Eres mi luz (Kookmin - Jikook) Adaptación propia

Capítulo 33~Luz, oscuridad, Chimmy,Cooky

Narrador externo

Mientras ese abrazo sigue fuerte sosteniéndo de las caderas bien fuerte a Jimin, pues JungKook sabe que caerá si lo suelta, el peli-gris nota humedad goteante en su cuello y parte de hombro. Algunas lágrimas que vienen de los ojos de Jeon frustrado y dolido de sentir así a Jimin se han escapado, no piensa ocultarlas pero ellas hacen que el cuerpo de Park se tense y su mente comience a divagar entre los sentimientos de compañía y ser comprendido mezclados con el malestar de haber provocado lagrimas en el chico. Como dos idiotas sienten la pena y el dolor del otro como si fuera suyo propio.

Los minutos pasan, minutos en que los sollozos decaen hasta desaparecer y las lágrimas parecen haberse detenido, Jimin suspira sintiendo aun así escuecen en el recorrido que han tomado por sus mejillas. Sin separar del todo, sólo medio paso, coloca sus pequeñas manos en el pecho de Jeon, sobre su corazón, al sentirlo latir simplemente nota como su corazón vuelve a latir a un ritmo normal, donde puede observar por primera vez en toda la noche todo lo que su acción ha provocado. Todos los observan y aunque podría ser incómodo para muchos para ellos no. JungKook se retira un poco de Jimin también para limpiar sus mejillas con la manga de su suéter a dulces toques no queriendo irritar su piel húmeda antes de buscar conectar sus miradas.

-¿Estás cansado? -Le pregunta con un tono de voz bajo y cariñoso mientras sujeta sus manos entre las suyas cubriéndolas en su interior. Jimin tan solo asiente. -¿Qué te parece si subimos a tu cuarto y hablamos un poco antes de que duermas? -Pregunta inocente mirando de reojo a todos los presentes.

-Sí. -Un susurro tierno y de voz aguda sale de sus labios, JungKook le sonríe provocando un intento por parte del contrario. Uno que resulta doloroso para todos los que lo presencian.

El castaño rodea los hombros del más bajo con su brazo izquierdo mientras con su mano derecha sigue sujetando como puede las dos manos pequeñas de Jimin. Sin mirar a nadie, acobijando al peligris contra si mismo, comienza a caminar hacia las escaleras. Jimin mantiene la cabeza baja sin poder pensar no sentir nada más que la calidez del cuerpo junto a él, mientras suben las escaleras en esa misma posición Jeon observa hacia el salón donde Jennie y YoonGi parecen realmente aliviados.

Cuando llegan al cuarto de Jimin este sigue en el mismo estado pedido, así que mientras se mantiene parado en medio de la habitación abrazándose a sí mismo, Jungkook cierra la puerta y recolocar las sabanas salidas y desperdigadas por la pesadilla vivida.

-Ven, vamos. -Dice volviendo a acercarse y coger su mano para ayudarlo a subir a la cama. JungKook se sienta apoyando su espalda en el cabecero, coloca a Jimin sentado sobre sus muslos para verlo de frente; como aquella noche en la que él necesitó el cariño de Minnie ahora se lo quiere dar. Abraza su estrecha cintura, Park no tarda en acomodarse sobre su pecho sintiendo de nuevo ese calor reconfortante; tiene miedo de que todo sea un sueño y despertar de esa paz y tranquilidad que siente en ese momento. -¿Te encuentras mejor? ¿Puedes respirar mejor? -Le pregunta acariciando su suave pelo haciendo que desprenda el delicioso olor del champú de frutos rojos.

-Sí, gracias Kookie. -Susurra con los ojos mirando hacia la nada y con la voz notablemente rasgada por todos los gritos, aún así sigue soñando dulce para Jeon.

-No me agradezcas Minnie. Si estoy aquí es porque quiero. -El nombrado sonríe de lado. -Y ya sabes que si necesitas algo, lo que sea, estoy aquí. -Besa su cabeza tiernamente y un pequeño silencio se forma relajando aún más el ambiente. Aún así Jimin vuelve a darle vuelta a lo recordado esa noche mientras dormía, a los pensamientos que lo han quemado esos últimos días; todo aquello que parece más fácil afrontar y que desparezca con JungKook a su lado.

-Tengo mucho miedo Kookie. -Jeon muerde su labio inferior escuchando los susurros de Jimin. -He soñado con la primera vez que me pegó. -Confiesa. -Fue otro malo recuerdo que intenté borrar de mi mente, y creí haberlo conseguido, pero estos días solo he podido estar pensando en todo lo que tengo que contar mañana y otros miles de recuerdos que quiero dejar atrás han vuelto. -Apenado vuelve a derramar unas pequeñas lágrimas.