Vanilla love [Springles]

Capítulo 13 "Final"

Jamás debí dudar entre hacerlo o no, estaba claro que esa nunca fue una opción que yo tomaría, por muy desesperado que estuviera, mis padres no me educaron de esa forma.

Ahora pierdo esto y pierdo a Sasha. La persona que más confiaba en mí.

-Si tan sólo esa niña nunca se hubiera aparecido por aquí...

No, nadie tiene la culpa de mis propios errores, el único causante de esto soy yo, siendo yo tengo que resolverlo.

-Participantes sólo quedan dos minutos, estén listos.

Bueno... supongo que aquí termina todo.

Está vez fue primero ella, pasó y presentó el platillo, nunca me miró. Los jueces se mantuvieron sin mostrar un gesto de aprobación o negación sólo probaron y ella se quedó a lado esperando al resto, nos darían los resultados ya mismo.

Después llamaron mi nombre, mire mi platillo y después busque mirarla a ella... pero sólo escondía su rostro, realmente la decepcione.

-Lo siento... renunció. No merezco ganar esto. Gracias por todo.

Me quite el mandil y salí del lugar sin decir nada, no podía nisiquiera voltear.

Sería mejor cargar con haberme rendido que haber intentado con trampas. Aunque ya nada de eso importa, si Sasha me odia ahora.

Jean me esperaba en el café de siempre, como acordamos, llevaba la boca inchada porque tuvo que ir al dentista antes, le sacaron dos muelas por haber comido tanta azúcar en un período constante.

-¿Y ganamos?
-No, Jean... me retire de la competencia.
-¡¿Qué?! Ouch...
-Uff prepárate para esta historia y no digas nada.
-Ni puedo hablar.

Jean se dedicaba a mirarme e indicar con sus gestos lo que pensaba de cada palabra que salía de mi boca, cuando terminé de hablar él se levantó y me dio un zape en la cabeza después me abrazo y sentí esa necesidad de aceptarlo sin importar lo raro que nos veíamos.

-No te preocupes, vamos a solucionarlo.
-Gracias.
-Es lo que haces por los amigos.

2 meses y 12 días después...

Nunca volví a verla pero la extrañaba a cada paso, sentía ese nudo de haberla dejado con esa mala idea sobre mí, un nudo constante que nisiquiera mis ocupaciones me hacían olvidar. No sé por cuántas noches deseé borrar ese día, cuántas veces traté de tomar el teléfono y llamar para pedir perdón pero nunca tuve el valor suficiente para hacerlo.

Conseguí varios trabajos en verano para reunir dinero junto a Jean que estuvo conmigo para apoyarme.

-Uff hemos trabajado como asnos.
-Estoy cansado.
-¿Vamos por una soda?
-Okay pero es mi turno de pagar.
-Bien dicho.
-Vamos.

Durante el camino Jean me contaba de sus planes para declararse a Mikasa, sólo Dios sabe cuántas ideas tiene ese chico pero difícilmente se atreverá a realizarlas pese a eso si creo en una posibilidad o si no, bueno... supongo que seguiremos siendo la única pareja de chicos que viene a esta cafetería en calidad de solteros. Si, deberían envidiarnos.

-¿Qué gustan ordenar?
-Una soda super fría.
-Y yo una malteada de vainilla.
-Muy bien, en un momento tienen listo su pedido.
-Tú no bebes eso...
-Es que... no es para mí.
-¿Jean?
-Bueno... pues yo me paso a retirar. Adiós, Sasha.

Ella cubrió mis ojos y boca por detrás antes de que pudiera decir algo.

-Sasha... yo...
-Al menos dejame sentarme.
-Perdón.
-Ya, ya no pasa nada... al menos han ya ordenado.

No podía creer que ella volviera a estar sentada frente a mí con esa bonita sonrisa y sus ojos brillantes. Es tan linda cuando sonríe.

