capítulo 7

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Camino por las transitadas calles
de la ciudad, es noviembre y el
frío se asoma dando aviso que el
invierno se acerca. La desventaja
de no ser una convertida es que
sientes frío o calor, igual que los
humanos.

Mi mamá era humana cuando
conoció a papá, tiempo después
de nacer yo, fue transformada en
vampiro, pero al hacerlo perdió
su rumbo, no pudo controlar su
sed de sangre, y mi propio padre
tuvo que cobrar su vida. Debió ser duro para él porque la amaba; tomó la decisión cuando ella intentó hacerme daño, y lo
hubiera logrado si él no
interviene. Apenas la recuerdo,
recién había cumplido los tres
años de edad, cuando sucedió.

Muchos vampiros optan por
casarse con humanas para
obtener descendencia. Los
hombres por alguna razón que
está fuera de nuestro
entendimiento, pueden procrear,
pero no así las mujeres que han
sido convertidas. Las leyes
permiten estas uniones, siempre y cuando, en algún momento la
persona llegue a ser uno de los
nuestros, no se permiten mortales en Villa Olivia. A veces pienso que
por eso me escogió Christopher, al ser
híbrida yo le puedo dar hijos, a
diferencia de las otras, que jamás sabrán lo que es la maternidad.

La ciudad fue fundada hace mil
años en la zona sur de Inglaterra,
en New Forrest, por Olivia
Newman, una vampiresa que
harta de convivir con los
humanos, construyó un poblado
rodeado de bosque, compró una
gran extensión de tierra al
gobierno inglés, donde solo
vampiros pudieran habitar.
Primero fueron unos cuantos,
pero con el tiempo la población
fue creciendo y adquirió una
monarquía que inició con ella.
Cuando cumplió los cien años de
gobernar decidió elegir a su
sucesor, volviéndose una
tradición.

Nadie volvió a saber de Olivia, su
desaparición es un misterio, y en
cuanto a nuestro anterior sucesor,
decidió aventurarse por el mundo,
después de un sabio reinado. No
entiendo por qué dejó a Christopher
como nuestro líder, creo que ha
sido la única mala decisión que ha tomado durante su mandato; sin embargo, velez no podrá ser
coronado rey hasta después de
nuestra boda. El estómago se me
revuelve de solo pensarlo.

Recuerdo que cuando era niña
estaba enamorada de él,
suspiraba al verlo y fantaseaba
que al crecer sería su esposa, pero
al madurar comprendí que no era más que un hombre soberbio, al
cual aprendí a despreciar, al ver
el trato dado a los demás.
Se desconoce su pasado, dicen que las experiencias te marcan, pero ¿Qué pudo sucederle para que actúe de esa forma? Voy tan
absorta en mis pensamientos que
choco de improvisto con alguien,
perdiendo el equilibrio, me voy de
espaldas pero unos fuertes brazos
me rodean impidiendo mi
aparatosa caída.

-¿Nunca se fija hacía donde va
señorita Collin?
Al escuchar esa voz, un sabor
amargo recorre mi paladar,
¡Maldición! tenía que topármelo a
él precisamente, hoy no es mi día
de suerte.
Me libero de su agarre y
sin contestarle trato de continuar
mi camino.

-No la he autorizado a retirarse.
-Me indica.

Me detengo y cierro mis manos en
puño tratando de controlar la
rabia que ya se apodera de mí.
-¿Puedo retirarme señor?- Le
pregunto, haciendo acoplo de toda
mi fortaleza por sonar amable,
pero las palabras me han salido
entre dientes.

-No.-Responde cortante y puedo
ver como se forma en su cara una
sonrisa retorcida de media luna.

-¡No! -Exclamo elevando la voz.

-"No". - Repite el tranquilo
mirándome a través de esos
cristales de miel que son sus ojos.

-¿Qué quiere decir con "No"?
-Insisto, perdiendo la paciencia.

-La creí más inteligente, pero me
equivoqué si no comprende lo que esa palabra significa. -Manifiesta sereno.

-¿Qué está insinuando? -Le
reclamé.
No respondió, solo sonrió
divertido, mientras que yo sentía
como cada músculo de mi cuerpo
se tensaba.

-Es usted un ser despreciable. -Le
afirmo sin medir mis palabras.

-Controla tu lengua niña. -Dejó ir a manera de advertencia.
Quise contraatacar pero mi padre
apareció de la nada.

-Christopher-se
dirigió a él.

-Cuida la boca de tu hija Bernard,
vierte su veneno sin medir las
consecuencias.

-Perdónela mi Señor, es aún joven e imprudente. -Papá mantenía la
vista abajo, me enfermaba su
actitud sumisa ante él.

velez se retiró, siguiéndolo la
escolta que siempre lo
acompañaba, alrededor de cinco
vampiros que darían su vida por
proteger la suya.

-Vete a casa tn, hablaremos en
la noche.- Sentenció mi padre
mirándome otra vez con
desilusión.

No me importa lo que Christopher
diga o haga, pero que mi papá se
exprese de una forma tan
despectiva conmigo, sí me duele.

Las personas que fueron testigos
del espectáculo, murmuran entre
ellos, comparten pequeñas
sonrisas de burla hacía mí, o eso
supongo; no lo soporté, sali
corriendo sin rumbo.

Terminé en el bosque, en mi lugar secreto, un
viejo árbol con una casa
construida en su alta copa.
Subí los escalones improvisados
clavados en la corteza y al llegar
me senté en una orilla y comencé
a llorar. Odiaba hacerlo, pero lo
que más me mortificaba era
quién había provocado mi llanto.

Me quede ahí hasta que apareció
el atardecer en el horizonte. Una
fresca brisa acarició mi rostro
limpiando el último rescoldo de
lágrimas en mis mejillas. Se
respiraba un ambiente de paz, me asomé por la diminuta ventana y cerré los ojos, me fui relajando
hasta estar por completa mente
tranquila.

bueno espero que les guste 😙😙

El Rey De Los Vampiros  -Christopher velez y tu-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora