"¡Sakura-chan tenemos que ir arriba!" Le llamó el rubio agitando su mano a modo se saludo, Sasuke se limitó a dar un leve asentimiento de cabeza.
"¿Y eso?" La pelirrosa era desconfiada por naturaleza y no había ni un ápice de confianza en aquel señor que permitía que en su aldea se llevasen a cabo tales atrocidades.
"Aquellos niños nunca sobrevivían." Rió. "Pero tú seguro que lo harías."
"Nos dijo el maestro Kakashi que quería hablar." Comenzaron a caminar el Uzumaki y el azabache cuando Sakura les adelantó y atravesó la puerta del edificio.
"A lo mejor nos suspenden unos días por lo de ayer." Habló el Uchiha cuando comenzaron a subir las escaleras.
Los orbes verdes se clavaron en él fríamente y tuvo que luchar por no mostrar lo incómodo que le ponía aquella chiquilla.
"¿A caso hicimos algo malo?" Gruñó la pelirrosa deteniendo sus pasos y dándose la vuelta para poder encarar a Sasuke.
El niño alzó el rostro en respuesta, en un gesto de superioridad, y levantó una ceja.
"Te pasaste un poco, se podría decir." Afirmó y observó como los dientes de la niña se apretaban con fuerza.
Sakura se quedó unos segundos en silencio y cruzó sus ojos con los de Naruto, éste se encontraba nervioso. Ella negó con la cabeza, se dio la vuelta y siguió caminando. Luchó contra su orgullo y no se permitió decir lo que quería.
"No pensé que..." Volvió a rectificar, se mordió el labio y dejó escapar un suspiro.
"¡Eres un maldito imbécil!" La voz de Hidan azotó con fuerza a Kakuzu que se mantuvo impasible. "¿Cómo puedes ser tan gilipollas?" El puño del peliblanco se apretó. "¿Cómo puediste?" Susurró observando el cuerpo de un niño en el suelo. "Era tan pequeño." De un puñetazo el cuerpo del mayor golpeó la tierra.
Ese niño se había dirigido a Hidan con un veneno mortal en su arma, él solo le protegió como pudo, pero dejó que la rabia de su compañero cayese contra él sin quejarse. Su trabajo no era bonito a veces y el peliblanco aún no lo había entendido, ¿de qué le serviría encararse con él? ¿Para hacerle daño?
"¿Qué narices ibas a decir?" La rabia llenó el cuerpo del Uchiha.
"Ya basta Sasuke." Llamó la atención el rubio.
"Tú cállate." Amenazó de mala manera.
Sakura parpadeó controlándose, ¿iba a decirle que para querer terminar con su hermano tenía miedo de matar a alguien? ¿Que para ser un Uchiha era un puto cobarde? ¿Qué clase de barbaridad iba a decir? Las personas enfadadas no suelen filtrar sus palabras.
"No hace falta que le hables mal a Naruto cuando estás enfadado conmigo." Se limitó a decir a la vez que agarraba el pomo de la puerta del despacho del Hokage. "Hay veces que es mejor callarse, Sasuke, y algún día comprenderás el valor de hacerlo." Y abrió la puerta sin darle tiempo a responder.
Los tres se dirigieron dentro del cuarto y se dispusieron frente al Tercero, al lado derecho de su maestro.
"Buenos días, parecéis algo tensos." Acotó el mayor echando humo por su boca. "Debéis llamar antes de entrar por la puerta." Añadió golpeando sus dedos sobre la mesa. "Estuve hablando con Kakashi-san sobre lo que ocurrió ayer, entiendo lo que te llevó a reaccionar así, Sakura." Sus ojos se clavaron en la niña la cua le respondió con una mirada tranquila. "Pero no puedes amenazar a civiles ni a cualquier persona que te contrate, ¿entiendes?" La voz rasposa del Hokage rascó los oídos de la niña.
ESTÁS LEYENDO
Vigía
FanfictionOjos atentos, cuerpo preparado, armas dispuestas. Vigila. Vigila. Vigila. La pequeña Sakura tenía que estar atenta del jinchuriki Naruto Uzumaki. Líder-sama lo necesitaba para su plan y ella debía mantenerlo con vida hasta ese momento. Sabía que deb...