-Sasha... respecto a lo de ese día. No quería hacerlo, es cierto que tenía esa botella en mis manos pero sabía perfectamente que no quería ganar así, tú lo merecías más que yo.
-Lo sé, Jean ya me lo ha contado todo, por eso estoy aquí.
-De verdad lo siento espero que hayas ganado.
-Y fue así.
-Me alegro mucho por eso.
-Pero tampoco creo que haya sido demasiado justo, Nikolo también renunció.
-¿Qué?
-Quiso imitarte, para él fue como un acto de amor renunciar para que yo ganara, obviamente él no sabía el transfondo de todo esto pero bueno... sólo quedamos esa niña Gaby y yo pero mi motivo para esforzarme era más fuerte que el de ella.
-¿Cuál era?
-Tú... sabía porque estabas en ese concurso, quise aumentar tus posibilidades sin darme cuanta de que sume presión para ti.
-No entiendo.
-Bueno es que Jean es algo comunicativo por no decir chismoso. Él me dijo todo así que quise ayudar, sea que ganarás tú o yo, el premio sería para ayudar a tu mamá.
-Sasha de verdad... no sé que decirte ahora.
-Connie voy a ayudarte.
-No, es tuyo... tú ganaste así que...
-Déjame hacerlo, quiero dárselo a un gran amigo o al menos la parte que me queda.
-Sasha... no te preocupes, ya he conseguido trabajo para apoyar a mis padres. Tengo que hacer esto.
-Ay... hombres, entonces dejame pagar la cuenta de hoy.
-Pero...
-Nada de peros, ya dije.

Ese día juro que ame a Jean intensamente, de todos sus planes locos este era el mejor (o el que si resultó bien). De regreso a casa le conté todo a mi madre, ella estaba feliz. Después de tanto tiempo me sentía muy bien... Quería esforzarme al doble. No quería que Sasha pagara las cuentas siempre sobre todo ahora que podríamos salir más.

1 mes después...

-¿Y si no funciona me voy corriendo?
-Que si funciona, tú nada más sigue los pasos como ensayamos.
-No me hagas recordar lo que ensayamos.
-No homo.
-No homo.
-Ya viene, adelante, amigo.

Ella caminaba sin presión, como si el mundo entero le perteneciera. Así es ella, libre, alegre y brillante, no necesita ningún complemento pues todo en ella es precioso, cada cabello de su melena castaña, cada sonrisa que sus labios otorga, cada paso que da, cada parte de ella me hace sentir que es la ideal y mi única duda es si yo podría serlo para ella.

-Sasha... Sa... Sa... Sa... Sasha.
-Si, así me llamo- decía entre risa.
-Uff que difícil es decirlo.
-¿Uhm?

Vamos Connie como lo ensayamos... bueno no tanto... Ahhh ¿qué hago?

-Desde que te vi en ese pasillo... no volví a ver a ninguna niña tan bonita como tú... pensaba en la forma de estar cerca de ti y tratar de alegrar tus días como tú lo hacías con los míos sin notarlo.
-¿De verdad hice eso?
-Si y lo sigues haciendo... yo no sé que poder tienes sobre mí pero... Sasha... desde siempre te he querido, mucho más que a una amiga, tal vez demasiado que estas palabras las he planeado por mucho tiempo.
-Connie...
-Sasha me gustas... estoy profundamente enamorado de ti, sé que es una locura pero es más loca la forma en que haces que la vida sea tan dulce cuando estás cerca.
-Connie... shhh...

Puso su dedo índice en mis labios.

-No digas más... eres demasiado obvio con tus sentimientos y no sabes cuanto he esperado para escuchar esto, incluso estaba celosa de Jean pero bueno... si ambos sentimos ese sentimiento entonces...

Su aliento huele a caramelo, sus labios son más dulces que eso y tan suaves como el algodón de azúcar que lleva en la mano. No podría describirlo pero supongo que tocar el cielo es lo más parecido a besar a Sasha.

-Sasha... yo...
-Lo siento... es sólo que desde hace tiempo quería probar algo más de ti...

Tendremos bastante tiempo para hablar por ahora quiero que este sentimiento llene el tiempo que antes pasamos lejos. Sé que esto no termina aquí, Sasha se merece todo de mí y quiero dárselo. Que no se arrepienta de haber tomado esa decisión, que sus manos sigan sosteniendo las mías, ser yo quien esté pendiente de ella y ver esa bonita sonrisa. Hay tanto que quiero mostrarle y aprender de su lado porque lo nuestro apenas comienza.