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La mañana continuo si curso, el sol comenzó a calar en su delicado rostro, un rostro tan pacifico, pero solo era un sueño el tenerla ahy.

El olor a un desayuno recién hecho hizo que si estómago y nariz saltará de la emoción provocando que gruñera demandando comida.
Ella de inmediato abre los ojos y ve a Ezequiel frente a ella con un plato repleto de comida.

- Hola ya has despertado, ¿Como amaneciste? - pregunta interesado.

- Pues muy descansada, tenía tiempo que le dormía tan cómoda - decía mientras estiraba y relajaba sus músculos.

- Me alegro, toma - dice dándole el plato en sus manos - es tu desayuno.

- Gracias - lo toma alegremente. Tomando los cubiertos comenzó a cortar un pedazo de carne, cuando está lo prueba abre los ojos más que sorprendida.

- Qué? Pasa no está rico - menciona preocupado E.E ante la cara de Sofía.

- No todo lo contrario está riquísimo - Ezequiel sonríe ante la cara tan infantil que hizo Sofía al probar la comida

La sonrisa de Sofía es lo único que lo mueve, es lo que li mantiene aún con la esperanza de que al terminar esto ella lo pueda amar, pero si no es así, tendrá que dejarla ir sin falta aunque su corazón se parta.

Porque, quién quisiera tener de pareja a un hombre que se lío con otros quién querían ver mal a su actual pareja, pero para colmo alguien que no la quiere a ella, pero quién no quisiera tener a Sofía de amiga.

- Oye Ezequiel - menciona Sofía cuando ya había terminado de comer.

- Si cariño - menciona con dulzura.

- Cuando me dejaras ir.

Esa es la pregunta que más tenía escuchar de sus dulces labios.

- Pronto cariño - dice mientras la abraza y le deja un beso en la coronilla

*****

Ya pasado un mes, Sofía aún no aparece, Rosa comenzó con los síntomas de un embarazo y no puede estar más feliz de que la pequeña dama no aparezca.

Rafael, resolviendo problemas con su ex pareja pensando si debería volver o no, Steven ya nadie se acordaba de él verdad.

Pero hay se encontraba en uno de los juzgados más importantes de la ciudad. Peleando la pensión alimenticia para una pobre mujer que su pareja se fue dejándola con un hijo de 5 años y uno que viene en camino.

- Su señoría - se levanta Steven con formalidad llamando la atención del juez frente a su ojos. Con algunas hojas en mano este pide la palabra. Y la autoridad se la concede con un asentimiento de cabeza - Gracias - dice primeramente - como ya sabemos señor, y yo en representación de mi clienta le hago saber que ella solo pide la pensión para su hijo y gastos por el que viene en camino.

- No pienso darle nada a esa vieja - Se levanta furioso el hombre ante la petición de ella.

- Guarde silencio y siéntese - le dice el juez imponiendo autoridad.

El hombre a regañadientes se sienta y el juez dicta que continúe.

- No pide que este con ellos si no lo desea, que solo le apoye económicamente ya que por petición de él señor Gómez dejo si trabajo y después de enterarse de su segundo hijo la abandonó, la señora Stella solo es lo que pide, ah y otra cosa que se le dejé la casa - decía todo con tono serio impecable sin tartamudeo.

Doloroso amor llDonde viven las historias. Descúbrelo ahora