(Escrito hace años atrás)
Disfruto escuchar música, gesticularla sin soltar sonido de mis labios, sentirme capaz y celosa de cantar hermoso, sin darme cuenta de que el solo hecho de poder cantar, oír, es maravilloso, es maravilloso el nato hecho de sentir multitud de sensaciones que te hagan volar con los pies sobre la tierra.
Recuerdo cuando jugaba a ser bailarina con mi papá y este me levantaba entre sus brazos. Esa sensación de amor, protección de alguien que daría la vida y, si pudiera, más por mi. Eso era hasta mejor que bailar y cualquier otra cosa que pueda imaginar.
Te amo. Es mejor sentirlo que oírlo o cantarlo ¿no?
