No Quiero Ser Un Héroe, Año 2 / Autor original: Etherian / Traductor: The Snarry's Archivist
~Disclaimer: Los personajes son propiedad y autoría de JK Rowling y WB.
Resumen: (N/A) Solo una advertencia de que esta historia, aunque terminada, no tiene...
Hermione, Harry y Draco estaban charlando sobre la serpiente de Draco, Lengua Pársel, y el duelo en general cuando fueron interrumpidos en su caminata por el agua en el corredor del segundo piso que venía del baño de chicas abandonadas. No lejos de la puerta del baño de chicas estaba la figura de un hombre.
—¡Es el Sr. Filch! —Harry dijo de repente mientras se deslizaba un poco, y luego se agachó junto al hombre. Con un poco de vacilación, tocó el cuello del hombre sintiendo un pulso. Cuando sintió un latido estrepitoso, dejó escapar un suspiro de alivio—Simplemente noqueado...—.
Hermione interrumpió mientras se alejaba cautelosamente de un carmesí que coloreaba el agua en el piso—No del todo, Harry. El Sr. Filch está sangrando—.
Harry se puso de pie—Draco, llama a Madame Pomfrey y yo iré al Gran Comedor—Decidió Harry—¿Estás bien con quedarte aquí, Hermione? —.
Ella asintió—Estaré bien, Harry—Hermione se agachó junto al señor Filch y le tocó el hombro. Mientras los muchachos salían corriendo, la bruja ordenó—¡Dense prisa! —.
Si Harry y Draco la escucharon, Hermione nunca lo sabría. En segundos estuvo sola con el cuidador, y el agua seguía fluyendo lentamente desde el baño.
Durante unos minutos, Hermione se quedó dónde estaba, pero luego comenzó a examinar a Filch. Ella pensó que él debía haberse resbalado en el agua y luego golpearse la cabeza. Hermione encontró una herida reveladora en el templo más cercano al piso. Su atención fue repentinamente desviada del hombre herido cuando notó que el flujo del agua había aumentado. La bruja suspiró exasperada; Myrtle realmente había creado un desastre.
Dando un paso con cuidado, abrió la puerta del baño preparándose para llamar a Myrtle cuando vio que el enorme lavabo octogonal cerca de la puerta se había partido como un pastel. Una sección había desaparecido y había un agujero oscuro en el piso. Hermione vaciló pero nuevamente su curiosidad la molestó. Desafortunadamente, una barra de jabón de manos vieja y errante que había caído al piso, envió a Hermione directamente a la oscuridad. Ella gritó de terror cuando cayó... cayó... y nunca pareció detenerse.
Saliendo de esconderse en uno de los retretes del baño, Myrtle La Llorona flotó con cautela por el suelo mojado del baño hasta el agujero oscuro revelado por los lavabos abiertos. Cuando los gritos de Hermione se desvanecieron, el fantasma observó cómo el fregadero perdido se levantaba de la oscuridad con un sonido áspero y rechinante. El lavabo una vez perdido se instaló en su lugar, y los demás se unieron para ocultar la oscuridad.
Hermione se había ido.
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Draco regresó al segundo piso con Madame Pomfrey, quien fue inmediatamente a ver al Sr. Filch. No muy lejos estaba Harry con su padre, el profesor Malfoy, y la directora. Remus Lupin con Albus Dumbledore los habían seguido por curiosidad.
Una vez en la meseta de agua corriente, el Sr. Filch y Madame Pomfrey, Harry fue al lado de su padre, y Draco fue a apoyar a su padre. Ninguno de los dos dijo nada pero observaron. No se les ocurrió preguntarse dónde estaba Hermione.
