Capitulo XI

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¿Quien diría que dentro de mis fantasías con Ivone, había desperdiciado tanto tiempo de mi joven vida? Al darme cuenta de todo aquello que había hecho por ella y no había recibido respuesta por su parte, al decidir buscar alguien mas de cuya compañía pudiese hacer alarde; tres años había pasado pretendiendo a una mujer cuya intención conmigo no era la misma que la mía con ella, tres años de mi vida desperdiciados amando a una mujer que no quería estar conmigo mas, pero que sin embargo se esforzaba arduamente por no perder mi amor, por no perder a aquel tipo que siempre la hacía sentir especial por mas jodido que fuera el momento, por no dejar de lado todas aquellas cosas que yo estaba dispuesto a hacer por ella; en fin, las cosas estaban hechas y finalmente sentía haber encontrado una mujer cuyos sentimientos estaban a la par de los míos y cuyas actitudes realmente me fascinaban...

Aquella misma tarde, Aitana fue muy amable conmigo, me dio un tour por el vecindario, decidió mostrarme todo y presentarme con algunos amigos suyos para que yo no me sintiera tan solo en caso de querer hacer alguna actividad; aquellos muchachos no eran mucho como la gente de mi tipo, realmente sentí que no congeniaría mucho con ellos pues con el simple hecho de ver sus comportamientos y actitudes, no me daban ganas de interactuar mucho con ellos, pero era un bonito detalle de parte suya tratar de que yo no estuviera tan solo en un lugar nuevo para mi

-¿Qué edad tienes?- Preguntó ella- Sí no es inoportuno, claro jaja

-15 años- respondí con una pequeña sonrisa en mi rostro- ¿Por qué la pregunta?- Dije intrigado-

-No lo sé, mera y vana curiosidad- Dijo con una pequeña pero hermosa sonrisa-

Era la sonrisa mas hermosa que había visto en mi vida, sin lugar a dudas la belleza física de Aitana podía superar fácilmente la de Ivone, más sin embargo, no podía estar seguro de nada aun, pues no conocía lo suficiente a Aitana y enamorarme de una apariencia física realmente no es lo mio, es algo muy mediocre a mi parecer y sería ir en contra de mis propios principios enamorarme de ella solamente por el como se veía; necesitaba conocer mas a fondo a aquella intrigante chica, realmente lo necesitaba, sentía de nuevo esa sensación de intriga en el pecho, aquella misma sensación que en su momento sentí por Ivone antes de conocerla y ver realmente lo que ella era...

-Ha sido un placer conocerte y que me muestres el lugar, Aitana- Dije con voz alegre- ¿Crees que podrías pasarme tu numero o alguna red social para mantenernos en contacto y conocernos un poco mas?, Claro, si no tienes algún inconveniente con ello.

-También ha sido un placer para mi conocerte y poder mostrarte el lugar, Richard- Dijo con voz dulce- Y claro, aquí tienes mi numero, esperaré tu mensaje con ansias

Fue así como daría comienzo una de las historias mas hermosas de mi vida, como de una manera tan sencilla como mudarse a un poblado cercano, todo aquello por lo que algún día me había encontrado tan triste comenzaría a desaparecer y comenzaría a sentirme quizá un poco mas amado de lo que había experimentado hasta el momento, realmente estaba ansioso por conocer a aquella bella chica y estaba intrigado por saber que nos deparaba el destino; que al final y al cabo, si la había conocido sería por algo, por una lección que llegaría a darme a la vida, o simplemente para quedarse en ella el resto de la misma...

El Árbol Del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora