XLVII

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Salí del agujero y unos brazos me sugetaron.

Lo miré y era Ander, él estaba bien.

Me aferre a su cuello y comenzó a caminar comigo a la salida de Intelecto.

Mi hemano caminaba a su lado con la respiración entrecortada por tanto humo.

Salimos del instituto y me llevaron directo a la ambulancia.

Ander y Felix subieron conmigo. De pronto me entraron muchas ganas de dormir. Estaba a salvo y nada me pasaría.

-No te duermas -me dice Ander mientras sugeta una de mis manos -Por favor, ya vamos a llegar

-Tengo sueño -susurro

-Chaparra -me dice Felix -Eres una guerrera -sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas

-¿Quién era? -pregunto

-¿Qué?

-¿A quién te refieres?

-Al que murió en las escaleras

Ambos se miraron y se quedaron callados.

-¿Lo conocía?

No se movieron ni dijeron nada.

-¿Quién?

En eso llegamos al hospital y me bajan de la camilla.

Me ingresaron por puertas y paredes blancas. Me depositaron en una cama y una enfermera me conecto el suero por intravenosa.

Después colocó una sustancia y en segundos caí en un profundo sueño.

Cuando abrí los ojos vi a Ander sentado a mi lado.

-Hola preciosa -me dice mientras besa mi mano

-Hola

-¿Cómo te sientes?

-Mejor, ¿Cuál es mi diagnóstico?

-Bueno por suerte solo es cansancio, heridas superficiales y probablemente trauma psicológico

-¿Dónde está mi familia?

-Afuera, ¿Quieres que los llame?

-Paso algo grave, para que no estén aquí adentro -me siento en la cama -¿Quién es el que murió?

-Edmundo

Todos los recuerdos con mi hermano mayor me abrumaron, uno tras otro.
Todas las peleas, los juegos, nuestras horas de estudio, los regalos de navidad, los paseos en su carro por el centro de la ciudad, los helados compartidos, las fiestas, las pijamadas, las idas al cine, los apoyos emocionales. Todo.

Comencé a llorar desconsoladamente, Ander me abrazó y acarició mi espalda delicadamente.

-Mi hermano, Ander... -susurraba una y otra vez

Entro una enfermera con una jeringa en la mano.

-La paciente no puede alterarse, necesita descansar

-Lo siento -dice Ander sin soltarme

-Ander -me mira -¿Por qué él?

-Señorita tiene que descansar

-No quiero descansar -le digo molesta casi histérica -Quiero la verdad Ander

-Bueno en realidad yo iba a entrar primero, pero él me lo impidió, dijo que él era quien te sacaría, así que me mando a ayudar a apagar el fuego -suspira -Estaba entrando Felix cuando escuchamos el grito desgarrador, así que Felix fue a ver que ocurría, después de hablar les dije que era imposible bajar por esas escaleras, no soportaría el peso ni de un niño

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