one shots; harry styles

lolita

2018

Lorraine.

Las clases en la escuela eran normalmente largas y cansadoras para todos los alumnos, incluyendome. Pero afortunadamente hoy es diferente, un día especial para mi, porque hoy cumplo años, pero no es como cualquiera, es mi cumpleaños número 18.
La emoción y felicidad predominaron en mi desde que comenzó el día y no se han marchado, pues aún creo que hay motivos por los que mantener mi alegría además de ya estar obteniendo la mayoría de edad, debido a que mis amigos no me han hecho una gran sorpresa hasta ahora.
Sonrío mientras observo al profesor anotar cosas irrelevantes en el pizarrón, ya quiero saber si planean sorprenderme en la escuela o prepararán algo para mi en la noche, quisiera que fueran ambas.

Los minutos pasan lentos a mi alrededor pero fugaces en mis delirantes pensamientos acerca de qué podrían hacer ellos o mis padres, estos últimos en la mañana dijeron que harían algo que me encantaría por la noche, tal vez planean algo en conjunto con mis compañeros.

El fastidioso pero ahora emocionante sonido del timbre aparece en todo el edificio anunciando el final de la jornada escolar, agarro mis pertenencias ansiosa y apurada, no sin antes arreglar algunos detalles de mi apariencia, como mi falda o mi top floreado; una vez realizado todo esto salgo del aula y me dirijo a mi locker donde guardo todo cada día. Mientras pongo la clave siento varios pares de personas junto a mi, mas no les presto atención hasta que ordeno y cierro el pequeño compartimento, quería fingir desinterés. Una vez que volteo veo a mis amigas y amigos viéndome sonrientes y expectantes, les devuelvo el gesto rápidamente.

- Hola de nuevo, Lorrie- saluda Dean.

- Hola chicos, y Dean,- este rodó los ojos con gracia-¿Sucede algo?- pregunto intentando sonar desentendida.

- Sí, mi querida cumpleañera- responde Hasley, mi amiga más cercana-. Hoy en la noche iremos a festejar tu esperado cumpleaños al mejor club de la ciudad, solo veníamos a avisarte porque quieras o no, irás.

Una enorme sonrisa y pequeña risa brotan de mi boca, inquieta por lo que pudieron haber preparado para mi.

- Es obvio que iré, no hace falta que intentes obligarme- aclaro obvia.

- Nunca se sabe que puedes hacer, lindura, a veces eres muy impredecible- afirma Jace y mis otros amigos que nos rodean asienten ante su comentario.

Niego divertida y vuelvo a hablar.

-¿Algo más para decir?

-¿Creías que eso sería todo? Claro que no- reprocha Janette, otra amiga.

-¿Y qué más tienen entonces?- cuestione demostrando el interés que intentaba ocultar.

- Chicos- llamó Hasley.

Ed, otro del grupo, saca una bolsa que tenía escondida detrás de él y los demás, me la ofrece y emocionada la agarro. Abro la caja que contenía adentro y veo que hay unos bellos zapatos negros de tacón no muy alto, como los que me gustan a mi.

- Ay, gracias chicos- me acerco ellos y les doy un abrazo-¿Los eligieron ustedes?

- Obviamente, cariño, tenemos muy buen gusto- me aclara Leo, mi mejor amigo.