Capítulo #14: Me duele

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Ha pasado tres semanas de que Derek y yo nos besamos por primera vez, desde ahí siempre lo estamos haciendo...aunque a escondidas.

He notado reacciones extrañas últimamente. Cuando me acerco, se distancia un poco. Cuando le hablo, le brotan los nervios. Cuando quiero compartir comida, no la acepta. Eso es raro, la comida nunca se niega.

¿Será que lo consume el miedo? Tengo ganas de saber que siente al respecto.

La otra vez, las cosas casi suben de nivel. Tenia ganas de que fuera mas allá, pero eso implicaba revelar mi secreto. No podía.

—¿Qué sucede Smith? No puedes ni hacer un disparo— Dijo el entrenador Li, él es tranquilo con nosotros.

—No se, tengo la cabeza en otro lado...— Dije cansada y con un tono apagado.

— Olsson, ayuda a tu compañero con esto— Trajo a Derek a mi y se fue a controlar a los demás.

Él me miro con una sonrisa pícara y se acercó de forma seductora.

— Nunca había visto algo tan poco sexy— Reí de sus gestos y sentí calor en mis mejillas.

Me gusta su sonrisa.

— Mira, primero relájate. Estás muy tenso y para esto tienes que estar tranquilo y concentrado— Me dio la vuelta y me masajeo la espalda.

—Deberías de ser mi masajista personal— Gire un poco mi cuerpo para verlo pero volvió a voltearme.

—Lo discutiremos luego. Ahora agarras el rifle y lo sostienes con fuerza— Tomo mi mano y juntos, apuntamos. —Dispara

Seguido de su suave tono, apreté el gatillo. Él paso sus manos por mi cintura y se fue.

Ya sabía hacer todo eso, pero me parecía tierno que me enseñara. Sólo estoy descarrilada, tengo que confesarle la verdad.

Esta noche lo haré, aunque tengo miedo. 

¿Qué dirá?¿Me odiará por esto?¿Qué pensara de mi después?

Voy a tratar de explicarle mi situación de la mejor manera. Y si todo acabará, está bien. No puedo esconderle esto. 

—¡Pequeñin! Estoy torciendo tu dedo y no reaccionas— James soltó mi dedo anular y me abrazo de atrás, colocando sus brazos en mis hombros. 

— No le gusta cuando no le prestan atención, se nota — Agregó Seth, mientras jugaba con un cubo Rubik. 

— Cole es el preferido de todos, hasta para Derek— Max codeó mi brazo.

— ¿Cómo que para Derek?— Pregunté, tratando de esconder mi emoción por la respuesta. 

— Si, siempre veo que trata de estar cerca de ti— Kurt me miro mientras sacaba una goma de mascar.— Tiene vista de halcón. 

— Yo creo que lo está vigilando— Max comentó agarrando su barbilla. 

— Derek está homo con el pequeñin— James lo buscó con la mirada. 

— Ya, nomás somos amigos— Dije serena, queriendo gritar de la felicidad. 

Estoy segura de lo que siente por mi. Pero aún así me hace sentir feliz que otros también lo noten. 

Fui a mi habitación con una sonrisa de oreja a oreja. 

...

Luego de cenar, salí a jugar baloncesto. Practique un poco para estirar mi altura y mejorar mi apariencia. 

A veces pienso que esto no va a durar mucho. Siento un miedo increíble en que me descubran y traigan a Cole en mi lugar. Y como si fuera poco, la venda en mi pecho dificulta mi respiración y cada vez es más incomodo. 

Me duele. 

Encesté el balón en el aro. 

— Buen tiro— Derek dijo detrás de mi. 

— ¡Derek!— Voltee asustada.

— Cole— Se acercó a mi de manera seductora.

— Me asustaste...estaba practicando un poco...— Dije agitada. 

— Lo noto, estás empapado— Tomó el balón y lo encesto.— ¿Jugamos? 

Asentí emocionada y comenzamos a jugar. Él corrió a mi aro con mucha velocidad y yo fui por detrás, tratando de quitarle el balón. 

— Te falta velocidad— Rebotó la pelota más rápido y encestó dando un salto espectacular. 

Me pasmé y él sólo se río. 

Siguió el segundo round, él se dejo llevar y le quite el balón por debajo. Corrí rápidamente y encesté en su aro. 

— Ventajas de ser más pequeño— Le guiñé y Derek cruzo sus brazos mordiendo su labio inferior, con una pequeña risita. 

En el tercer round tenía el balón, pero pronto se fue de mis manos. Intenté sacársela, pero se volteo y estiro su brazo, cubriéndose. De repente, tocó mi pecho por accidente y me alejé por reflejo. 

— ¿Qué?— El juego paró, miro su mano y luego a mi. — ¿Qué traes en el pecho? 

Mi corazón comenzó a acelerarse y mi respiración se acababa. Me caí al suelo. 

— ¡Cole!— Bajó al suelo y coloco mi cabeza en su regazo.— Tranquilo...¿Qué sucede?

— Mi pecho...no puedo respirar...— Dije agotada. 

Él levantó mi camiseta y vio la venda. Su expresión cambió totalmente, me levantó con sus brazos y me llevó corriendo a la habitación. 

Al llegar, me recostó en mi cama, saco mi camiseta y la venda. Por fin pude respirar, pero vio mis pechos con una expresión preocupada en su rostro. 

— Qué...— Se volteo y me coloqué la camiseta otra vez.— Cole...eres mujer...

— ¡Derek, juro que iba a decírtelo!— Me puse en frente y agarre su mano.— ¡Por favor, no se lo digas a nadie! 

— ¿Quién eres?— Preguntó confundido. 

— Voy a contártelo todo...— Respondí y nos sentamos al borde de mi cama. 

Fue peor de lo que tenía planeado...



Hola besties, ahre. Hace mucho no publico, y acá estoy, tratando de volver a escribir otra vez! Espero que el capítulo les haya gustado, nos vemos <3 


El plan que jamás penséWhere stories live. Discover now