Eres mi luz (Kookmin - Jikook) Adaptación propia

Capítulo 11~Flashes

Narra JungKook

El doctor Choi ayuda a Jimin sentarse en una silla bastante extraña, le coloca unas gafas enormes que tienen miles de cables conectados a un ordenador. Mientras observo todo aquello solo pasaban unas palabras por mi cabeza "que vea" pido intentando que eso funcione. No sé porque quiero que vea cuando si eso pasara podría arruinar todo nuestro trato y podría perderlo, la verdad es que no quiero perderlo, se está convirtiendo en alguien muy querido para mí aunque le deseo todo lo mejor. Jimin es realmente único, sincero y muy dulce, merece ser feliz.

-Kookie. -Susurra, agito mi cabeza en el aire para despertar de mi trance y acercarme a él.- ¿Puede quedarse a mi lado? -Pregunta mientras vuelve a morder su labio y jugar nervioso con sus manos. Me doy cuenta de que cada vez su labio está más rojo e hinchado y que sus manos comienzan a colorearse por la presión que ejerce en sus dedos, agarro una de sus manos con la mía y entrelazo nuestros dedos sintiendo su suave piel junto a la mía.

-Claro, no hay problema. -Responde mirándome el doctor y sonriendo antes de volver al ordenador. Jimin suspira nervioso y me acerco cuidadosamente a su oído.

-Todo saldrá bien. -Susurro, él medio sonríe con una mueca preso de los nervios.

-Jiminie, vamos a comenzar.  -Dice girándose hacia nosotros. -Ahora voy a poner imágenes en tus gafas, quiero que me digas que ves; si es que ves algo. -Le explica y él se concentra frunciendo sus labios y cejas alrededor de esas gafas aparatosas. Miro la pantalla del ordenador cuando la enfermera me la señala sonriente, en ella se supone que aparece las mismas imágenes que dentro de esas gafas.

-Nada. -Dice incómodo al pasar unos segundos con la misma imagen; una imagen de unas líneas horizontales sobre un fondo blanco. Así pasan un par de imágenes más como una playa, un barco o un coche en colores y en blanco y negro con los fondos bien definirlos y nítidos en blanco y negro.

-Pasemos a algo más sencillo. -Explica comenzando a mostrar colores de más oscuros a más claros en la totalidad de la pantalla. -¿Percibes alguno? -Pregunta, Jimin infla sus mejillas molesto.

-No veo nada. -Su voz se quiebra y algo dentro de mí también lo hace. Aprieto más nuestro agarre con la esperanza de darle fuerzas para que no se rinda tan fácilmente. -Vuelva atrás. -Pide serio, giro rápido hacia la pantalla. -¿Eso es un flash? -Pregunta y en efecto, hay un flash repetitivo en la pantalla; el doctor sonríe.

-Sí. -Jimin sonríe emocionado, a partir de ahí continuamos varios minutos distinguiendo luces a la derecha o izquierda de pantalla, abajo o arriba. Cada vez que acierto y los distingue sonríe más, mis mejillas duelen de tanto sonreír.

Narra Jimin

Vamos de camino a mi casa en el coche de Jungkook. El tiempo en el especialista nos ocupó más del esperado, pero estoy tan contento, eufórico, que ahora mismo podría morir de felicidad. Cierro los ojos y recuerdo el abrazo que Kookie y yo nos hemos dado cuando el doctor Choi ha dicho los resultados y recuerdo también el aroma de su pecho contra mi mejilla.

-¿Cómo se lo piensas decir a tus primas y a YoonGi? -Pregunta haciendo que me sonroje al darme cuenta de que estaba pensando en él en vez de en la gran noticia, ¡y encima con él delante, a mi lado!

-No lo sé. -Susurro imaginando miles de posibilidades en mi mente. -Quisiera ver sus caras cuando se lo diga. -Me echo a reír. -Podré hacerlo dentro de poco, ver sus caras. ¿Sabes lo estupendo que es eso Kookie? -Digo lleno de ilusión, él ríe parando el coche.

-Sí, y no sabes cuánto me alegro. -Le dedico una tierna sonrisa.

Cuando llegamos Kook toca al timbre del portón y Jisoo abre la puerta. Cuando llegamos a la entrada el aparca junto a uno de nuestros coches y me acompaña hasta la puerta de la casa cogidos del brazo.