —posó su mano en mi barbilla, acariciandola mientras hablaba.

Entonces me di cuenta de que nada pasaba, no reaccionaba como antes.
El azotamentes le había consumido por completo. Solo de pensarlo mis nervios aumentaron aún más, y lágrimas empañaron mi vista, pero no iba a derrumbarme frente a una estupida sombra que, juro por mi vida, seria aniquilada esta misma noche.

—No llores. Él te quería, si es eso lo que quieres escuchar —a pesar de sus palabras "compasibas", su tono seguía igual de monótono y falso.

Se levantó sin más y salió del cuarto, no sin antes darme una larga y profunda mirada, una última mirada. Entonces fue cuando cerré mis ojos fuertemente, dejando escapar las lágrimas apelotonadas.