Narra Jimin
Aquí estoy de nuevo, en este espantoso bosque triste y desolado. El viento frio de siempre hace que mi pijama de perro amarillo absurdo, que he vuelto a adorar tanto como en mi infancia, se mueva a su compas hacia la derecha al igual que mi pelo destapado de la capucha a regañadientes por el mismo motivo del viento. Camino pisando esas mismas ramas secas de siempre, pero la sensación que siento esta vez es diferente, mis pies no sufren cortadas ni me duelen al pisar este suelo tan irregular. Es una sensación de flotar, de caminar sobre el aire extrañamente cómoda.
Camino rodeando los mismo arboles de siempre mientras observo que sus copas están más lejos que nunca de mí. Me paro a observar el prado verde donde siempre que he venido estaba el pequeño Cooky y al cual no podía acceder, pero me sorprendo quedándome parado en mi lugar al descubrir que esa valla metálica que me impedía el paso ya no está. El campo verde está perfectamente a mi paso y disposición. Camino hasta poner mis pies y mi cuerpo al borde de la línea que separa bruscamente luz de oscuridad, ramas y hojas secas de flores y césped verde lima.
Cierro los ojos y tomo una gran bocanada de aire para con valentía introducir lentamente mi mano bajo el sol radiante. Abro mis ojos y observo mi mano que siente un calor propio del sol que me encanta y me hace sentir vivo. Lentamente y con una gran sonrisa cruzo la línea imaginaria con mi pie derecho y después con mi pie izquierdo. La sensación de amor, cariño, felicidad, alegría; acompañadas de eternidad, invaden mi cuerpo produciendo que un rayo increíble de éxtasis recorra mi alma y simplemente comienzo a correr sobre ese prado verde descalzo.
Este césped más que césped parece esponja que acaricia mis pies, el sol me ofrece ese calor que da en verano tan gustoso cuando sales del agua helada del mar. Me dejo caer de espaldas sobre las diferentes flores silvestres que hay en el prado y cierro de nuevo mis ojos para sentir los aromas que me resultan nostálgicos y agradables.
-Hola Chimmy. -Esa angelical voz me hace abrir mis ojos de golpe y verlo sonreír a tan solo unos pasos de mí.
-Hola mi amor. -Sonrío y abro mis brazos invitándolo a venir hacia mí, cosa que hace al instante, quedando los dos jugando en el suelo mientras le hago cosquillas y él me abraza. Es tan perfecto volver a sentir sus brazos sobre mi cuerpo, ahora algo me asegura en mi interior que este pequeño ser adorable es mi Kookie con una representación tierna y delicada. -Por fin estoy aquí. -Le digo acariciando su pequeña cabeza que esta recostada en mi hombro derecho.
-Por fin te has perdonado. -Parece alegre por ello, se separa de mí y me sonríe con su mirada de grandes ojos.
-Sí. -Susurro copiando su sonrisa, sus pequeños dientes delanteros se marcan adorables. Con protección y cariño coloco bien su capucha del pijama de conejo rosa sobre sus hebras castañas, él con sus manitas coloca la mía de perro sobre mi cabello gris. -Gracias por ayudarme Cooky, gracias por forzarme a conseguir mi felicidad completa de nuevo.
-No me tienes que agradecer nada Chimmy, estaba deseando que lo hicieras. -Alega sin soltar mi capucha, aferrándose a ella para mantenerme cerca. -Ahora solo te queda por prometerme una cosa para quedarte aquí para siempre. -Sus facciones cambian a un rostro serio, copio su acto dispuesto a escuche cualquier cosa que me pida. -Ayuda a los que quedan por cruzar a que lo hagan y lucha por mantener la felicidad que tienes y que tanto te mereces. -Romeo todo contacto conmigo poniéndose en pie frente a mí, cojo sus manitas con las mías para mirarlo directo a los ojos.
-Claro que sí mi vida, te lo prometo. -Él parece satisfecho con mi respuesta. -Pero, ¿quién queda por cruzar? ¿No dijiste que todos estaban ya aquí? -Pregunto confuso.
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Eres mi luz (Kookmin - Jikook) Adaptación propia
FanfictionSeúl de nuevo es el destino. Mas está vez para Jimin todo es diferente. Todo es triste y sombrío; todo es oscuridad. Él intentaba aparentar normalidad a pesar de que por dentro seguía roto y humillado cuando JungKook creyó verlo por primera vez. E...