Se suponía que Jeno y Myungseok jamás se encontrarían. Principalmente porque el primero es el protagonista de un webtoon y la segunda es una estudiante promedio, pero ambos suponen que a veces, al destino le gusta jugar bromas pesadas.
―NCT's Jeno.
...
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✧･ﾟ━CAPÍTULO DOS ━･ﾟ✧
El escalofrío lo recorre una vez más. Y el mismo sonido pasa como un rayo en sus oídos.
Jeno siente como el aire vuelve a sus pulmones, como si hubiera estado aguantando la respiración por un largo período de tiempo. La sorpresa de volver a controlar sus acciones causa que suelte el agarre que mantenía en los dos chicos y pase a sujetarse el pecho con una mano, sintiendo que el corazón se le saldría del pecho en cualquier momento. Toma bocanadas de aire como si su vida dependiera de ello. Jisung y Sujin se observan, alarmados. La chica se acerca tocándole con cuidado su espalda.
―Jeno, ¿qué ocurre? ―le pregunta su amigo, sin tener la más mínima idea de lo que estaba pasando. El mencionado no tiene las energías como para responder.
―No me digas, ¿te rompiste algo mientras peleaban ahí dentro? ―agrega algo agitada la chica, alejándose para sacar su teléfono y llamar a emergencias.
Jeno nota las acciones de la chica, y sujeta su muñeca para impedírselo.
―Estoy bien ―Aunque ni siquiera él está seguro de sus palabras, ¿qué les diría a los paramédicos? No hay una explicación en la que pueda pensar mientras su cabeza sigue dándole vueltas.
―Con esa cara no diría que estás precisamente bien, ¿sabes? ―aporta Jisung, que sigue observándole con preocupación.
El mayor del trío piensa en qué era lo que debía decirle a sus amigos, ¿acaso podía soltarles de la nada que había retrocedido en el tiempo y, que de pasada, no había podido moverse ni hablar con libertad propia? Era algo tan inverosímil que si se lo hubieran dicho a él, se hubiera reído de sí mismo por pensar tales estupideces. Si él mismo no entendía qué era lo que le había pasado, no había forma en la que ellos lo entendieran.
El dolor de cabeza comienza a afectarle, quizás alguno de los golpes que recibió le ha causado una contusión, aunque mientras trata de ordenar sus pensamientos, no recuerda que alguna vez hubiera pensado en su salud física a pesar de todas las veces en las que había resultado golpeado. Quizás ha perdido unas cuantas neuronas.
―Ya lo sé, pero hablo en serio ―trata de darles una sonrisa tranquilizadora a sus amigos, sin estar seguro de lograrlo―. Estoy bien.
―Aun así, Lele ya sabe lo que pasó y dijo que fuéramos para asegurarnos que no tienes nada grave. Mark también va a estar ahí.
Avanzan por las calles centrales de Seúl sin muchos problemas, con dirección a uno de los tantos centros médicos que la familia de Chenle poseía donde, a palabras de Jisung, estarían sus dos amigos esperándoles.
Mark pensó de repente, y se reprendió a sí mismo por ser tan olvidadizo todo el tiempo.
―Jisung, Sujin ―llama levantando la cabeza, pues la había tenido la vista pegada al suelo para evitar que le vieran el rostro así de herido durante todo el camino―. Hay algo que no les he dicho. Es sobre Mark ―El dúo parece verse interesado, aunque las palabras se sentían una vez más atorarse en su garganta―. Fue él el que me noqueó cuando estaba peleando con Na Jaemin.
