🥞⨾ ¡𝐀𝐔́𝐍 𝐒𝐈𝐆𝐎 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐑𝐀𝐍𝐃𝐎, 𝐉𝐄𝐎𝐍! ੭ 𝑚𝑒𝑎𝑛𝑖𝑒 먼저

n u e v e

Wonwoo estaba enfermo y Mingyu quería lanzarse por la ventana... Digamos que... Él lo provocó.

La noche anterior, cuando fueron al supermercado, llovió mucho y Wonwoo realmente es fácil de pescar un resfriado, el aire frío pegó directamente en su pecho y el echo de que no traía suéter lo empeoró y, ¿quien no lleva suéter en estas fechas? Mingyu lo convenció de que no haría frío y lo demás es historia.

Wonwoo se encontraba recostado tapado hasta la cabeza con montones de papeles usados, una sopa hasta la mitad, los ojos llorosos y rojos al igual que su nariz; vaya que se sentía mal y juraba que Mingyu lloraría por verlo de esa manera, es que, ¿Quien no lloraría al ver a Jeon Wonwoo en ese estado?, no es algo para asustarse mucho menos para salir corriendo pero el solo imaginarte a un Wonwoo tosiendo como fumador de setenta años y estornudando escandalosamente te hace sentir mal, mínimo te deprime. Digamos que es exactamente por lo que está pasando Mingyu que en este momento estaba intentando que Jeon acabara su sopa.

—Jeon Wonwoo hablo en serio, tienes que tomar por lo menos el caldo... Por lo menos toma agua.— le suplicó ya que las últimas cuatro horas el más bajo no había comido ni ingerido agua.

—Yo también hablo en serio, no tengo hambre, que tal si en vez estar ahí te acuestas aquí,— dejó pequeñas palmaditas lado suyo.— ahora es cuando necesito más mimos de los que debo.

—Lo siento, ¿que hora...?— Miró su reloj el cuál marcaban las ocho con treinta. —¡Voy tarde al trabajo!, lo lamento... Que hago, no te puedo dejar solo, así no, que hago, que hago, que hago... ¡Ah, llamaré a Cheol!... —Miró al mayor un momento.— ¿Quieres estar con Cheol o Jun?

—Ambos...—Dijo sorbiendo su nariz. —Seguro ellos sí me quieren y me van a abrazar.

—Veré si pueden venir.

[...]

Jun llegó primero acompañado de Minghao el cuál fue directo a ver como se sentía Wonwoo.

—Vaya, tienes mucha calentura... ¿En serio el idiota de Mingyu pensó que no haría frío?— preguntó al pálido.

—Sí... Xú, me siento mal... — habló bajo las sábanas.

—¿peor o mejor?— preguntó mientras iba al baño por más papel para la nariz de Jeon.

-—endemoniadamente peor... — en ese momento llegó Seungcheol con un té y detrás de él venía Jun con un pastillas para el cuerpo cortado y fiebre.

—Mingyu dijo que no has tomado ni comido nada, ¿puedes almenos tomar el té y las pastillas?— preguntó el mayor de todos.

—¿Si lo hago me dan abrazos de oso?— dijo Wonwoo.

—Sí— dijeron todos al unísono

Hizo caso y bebió el té junto a la pastilla.— vengan acá— Jun recordó que había dejado el fuego de la sopa recalentada encendido y cuando quiso volver a apagarlo fué muy tarde ya que Jeon lo tomó con su brazo y lo abrazó, Mingaho era sostenido por las piernas de Wonwoo mientras Choi era abrazado con el otro brazo.

—¡Jeon Wonwoo!, ¡suéltame, esto no es un abrazo!— gritó Seungcheol.

—¡No!— apretó más.

—¡¿Wonwoo quieres que tu casa se incendie?! ¡Tengo que ir a apagar esa cosa!— Jun se soltó al igual que los otros dos.

—¡Basta llamaré a Kim y le diré que regrese rápido!— Xú corrió por su teléfono.

—¡Sí, le dices que quiero mimos y que lo espero!— gritó medio ronco Jeon.

—¿Que pasa? Estoy trabajando, ¿no pueden espe-...?

—Mingyu Wonwoo te quiere ahora.

—¿Qué te pasó Wonwoo...?

—¡Aún sigo esperando mis mimos, Kim!

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