<Eight>

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ㅡ¡Felix! ㅡChangbin llegó al callejón, y al ver la escena se acercó molesto hacia el atacanteㅡ ¡Suéltalo, imbécil!

Le pegó un puñetazo en la mejilla, haciendo que cayera al suelo y soltara a Felix. El otro chico que no había dicho ni "A", lo empujó, pero era demasiado débil y flaco, así que Changbin pudo fácil contra él.

El que había caído en el piso volvió a incorporarse y se la agarró con Seo, mientras que el chico flaco atacaba a Felix. El menor pudo defenderse porque era más fuerte, pero a Changbin le costaba un poco vencer a su corpulento contrincante. Tiró al chico al suelo y comenzó a pegarle en toda la cara, incluso cuando ya estaba indefenso. Estaba enojado porque había querido dañar a Felix.

ㅡ¡No! ¡Lo vas a matar! ㅡrogó el chico menudito.

Changbin dejó de golpearlo y se lo quedó viendo, serio.

ㅡHijo de perra, no volverás a molestar a nadie ㅡle advirtió dándose la vuelta y saliendo del callejón.

Felix le echó una última mirada al chico tirado en el suelo, que lo miraba con odio, y fue detrás de su hyung.

ㅡChangbin... ㅡle llamó. El otro se dio vuelta y lo encaró serio.

ㅡ¿Por qué te metiste ahí? ¿No sabes lo peligroso que puede ser? ¿A caso no piensas bien, o qué? ¿A quién se le ocurre meterse a un callejón sin cuidado? ㅡle inquirió con los brazos cruzadosㅡ ¿Sabes lo que pudo haberte hecho ese tipo?

ㅡYo... lo sé, sé lo que me pudo haber pasado. Pero no sucedió, porque llegaste tú... gracias. T-Tendré más cuidado para la próxima, lo siento ㅡse disculpó apenado.

Changbin suspiró y lo observó.

ㅡ¿E-Estás bien? ㅡpreguntó en un tono más bajo.

ㅡUh... sí ㅡFelix lo miró sorprendido, notando su preocupaciónㅡ. Pero tú... tienes algunas heridas.

En efecto, Changbin tenía un raspón en la mejilla, el labio partido y un poco de sangre en la nariz y en los nudillos lastimados.

ㅡOh... no es nada, en casa me curaré ㅡdijo tocándose la mejilla adoloridaㅡ. No sé que hubiera hecho si algo te... ㅡinterrumpió sus palabras, dándose cuenta de lo que estaba diciendo. Felix lo miró ilusionado, creyendo que diría lo que esperaba. Pero Changbin no podía admitirloㅡNo sé que... hubieras hecho si yo no aparecía. Te salvé la vida, ahora me debes una.

El menor bajó la cabeza decepcionado. Creyó que diría que no sabía que hubiera hecho si algo le hubiera pasado... creyó que demostraría preocupación por él. Pero Changbin seguía siendo frío, sin siquiera pensar en lo que podría estar sintiendo el otro.

ㅡSí ㅡrespondió cabizbajoㅡ, tienes razón, me salvaste. Gracias.

Quedaron un rato en silencio, hasta que el mayor recordó algo y lo miró.

ㅡ¿Y qué hacías siguiéndome? ㅡinquirió con los ojos entrecerrados.

ㅡOh... yo no... no te estaba siguiendo ㅡmintió nervioso, creyendo que lo había olvidado.

ㅡ¿Ah no? ¿Qué hacías detrás mío? ㅡChangbin se cruzó de brazos, mirándolo serio.

ㅡEs que yo... te estaba buscando para hablar contigo ㅡdijo al fin, forzando una sonrisa.

ㅡ¿Entonces por qué saliste corriendo cuando te vi y te llamé?

ㅡUh... Hum... ¿por qué? Pues porque... porque... yo... ¡me había olvidado de algo! Sí, no escuché que me llamabas, no sabía que me estabas persiguiendo, yo sólo iba a volver para buscar algo a la escuela ㅡse excusó el menor, tratando de sonar creíble.

ㅡ¿Y para qué carajos te metiste en ese callejón si ibas a la escuela?

Diablos... Changbin era muy inteligente. Pero jamás admitiría que lo estaba siguiendo.

ㅡOh, pues, verás, yo... iba tan apurado que no me fijé por dónde me metí ㅡrespondió Felix.

ㅡUh, ¿pues entonces por qué me llamaste cuando ese tipo te estaba por hacer daño, si no sabías que te estaba persiguiendo? ㅡinterrogó el mayor.

Esta vez, el chico tardó un poco más en responder.

ㅡEs que... como estabas cerca, pensé que me oirías si te llamaba ㅡcontestó.

ㅡMmh... ya veoㅡasintió Changbin, aunque no muy convencido.

ㅡ¿Y tú... a-adónde ibas? ㅡse atrevió a preguntar el menor.

ㅡ¿A caso te importa? ㅡdijo con frialdad, dejando a Felix atónito.

ㅡBueno, sí, sí me importa porque quiero hablar contigo, pero si tienes algo importante que hacer, mejor lo hacemos después.

Changbin suspiró.

ㅡBien, sólo iba por una consola de videojuegos que acaba de estrenarse. Pero podemos hablar ahora, seguro ya se gastaron porque eran edición limitada ㅡexplicó el mayor.

>>Oh... por eso iba tan apurado. Quería conseguirla rápido, antes de que se acabaran<< pensó Felix >>Qué tonto soy, ahora ya no la tendrá porque seguro ya las vendieron todas, si eran tan esperadas<<.

ㅡQuizás todavía tienen algunas, podemos ir a ver, y luego hablamos ㅡpropuso Felix, apenado por haberlo seguido creyendo que podría hacer algo malo o encontrarse con alguien más.

ㅡSí, podría ser... está bien ㅡaceptó comenzando a caminar hacia donde había estado dirigiéndose antes de que el menor apareciera. Felix lo siguióㅡ. Mientras tanto dime de qué quieres hablar.

El menor tragó saliva, nervioso. No sabía por dónde comenzar. Los pequeños discursos que se había memorizado el día anterior antes de hablar con Changbin, ya no los recordaba. Debía improvisar, como una persona normal.

ㅡHum... yo... ㅡsuspiró y reunió fuerzas para poder expresar lo que queríaㅡ. Dime porqué te has alejado así.

ㅡ¿Uh? ㅡel otro le miró sim comprender.

Quizás no lo había dicho de la mejor forma.

ㅡYo... quiero saber porqué antes éramos los mejores amigos y ahora sólo somos... compañeros. ¿Por qué te has distanciado tanto? De repente un día dejaste de tratarme igual, comenzaste a ignorar mi existencia, dejaste de hablarme como siempre... dejaste de sonreirme... de sonreír.

El mayor se quedó unos segundos sin saber qué decir. Le sorprendía que Felix quisiera hablar de eso. Creía que no le importaba.

Y pues obvio que sabía la razón, pero, ¿se la diría?







Love Letters To My Homophobic Hyung || ChanglixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora