Aun con los parpados cerrados Draco sintió como la luz de las velas le taladraran la cabeza.
¿Que había pasado?
Parpadeando pesadamente pudo reconocer las paredes de la enfermería. Simplemente genial.
Draco no recordaba con exactitud. Estaba en el comedor hablando con sus compañeros y salió harto del comportamiento de los leones, recuerda que sintió un leve mareo y que todo se volvió negro.
Volvió a gemir, odiaba caer en la enfermería por la razón que fuera, su padre no sería feliz, ya podía escuchar a lo lejos la larga retahíla de quejas que le dedicaría.
Maldita sea.
-¿Despertaste?-
Gimió otra vez, esa voz le era muy conocida, otra semejanza que lo hacía enojar.
-Muérete Potter- le dijo mientras se ponía de lado.
-Vuelves a ser tú-
-Cállate-
Draco se giró para apuntar mejor la almohada que iba a arrojarle al falso elegido, cuando noto un detalle.
-¿Qué haces aquí?-
Harry estaba a una par de camas de él vestido con pijama y arropado, con un mal vendaje en su brazo.
¿Se había fracturado? ¿Se había roto?
-También estoy enfermo- le dijo en tono inocente. Draco no se tragó. Pero antes de acusarlo unos pasos resonaron en el pasillo y al parecer iban con prisa.
-No bebas lo que te de madame Pomfrey- le susurraron y vio como el falso Harry se tapó con las sabanas y puso un biombo entre él y Draco.
Draco escucho las voces de los profesores y se volvió a acostar sin decidirse lo suficientemente rápido si debía fingir dormir o no.
-Señor Malfoy, me alegra verlo despierto, nos preocupó mucho que se desmayara a las afueras del gran comedor-
El director fue amable, pero no paro de estudiarlo, Draco se sintió juzgado y evaluado y al parecer subestimado, porque tan pronto Draco noto ese sentimiento en los ojos del director este se volteo para dar toda su atención a el falso Harry
-Joven Malfoy ¿cómo se encuentra?- Madame Pomfrey se acercó a él con un rostro preocupado, mirando de reojo como los otros se acomodaban alrededor de la cama del falso elegido. Draco puso una cara compungida de esas que le quedaban muy bien.
-Mucho mejor madame, pero aún me siento débil y algo mareado-
La enfermera apretó los labios e hizo una mueca, Draco no sabía con seguridad si le creía o no. Pero la mujer no podía ignorar lo que Draco le decía.
-En ese caso, será mejor que descanse jovencito- le extendió un vial azulado- Tómesela y duerma, mañana estará mejor- la mujer se le quedo viendo y Draco no tuvo otra opción que destapar el vial y acercarlo a sus labios, fue evidente al olerlo que tenía elementos somníferos.
Draco suspiro y lo tomo de un trago.
-Bien jovencito descanse- la bruja disminuyo una luz cercana y movió un biombo a su alrededor cortándole la visión del resto de la enfermería.
Draco se puso de costado sintiendo ya el pesor en los parpados, con cuidado abrió uno de sus puños y descubrió el frasco que había escondido en una de sus manos y rápidamente vació el contenido de su boca a la botella deseando haberlo hecho a tiempo, aunque su mente rápidamente se empezó a poner nublosa, pudo escuchar claramente las voces cercanas.
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Corazón de Mago
RomanceDraco lo mira comer, caminar y reírse, siendo todo lo Gryffindor valiente y torpe que debe ser. Pero entonces ¿porque su corazón le dice que aquello no es correcto? Potter tiene algo que no encaja, lo sabe y piensa averiguarlo.