No había revisado mi celular desde esa vez en la que lo estrellé contra la pared, aproximadamente dos semanas (que inmaduro se mi parte siendo sincera).
Tampoco había ido a trabajar. Me reporté como enferma. Si supieran que en realidad había bebido todo lo que no bebí en un año por un idiota al que aún extraño y que me cortó por mensaje, pero él no era la razón principal.
En fin, no había hablado con nadie más que con la cajera del supermercado cuando voy a comprar comida y vodka.
Me levanté de la cama y fui al baño. Abrí las llaves de la regadera y me metí después de quitarme la ropa.
Una lágrima salió.
Realmente me afectó en cierta parte lo de Duff. Me hace cuestionarme si mi pequeño círculo social está por lástima o no.Salí del baño en cuestión de minutos y me coloqué la ropa.
No voy a dejar que mi mundo se desmorone por un hombre, no ahora cuando mi juventud florece.
Bien dicen que los padres siempre tienen la razón y hoy, con veintidós años les aseguro que es cierto. Debí seguir estudiando, debí hacer caso cuando me anexaron y no debí seguir los pasos de mi hermano. Y también como dijeron mis padres por última vez antes de alejarme: "el error ya está hecho, ahora trata de enmendar las consecuencias". Y heme aquí, viendo lo estúpidas que fueron las consecuencias.
Lo importante es la salud, ¿no?....Salí del apartamento. El casero venía detrás de mí pero lo ví cuando ya estaba dentro del auto, se veía que tenía urgencia de decirme algo.
Extrañaba a los chicos. Extrañaba Lenny, no había noticias de él.
Hoy era de esos días en donde aborrecía mis decisiones del pasado. Podría estar siendo una gran dentista sobria, pero no. Igual no me puedo quejar, si quiera tengo un lugar donde vivir....
Llegué al trabajo y comencé mi turno. Ahí estaba Valentina, pero no me hablaba y pues, no me importaba jaja.
— ¡Hey! ¿Te atropelló un camión? ¿O te atacó una groupie? — rió Valentina junto con otro chico.
Suspiré.
— ¿Me vas a ignorar? — preguntó.
Yo seguí con lo mío, pues no tenía nada mejor que hacer.
— ¿Te crees mucho por ignorarme, linda? —
Ya un poco molesta decidí contestar.
— ¿No tienes mejores cosas que hacer, "linda"? — pregunté.— ¿Tu novio te cortó? ¿Estás en tus días? — preguntó riendo junto con otro idiota. Dios, me dió más risa cuando me cortaron por mensaje jajajajajaja.
— No vayas a matar a alguien de la risa, comediante — contesté.
Me miró mal.
— Lo bueno es que hoy es el último día que te vemos — dijo ella mirando al otro chico que sólo asentía.
— ¿Cómo? — pregunté.
— La jefa dijo que no le conviene que una de sus empleadas esté enfermandose continuamente — comentó ella.
Levanté una ceja
Mierda.— Bueno... dile que no se moleste — me quité la tarjeta que lleva mi nombre colgado en mi playera — Renuncio — le entregué eso en la mano y salí rápidamente. Igual ya era cansado trabajar ahí.
Breana Mustaine de mal humor (o en cualquier circunstancia) es sinónimo de estupidez.
Caminé sin rumbo pero me arrepentí y volví a casa. Casi olvido el auto.
Entré al edificio y esta vez el casero sí me detuvo
— ¡Breana! ¿Tienes lo de la renta? — preguntó de mala gana, siempre le he caído mal, en especial porque es el padre de Valentina.
Maldita sea.
— Hmm, ¿Puedo dárselo mañana? Me despidieron hoy y era día de paga — Mentira, renuncié — Y no tengo dinero... —
— Ay... lo siento pero no puedo hacer eso — respondió fingiendo pena.
— ¡Santo Cielo! Pero si la vecina le debe como cuatro meses de renta y a ella no la ha corrido — excusé.
— Pero ella no hizo sufrir a mi hija —
— ¿Cuántas veces tengo que pedirle perdón? ¡Por favor! deje morir el pasado — exclamé.
— Bueno, entonces suerte consiguiendo un lugar donde dormir, porque no vas a poder pasar — mencionó. Que hombre tan cínico.
— ¿Va a dejarme pasar por mis cosas?.... —
Suspiró harto — Tienes treinta minutos, chica —
— Gracias — contesté.
Afortunadamente tengo pocas cosas, puedo poner toda mi ropa en dos maletas aunque solo tengo una maleta....puedo hacer dos viajes, pero ahora no, es tarde.
Tomé lo necesario incluyendo algo de lo que se encontrara en la nevera y mi celular.Él ya me esperaba afuera.
— Haré dos viajes, pero no hoy — le entregué las llaves (y no fui tonta, porque tengo un par más).— A ver si puedes entrar —
Lo ignoré.Salí del edificio, ¿Dónde me quedaré?
Maldita sea.
Quería llorar, era una combinación entre coraje y tristeza.Aquí llegaba a mi mente una de esas preguntas filosóficas o qué se yo, en las que se planteaba si el dinero lo era todo, porque sí, Breana Mustaine estaba llorando por dinero. Pido que me entiendan, soy la chica que pone su suerte comprando billetes de lotería con la esperanza de que sus problemas se solucionen, para que luego, después de una exhausta carrera de inversión, se dé cuenta de que no es feliz aún llena de riqueza. Uhh, es que hace unos años llegué a tomar por equivocación un curso de emprendimiento y finanzas y esas cosas; después de eso mi visión "cambió". Es un dato no tan necesario, pero en los negocios me va muy bien; con decir que después de ese curso lograba vender cosas a mi círculo cercano y muchas veces no todo era ilegal.... pero gané mucho dinero.
Tal vez era momento de aplicar eso en mi vida de nuevo, otro horizonte por visitar.... algo para mejorar.Me subí al auto, mi estómago rugía de hambre y ya hacía algo de frío.
Me coloqué la chamarra y algo sonó en los bolsillos.,
Mis ilusiones se iluminaron, eran las llaves de la casa de Lenny, las había dejado en los bolsillos. No veía otra opción y él dijo que cuidara de su casa, además, no pienso llorar en la calle...Me dirigí a la ya mencionada casa de el chico con más estilo en la faz de la tierra.
Al llegar, nada cambió. El ambiente se sentía solo, hacía un frío de horrores y todo estaba.... triste.
Dejé mis cosas y me instalé en la habitación principal, ya que la otra no tenía cama.
Sin amigos, sin trabajo, sin casa, con poco dinero.... y en soledad temporal ¡Ja! Como hace unos años.
Ay no, y luego el maldito Duff.... no me arrepiento de haberlo conocido, fue demasiado lindo mientras duró, aún no puedo superarlo, sé que es algo pronto e incluso atrevido, pero era una de las pocas o más bien, la única persona que me entendía y cuidaba, de alguna manera.
Lloré como las últimas noche sin excepción. Muchas malas decisiones me habían traído a aquí.... era horrible.
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𝙰𝚖𝚘𝚛 𝚎𝚗 𝚝𝚒𝚎𝚖𝚙𝚘𝚜 𝚍𝚎 𝚟𝚘𝚍𝚔𝚊 | 𝙳𝚞𝚏𝚏 𝙼𝚌𝚔𝚊𝚐𝚊𝚗
Fanfiction"Úsame cuando tu estado de ánimo no esté muy bien. Llévame por todos lados Y cuando estés mejor, olvídame..." Breana y Duff se conocen de la manera más cliché que puedan imaginar. No tardan mucho en darse cuenta de la atracción por el otro. Despué...