Mas allá del bien y el mal

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Breve Historia de Recuerdos: Jeon Jungkook

„¿Es el hombre sólo un error de Dios? ¿O Dios sólo un error del hombre?."

                                                                         Friedrich Nietzsche

No era extraño para Jungkook encontrar prostitutas vomitando en el baño o durmiendo en los pasillos de la casa, mucho menos escuchar gemidos y obscenidades durante largas madrugadas. Desde la muerte de su madrastra, sus hermanastros, o hermanos, cómo el les consideraba, convirtieron aquel sitio en algo así como un hotel de mala muerte.

El siempre considero que no debía de entrometerse en los asuntos de sus hermanos, sobre todo por que se veía a si mismo como alguien quien se cuela a una familia y casa que no le pertenece. Nunca guardo rencor a Yang Mi, su madrastra, supuso que, después de todo, su padre merecía morir.

Su madrastra y hermanos le amaban y él lo sabia perfectamente por que también los amaba.

Su corazón, bonito por naturaleza, le hacia apreciar la belleza de las cosas, amaba perseguir insectos y mariposas, dibujar con crayones paisajes que después le obsequiaría a su madrastra en muestra de gratitud por no abandonarlo. Comenzó a pintar por mera casualidad, después de recibir clases básicas en la escuela secundaria y cuando finalmente dedicó tiempo a ello, pudo pintar preciosos cuadros que le regalaría a su madrastra, el mas bello, una pintura familiar.

 A los 13 años, empezaría su inigualable amor por la ciencia y la literatura, que eventualmente le forjarían aquella personalidad curiosa y aventurera.

Jungkook repudiaba la violencia, quizá por ello se negaba rotundamente a aquel futuro que le esperaba, y eso era entrar al mundo de la mafia junto con sus hermanos, tenia la edad suficiente para saber que eso no terminaría nada bien. Gracias a eso también conoció a Jimin, el "niño miserable" del colegio, al que todos molestaban por ser pobre, además, el hecho de que Jimin tuviese rasgos finos hacia que los demás le etiquetaran de "marica". Jungkook fue algo así, como un protector para Jimin, pero más que eso, su mejor amigo.

La última vez que jugó con Taehyung, este último estaba por cumplir 16, se adentraron en un charco de lodo a "luchar", sonreían y les causaba una risa agotadora ver como el otro tenia el rostro completamente lleno de barro, claro que después de eso recibirían el regaño de su vida y un par de golpes por arruinar la ropa costosa que ahora Seok Jin podía comprarles, es por ello que Yang Mi estaba furiosa. Jungkook aun recuerda eso, pero también recuerda una plática, Taehyung estaba muy ebrio y aun era demasiado joven para siquiera probar alcohol.

—Me alegra que seas mi hermano, en verdad que si— Taehyung sonreía sin aparente razón alguna y Jungkook no comprendía nada de lo que Taehyung intentaba decirle. —Pero... hay un vacío en mi vida por ello. Quizá es capricho, pero se que muchas cosas que son, pudieron haber sido de otra forma.

Jungkook en verdad estaba confundido, pero Taehyung continuó para aclarar algunas cosas 

—No te confundas, no estoy molesto contigo, no es tu culpa, ni mía. Es la vida, es el destino ¡Es dios!— gritó a los cielos elevando la botella de vodka que hurto a escondidas de la vitrina de cantina que tenían en casa.

Después de eso, Taehyung inició en el de forma prematura su vida en la mafia, pero era evidente que mucha de su inocencia se había perdido desde hacia ya mucho tiempo.

Cuando Yang Mi murió, comenzó el calvario para Jungkook, sobre todo por las noches de fiesta de sus hermanos, muchas veces el se escapaba y pasaba la noche en casa de Jimin. Otras se encerraba en su biblioteca personal e intentaba ignorar la música y el olor a tabaco que inundaban la casa. ¿Podría hacer algo al respecto? Consideraba que no, que no tenía derecho a pedir nada simplemente por sentirse como "un arrimado" alguien ajeno, pero realmente ni Yang Mi, ni sus hermanastros lo vieron jamás como alguien que sobra.

