Volteando ve que hay estaba la mujer que lo trae loco con un hermoso color lila, zapatillas negras y su hermoso cabello suelto solo resaltando su maquillaje natural.
Hay fue cuando Ernesto giro su a la mujer y se sorprendió que fuera Sofía la cuál a él le dirijo una mirada dura y calculadora, en cambio cuando ve a Steven su sonrisa salió a flote y asta un poco de rubor en sus mofletes.
Ernesto hace un carraspeó con su garganta y Sofía voltea hacia él.
- Ya has firmado los papeles.
- No.
- Y que es lo que esperas, no es lo que querías, librarte de mi.
- Eso no es....
- Que? Ahora miento - Sofía hacer una risa burlona y con su entrecejo fruncido.
- No eso no es lo que quise decir.
- Ya por Dios Ernesto mejor firma los papeles y te ahorras todo el teatro de que. Ay Sofi no me dejes en la calle, Sofi por favor perdóname no era mi intención lastimaste o tal vez Sofi no te divorcies de mi. Basta de tus estupideces y basta de tus intentos de hacer que esto no suceda, va y está sucediendo así que déjame en paz.
- Está bien Sofía firmaré los papeles en este instante.
Un poco sorprendida, pero a la vez decidida de lo que estaba a punto de ocurrir, Ernesto saca de su maletín unos papeles y una pluma de color semejante al de la firma de su aún esposa, con letra legible y con elegancia firma el acta.
- Bueno - habla Steven ante el silencio incómodo y la abrumadora tensión - están oficialmente divorciados.
Ernesto solo ve a Sofía y ella solo desvió la mirada a Steven que toma los documentos extendidos por Ernesto, viendo cómo sale su ahora ex esposo por la puerta se desmorona y Steven la socorre para que no llorara desconsoladamente ella sola él la abraza mientras solloza ante lo ocurrido.
- Ya pequeña Sofía, todo ya terminó.
- Lo se, pero aun me duele está separación.
- Lo entiendo pequeña, ahora que vaz hacer y por lo que veo no tendremos la pequeña salida que te había prometido.
- No, no estoy bien salgamos - trato de hacer una sonrisa, pero está se transformó en una nueva de descontento.
- No pequeña mejor te llevo a tu casa para que descanses está bien - dice aquello mientras toma del rostro a Sofía y ve sus ojos.
- Porque no te conocí primero Steven, me allá ido mucho mejor en un matrimonio contigo.
- Ay que cosas dices Sofía, pero haciendo memoria si te conocí antes de que te casarás.
- No lo recuerdo.
- Si recuerda pequeña fue el día que Ernesto te pidió que te casarás con él.
- Ah, ya recuerdo tu eras el chico que salio de la fiesta esa vez.
- Como?, Me viste que salí de si fiesta.
- Claro que sí, como olvidaría a un chico tan guapo.
Entre risas se fue el tiempo y llegó oa hora de la salida de Steven con una sonrisa toma la pequeña mano de Sofía que encajaba perfectamente con la suya.
- Vamos te llevaré a tu casa.
- Está bien.
Conforme salían las personas que aún se encontraban ahí los veían que caminaban muy familiarmente sin ningún problema.
*****
El pasas de los días, meses Sofía se ha ido encariñando con Steven y siente como si fuera la primera ves que lo ve, siente como su corazón late desenfrenadamente al estar sentada frente a él a esperar a que saliera de trabajar.
- No entiendo cómo es que haces tan rápido tu trabajo - menciona soltando un suspiro cansado y con algunos papeles en las manos.
- Pues solo hay que hacer lo que se indica y también hay que saber hacerlo.
- Creo que tienes razón al decir eso.
- Claro que lo tengo - suelta una pequeña risilla ante su pequeña adulación a si misma - vamos deja eso ahí y salgamos.
- Espera tengo que terminar.
- Después anda.
- Ok vamos.
Saliendo por los pasillos llegando al elevador y Sofía apretó el botón que daba al último piso, mientras ellos iban hablando de un tema en particular.
- Como te has sentido todo este tiempo.
- Pues aún me duele un poco, pero ya no siento nada por el y creo que me estoy enamorando de alguien más.
El escuchar eso a Sofía le creo un sentimiento se tristeza y un poco de celos en cada poro de piel de Steven.
- Oh sí y se podrá saber quién es - pregunta un poco interesado.
- No, aún no es momento de que sepas quién es aquel que ha robado mi corazón.
El elevador para y salen de aquella caja de metal, saludando a la secretaria que se encuentra en su lugar hablando por teléfono se hacerca a ella.
- Si, ok, Si, yo le comunico - termino su llamada y volteo a ver a su jefa la mano derecha de ella - buen día señorita Sofía.
- Buen día Esme quería comentar que saldremos un rato y creo que nos veremos hasta mañana.
- Bueno está bien señorita, pero con la persona que acabo de tener una conversación me pidió que le asignará una cita en con usted.
- Conmigo - dijo con el entrecejo fruncido si saber el motivo, que recuerde no tiene citas en su agenda del bufete o de la empresa de la cuál también está a cargo - pero si no tengo pendientes, de hecho trate de hacerlos y las reuniones son asta la próxima semana.
- No jefa, no fien ningún socio o algo sion fue.
- Hola Sofía - esa voz la reconocería dónde fuera.

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Doloroso amor ll
RandomEl silencio es abrumador, la felicidad no se compra con dinero, pero el matrimonio es obligado. Ernesto, Sofía un matrimonio arreglado por sus padres, Rosa la novia despechada y envidiosa, E. E el enamorado de Sofía. Porqué el fin es solo el comienz...