Hades y Perséfone [Asami x Akihito]

Los Campos Eliseos

Después de la última salida con Akihito tuve que tomar un descanso para mantener el balance en el inframundo y no provocar incidentes por el exceso de poder, así que hoy será el día en que volveremos a retomar el tour que dejamos pendientes.

Akihito‐ Hades ¿Estas seguro que te encuentras bien? Si necesitas descansar no te fuerces...

Ryuichi- Estoy bien y además quiero mostrarte este lugar, porque muy pronto tu también gobernaras aquí.

Sus mejillas se tornaron rojas y su mirada se desvió de la mía, eso lo volvía tan encantador que se hacía difícil contenerme. Sus reacciones me ponían de buen humor, alegraban mi sombrío mundo y a pesar de que prácticamente lo estoy obligando a estar conmigo él parece estar más  cómodo con mi presencia después de aquel día en el tártaro, abrirme a Perséfone nos hizo más cercanos y eso es bueno.

Akihito- Y... ¿A dónde iremos hoy?

Ryuichi- A los campos Eliseos.

Akihito- ¿Campos Eliseos?

Ryuichi- Sí, es el lugar donde residen cuyas almas han obrado bien a lo largo de su vida, los llamados muertos con virtudes. Estoy seguro que te gustará.

Akihito- Estoy muy ansioso de llegar y conocerlo.

Sus ojos brillaban con gran intensidad  curioso por lo que encontraría en ese nuevo lugar.

Después de algunos minutos sobre el río llegamos finalmente a nuestro destino. De inmediato baje de la canoa para extender mi mano a Akihito y así sacarlo seguro del transporte.

Akihito- Gra-gracias.

Ryuichi- No hay de que.

Siempre que estoy frente a él no puedo dejar de admirar su belleza y un incontrolable deseo de besarlo recorre todo mi cuerpo, si no fuera por mi autocontrol tan vez ya lo hubiera espantado con mis acciones.

Akihito- No puedo creer que exista un lugar así aquí abajo.

Perséfone parecía maravillado y sorprendido por la vista, no lo culpo, porque aquí en los Campos Elíseos se puede disfrutar de una perfecta vista llena de árboles verdes y praderas sin fin.

Akihito-¿Como puedes hacer que las plantas sigan viviendo, si aquí no llega la luz del sol?

Asami- Estas plantas las cree yo, por lo que se alimentan de mi poder y no necesitan otra cosa aparte para poder sobrevivir.

Akihito- Eso es sorprenderte.

¿Se puede ser más dulce? Akihito es demasiado hermoso y sincero que siento que he desperdiciado mi vida por no haberlo conocido antes.

Mientras seguíamos caminando por el extenso campo nuestra conversación se retomó.

Akihito- Estos árboles se parecen a los de la tierra, pero es cierto que tienen algunos detalles diferente.