Capítulo IX

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Me subí con cuidado a la motocicleta y me puse el casco que estaba en el asiento. La ecendí y avance lento para que no lo notaran. Afortunadamente el gran portón se encontraba al otro lado en el que estaba la bodega. Salí con mayor velocidad.

Lamentablemente como tenía los ojos vendados cuando estaba en la furgoneta no pude ver el camino y ahora no conocía ni un árbol. El camino estaba lleno de vegetación y por donde yo iba, estaba muy rocoso.

***

La vencina se agotó. Ya estaba algo lejos de aquel horrible lugar. Me bajé de la motocicleta y me senté en el césped. Estuve ahí varios minutos y recordé algo, más bien a alguien. Tomé mi telefóno y marqué un número.

-Hola Maggie, me agrada escuchar tu voz nuevamente, ¿Ocurre algo?

-Héctor... necesito tu ayuda -Pedí

-Lo que quieras -Ofreció.

-Me escapé... -Solté -Me subí a una motocicleta y para variar se quedó sin vencina -Escuché grandes carcajadas del otro lado del teléfono -¿Puedes venir por mi? -Pregunté seria, Héctor dejó de reír.

-Bien, pero... ¿En dónde estás?

-A unos 20 minutos de la "Guarida".

-Ok, voy para allá

***

Supongo que la puntualidad no es una virtud de Héctor, ya que llegó una hora y media después, lo bueno es que por lo menos trajo un vehículo para transportarnos.

-Bien Maggie, súbete al auto.

-Gracias

Me subí a la camioneta negra que trajo Héctor y cerré la puerta.

El camino fue largo y silencioso. No tenía idea a donde íbamos.

***

Cuando llevábamos media hora de camino, pude notar el restaurant que me había juntado con Alfonso y Estelle. Héctor se detuvo justo enfrente.

-Tienes que ir señalando donde queda la casa de la Sra Rossie, ¿Entendido? -Asentí levemente, ahora entendía quería ir con Estelle. Fui guiando la dirección.

***

Una vez que llegamos pude notar que Héctor estaba algo nervioso. Él tocó el timbre que estaba en la reja de afuera y la Sra Rossie abrió. Nos miró confundida y después nos dejó pasar a la casa.

Llamó a Estelle con un gran grito entre emoción, preocupación y confusión. Estelle abrió los ojos como platos y se lanzó encima de Héctor. Ella lloraba de emoción.

-¿¡Donde estabas!? -dijo Estelle eufórica y alegre.

-Es una larga historia.

-Te escucho -Asintió.

Héctor le contó con lujo de detalle todo lo que había ocurrido. Cuando terminó, se escuchó que alguien golpeaba fuertemente la puerta.

PD: Este capítulo fue algo corto
[Maggie en galería]

El asesinato de Constanza © (#1 Mystères Infinis)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora