N: Antes de la caída del medio día, los invitados comenzaron a llegar por Casas a la fortaleza Dahl. En poco tiempo, el castillo se abarrotó de nobles e ilustres caballeros con sus mujeres e hijos y el vino corrió a borbotones. No eran pocas las habladurías y conspiraciones acerca de la actual situación del reino. Se trataban de los nobles procedentes de familias lejanas, de tercera y cuarta clase, también algún nuevo noble o importante comerciante. Todos debían llegar al menos una semana antes de la ceremonia final. Por ello, no era de extrañar que los criados no cesasen en sus tareas, ahora incrementadas por la muerte del rey, mientras los invitados ya reían en los banquetes del almuerzo o reunidos formando corros de habladurías en los jardines.
Una contradicción entre el negro de luto que cubría cada rincón del castillo y el júbilo que sus visitantes rezumaban, por lo que Eirian se encargó de erigir una ceremonia en la noche en honor al difunto rey. Una silenciosa y respetuosa ceremonia que calmó los ánimos de los alegres nobles colmados de vino y los dispuso para descansar en sus aposentos.
A todos menos a los hijos del señor Dahl, quienes acabada dicha ceremonia, oyeron por el propio Eirian que la familia Valeryan cruzaba las puertas del castillo para unirse a ellos.
EIRIAN: Os pido, mis señores, seáis discretos, pues la calma que se respira en el castillo no debería romperse.
N: Los Valeryan eran la única Casa poderosa, además de los Dahl; nobles de primera categoría venidos desde las tierras de la costa. Pero más que eso, la única familia con la que los señoritos y señoritas Dahl tenían relación desde la infancia.
La familia Dahl al completo esperaba en hilera a los Valeryan. Nikel, en el centro, sonrió cuando el señor de la otra casa entró presidiendo a su familia.NIKEL: ¡Bienvenidos seáis, Casa Valeryan! *Exclamó, haciendo que su alta y profunda voz resonara por el lugar* ¡Os encontráis en vuestra casa!
EIRIAN: *Sonrió encantador y correcto como siempre. Perfecto. Su mirada examinó no sólo a la familia Valeryan sino también a los invitados que se refugiaban detrás de ellos. Después, detuvo su mirada en Daven Gallaher, el muchacho que ocupaba su posición en la otra familia, y se acercó a él para estrecharle la mano, aún sonriendo. Y sin dejar de hacerlo, entredientes, comentó* Bastardos.
DAVEN: En efecto.
N: Sin embargo, nadie que los hubiese estado observando podría haber notado que hablaban.
RONALD: *Se acercó a Nikel. Su familia permaneció en el sitio.* Nikel, viejo amigo. *Lo saludó con un afable abrazo.* El tiempo no pasa por vos.
NIKEL: *El patriarca de los Dahl emitió una sonora carcajada y le palmeó la espalda.* Lejos quedaron los tiempos en los que éramos dos muchachos luchando por el reino en las guerras del norte. *Repuso. Luego, detuvo su mirada en la hermana de Ronald.* Zómer, estáis encantadora, como siempre. *Le besó el dorso de la mano y tardó más de lo necesario en soltarla. La cuñada de Ronald era una mujer noble y afectuosa, además de extremadamente hermosa.*
ZÓMER: Gracias por invitarnos un año más, señor Dahl. *Aunque pronto dejó de mirarlo y observó a su sobrino Cyril saludando a la pequeña de los Dahl.*
CYRIL: *Las miradas entre el joven y Khara se cruzaron, y éste le dedicó una tímida sonrisa* Maer Khara. *Se acercó y se inclinó para besarle la mano.*
N: Ella se la tendió y a él sí le dedicó una sonrisa sincera, pues era de los pocos de la Casa Valeryan que apreciaba.
KHARA: Es un placer veros, Maer Cyril.
CYRIL: *Se acercó levemente* Demasiados convencionalismos, ¿no creéis? *Le susurró al oído.*
KHARA: Vivimos entre apariencias, querido. *Repuso en el mismo tono y le miró cómplice, de reojo.*
N: Khara Dahl tenía los ojos oscuros, de un profundo y misterioso marrón que se toparon con los verdes del pequeño Valeryan y supieron que se entendían.
N: Al lado de Cyril, apareció su hermana.
AERYN: Maer Khara. *Se inclinó levemente en señal de respeto. Khara y Aeryn siempre se habían entendido bien. Ambas era muy parecidas y la ovejas negras de su familia.*
KHARA: Maer Aeryn. *Imitó sus movimientos.* Sois bienvenida, como siempre.
N: Sisla, al lado de su hermana, dejaba que Cyril la saludara con cortesía. Le sonrió coqueta y le sostuvo la mirada. Siempre había sentido gran simpatía por aquél noble.
NIKEL: Y nuestros queridos Gallaher, de tierras lejanas. Esperábamos a vuestra Casa desde esta mañana.
SEÑORA GALLAHER: Mucho me temo que nuestra jornada se vio interrumpida por unos asaltantes en el camino y tuvimos que buscar refugio en la casa Valeryan, siempre tan generosa.
DAVEN: *Tensó la mandíbula y murmuró* ¿Cómo podría ser de otra manera?
NIKEL: Bienvenido seáis también a nuestra casa, Daven Gallaher. *Echó un rápido vistazo al consejero.*
N: Fue obvio para todos que la presencia de los Gallaher deshacía el buen humor creado después de años de amistad en las otras familias. Y, ágilmente, Eirian saltó al rescate de la situación.
EIRIAN: Supongo que los señores se encontrarán cansados. Hemos dispuesto las mejores habitaciones del palacio para vosotros. Pero primero, por favor, pasad al gran salón a comer algo, el largo viaje debe haber sido agotador. *Sonrió encantador, perfecto, impecable. No podía ser de otra forma. Su voz mantuvo una calidez y una familiaridad que se perdía en el aire.*
N: Tras las acertadas palabras de Eirian todos los presentes se adentraron en la majestuosa morada de los Dahl, donde se los atendió con esmero y eficacia.
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Memorias de Hesperia
Fantasy[Troubrook] El rey ha muerto sin descendencia. Todos los jóvenes nobles de Hesperia deberán prepararse para las pruebas organizadas por los Sabios que elegirán al nuevo monarca. Los postulantes competirán unos contra otros y sólo el mejor será el nu...