Al oscurecer decidí que era
tiempo de regresar a casa, el trino
de las aves fue sustituido por el
ulular de los búhos. La luna
apareció en la bóveda negra y las
tímidas estrellas fueron
colocándose una a una en el
firmamento.
Me encanta el bosque, a veces
deseo vivir aquí, ajena al mundo
que me rodea, jamás haber sido
elegida por velez y poder ser libre
de extender mis alas y volar
donde quiera.Visualizo mi hogar, arrastro mis
pies dentro de la casa y escucho a
papá hablar con alguien, mi
corazón se regocija al reconocer la voz. Me apresuro y cuando lo veo,corro directo a sus brazos y él me recibe de buen agrado.-¡Volviste! -Exclamo llena de
felicidad.-Hola traviesa. -Jeremy me
estrechó con fuerza, sintiendo la
calidez de su abrazo.-¿Cuándo regresaste?
-Hace solo un par de horas.
¿Dónde estabas?
Sostuve la mirada de mi hermano,
le sonreí, me alegraba tanto
tenerlo conmigo de nuevo.-Los dejo solos. -Comentó papá.
-tn, hablaremos después.Se retiró y sentí un nudo en el
estómago, luego me preocuparía
por eso, Jeremy está conmigo y es todo lo que importa en ese
momento.
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El Rey De Los Vampiros -Christopher velez y tu-
RandomTú eres mía TN . -Susurra en mi oído, erizando los vellos de mi nuca. -¡Jamás! -Exclamo, intentando zafarme de su aferre. -No puedes huir de mí. -Besa mis labios con tosquedad. -Nunca te daré mi amor. -Forcejeo, pero solo logro que me aprisione más...