He was growing in my garden and I
pulled him out by his hair like a weed--Realmente, ¿No intentarás prestar atención?
--Lo intento, lo hago, pero tus preciosos ojos me distraen.
Albus rodó los ojos, rojo, y cerró el libro de un golpe.
Scorpius no mentía, sin embargo. Albus lo distraía, como la mayor parte de las ocasiones, pero no por sus preciosos ojos esmeralda, sus pestañas, el desordenado cabello o sus hoyuelos, no (bueno, sí), sino que su cabeza no podía dejar de volver hacia las palabras que oyó ayer por la tarde. Quería preguntarle al chico sobre eso: ¿Por qué los echaste? ¿Fue por mí? Pero, de alguna forma, tampoco quería lucir como si le importara demasiado. Recibía comentarios como esos todos los días, y siempre se burlaba, respondía mordazmente o los ignoraba, por lo que sería más complicado si los demás supieran cuánto le afectaba el asunto.
Quizá, también, estaba exagerando un poquito. O quería mantener su imagen de chico malo frente a Albus, por que parecía estar llevándose bien con él y aceptándolo, pero..., demonios, Scorpius no podía lidiar con la curiosidad. Lo ponía ansioso y estúpido; le hacía ver hacia Albus cada dos por tres y volver la vista a la mesa, como si estuviera observando un juego de ping pong.
Y Albus era inteligente, aún más que él. Era de esperarse que notara si algo le sucedía:
--Bien, ¿Quieres decirme qué te pasa?
--¿Eh?--Scorpius sacudió la cabeza con efusividad--, nada, nada.
--Scorpius.
--Mi amor.
--Me estás mirando a cada rato--Albus comentó, ignorando su comentario y mirándolo debajo de sus preciosas y largas pestañas. Scorpius creyó que podría observarlo por años--, ¿Qué pasa?
--Nada, estoy aburrido--mintió con facilidad--, ¿Sabes qué significa eso?
--¿Que haces la tarea para entretenerte?
--No, raro, eso significa que haré alguna tontería--se puso de pie, empujando la silla con tanta fuerza que la bibliotecaria se acercó a amonestarlo. Una vez que se fue, se volvió hacía Albus con expresión lastimera;--. Siempre se las agarra conmigo, la muy malvada...
--No veo por qué será--Albus respondió, sarcástico, mientras volvía la mirada a su libro. Estaba profundamente decepcionado, por alguna razón, de que Scorpius se vaya.
--Ahora, ponte de pie--murmuró Scorpius.
Albus se sobresaltó.
--¿Qué?
--¿Crees que iré solo?
--¿Sí?
--No, querido--Scorpius sonrió, tomando suavemente al chico--. Necesito buena compañía, una fuerte presencia de la ley para que sea más divertido.
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Moהotoהía (SCORBUS)
Fiksi PenggemarAlbus Potter está cansado. Cualquiera que mirara desde afuera, fácilmente puede decir que lo tiene todo: dinero, padres famosos, buenos hermanos, las mejores notas de la clase y la capitanía del equipo de Quidditch. Pero las cosas no eran tan sencil...