¿El peor de sus sustos? Encontrar a prostitutas por la casa y que estas se le ofrecieran, como aquella vez que una consiguió entrar a su habitación y después de rechazarla, aun cuando ella le expuso sus senos y el simplemente se cubrió los ojos con ambas manos y empezó a llorar, era un niño asustado. Ella se burló de el, pero finalmente se fue.

Al siguiente día, encontró a la mujer muerta en el pasillo.

Jungkook decidiría que jamás querría darles problemas a sus hermanos y estaba dispuesto a estar con ellos por siempre, les proporcionaría nuevas drogas que podría crear en su laboratorio a base de plantas y alucinógenos, pero se alejaría de la parte en la que implicaba asesinar o torturar. Mientras tanto les obsequiaba a sus hermanos, tal como alguna vez lo hizo con Yang Mi, preciosas pinturas. Sobre todo a Seok Jin, ya que el era sumamente amoroso con el.

¿Quién diría que la pintura que hizo de su musa pelirroja era un agradecimiento a Taehyung por hacerle conocer a la mujer que deseaba con toda el alma?

Jungkook creía, muy en el fondo de su ahora maniática mente que, en parte, si los Kim habían arrebatado la vida de su padre, el podría obtener a una damisela por aquello ¿No? Annalisa podría hacer equitativo aquel asunto y la "deuda" estaría saldada.

Además, ¿No era Annalisa el resultado de un aterrador pecado de su madrastra?

Jungkook la pasaba terriblemente mal cuando su mente se ponía en la posición de juzgar a los demás, de ser un "Dios" que podía señalar en aras de su beneficio, pero... Si Dios no existe, por lo tanto sus aclamados mandamientos, no tendrían ningún sentido ¿Cierto? Y el podría anteponerse a aquello y faltar cada uno de ellos, pero eso era lo que su mente le jugaba, en su corazón, estaba el amor que tenia a sus seres mas cercanos, a la naturaleza y al vida en si misma, eso es lo que le tenia cuerdo, en parte. Pero es como si aquella pelirroja extremadamente hermosa fuese la representación del pecado y de lo inmoral, de lo que no se atrevía a hacer por los valores inculcados.

¿Qué mierda significaba la vida si no se le puede gozar en plenitud? ¿Acaso no era una clase de infierno obligarse a creer que no se desea a alguien? ¿Seria que esta vida es lo que conocemos como infierno por la infinitud de normas que prevalecen para reprimirnos de nuestros instintos de follar, asesinar y hacer lo que nos plazca?

Jungkook llegó a la conclusión de que tal vez debería de aventurarse a probar lo inmoral y lo que va más allá del amor ¿Por qué no?

No por Annalisa, no por su deseo sexual, tampoco se trataba de una adrenalina injustificada o satisfacer su deseo de justicia asesinando a aquellos que hagan mal a quienes son cercanos a él, era algo que surgía desde su interior, probar aquello que nos tiene prohibido la sociedad, Dios o cualquier mierda que se nos dice para privarnos de lo que verdaderamente, según las deducciones de Jungkook y su enferma obsesión por los senos de cierta pelirroja, es la vida.

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Les agradezco tanto por leer esta historia, ya solo quedan unos cuantos capítulos por subir,   espero la hayan disfrutado. Quiero hacer mención de mis inspiraciones para esta historia.

El primer dato es que, la sustracción de Annalisa, la base en una historia completamente real, la cual no es tal cual descrita en la historia, la verdadera chica  a la que hago referencia fue raptada por su madrastra y después esta la obligo a casarse con su hijo, un drogadicto del cual ya no se sabe mas nada, pero no se preocupen, el asunto esta resuelto y ella esta en el lugar del que nunca debió salir. 

Me encanta leer el Marques de Sade y del libro "Juliette" surgió la idea de historia de Annalisa.  

En otros capítulos del diré en que mas me base. Mil gracias por leer. 

 

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CASARSE A LOS VEINTIUNO/JK/YOU/THDonde viven las historias. Descúbrelo ahora