Novio de alquiler ♡ | SEUNGYUL

➵ Capítulo 44

—Entonces, Seungyoan...

—Mamá, es Seungyoun.

—Como sea —su madre se cruzó de brazos mientras estaba de pie ante la puerta de la cocina en tanto Hangyul parecía querer desaparecer de allí. Kijung, al lado de su medio hermano, sonreía burlón— ¿Qué intenciones tienes con mi retoño?

—¡Por dios, mamá, estás actuando como una loca!

—¡Hangyulie! —regañó Hyojung agarrando la oreja de Hangyul— Dejame actuar como una madre por una vez en tu vida, ¿está bien? ¡Debo protegerte! ¡Imagínate que este tal Seungyoan-!

—¡Es Seungyoun mamá, Seungyoun!

—Sus gritos se escuchan hasta la otra cuadra —todos se voltearon a ver al hombre de pie ante las escaleras, que sonreía amistosamente— Buenas tardes, Seungyoun, soy Kim Heechul, padrastro de Hangyul. Y ella es Momo —se hizo a un lado, mostrando a una muchacha que sonreía con timidez, y no parecía tener más de trece años.

—Hola Seungyoun oppa —saludó la chica nerviosa— Es muy guapo —miró a Hangyul con los ojos brillando— Oppa, ¿no tiene amigos así de guapos para mí?

—Tengo muchos amigos —dijo Hangyul sonriendo— Pero lo siento, Momo, creo que todos son gays.

Momo hizo un pequeño puchero, cruzándose de brazos.

—Mejor así —dijo Heechul pasando un brazo por la cintura de Hyojung, que seguía un poco enfurruñada— No quiero que ningún chico se acerque a mi princesa.

—¡Papá!

—Vamos —Hangyul le tomó la mano a Seungyoun, arrastrándolo al patio trasero— Si sigues allí, mamá empezará a interrogarte y no creo que quieras eso.

—Sí —concedió Seungyoun sentándose en la pequeña banca que había en el patio— De seguro me habría puesto nervioso y le habría dicho algo así de que quiero sodomizar a su hijo.

Hangyul enrojeció, cubriendo su rostro mientras Seungyoun soltaba una risa divertida, pasando un brazo por el hombro de Hangyul para luego darle un beso en la frente.

—Te encanta humillarme, ¿no es así? —murmuró Hangyul avergonzado.

—Claro que sí —Seungyoun le revolvió el cabello, sacando entonces de su mochila una pequeña cajita— Te compré un regalo, Hangyulie.

Hangyul parpadeó, observando la pequeña cajita de terciopelo, para luego tomarla delicadamente. Pasaron unos segundos sin que el chico la abriera, pero entonces levantó la vista con los ojos llorosos.

—Seungyoun... no era necesario...

—Claro que lo es —el pelinegro hizo una mueca pequeña— Anda, ábrelo antes de que quiera morirme.

Cuidadosamente, Hangyul abrió la pequeña caja, y cuando vio su contenido, enmudeció por completo.

Seungyoun sintió su estómago revuelto al imaginar que a Hangyul no le gustaría, que sonreiría forzadamente para luego decir que estaba bonito cuando no era así. Estaba preparado para cualquier escenario.

Menos para el caso de que Hangyul se pusiera a llorar.

Tragó saliva al verlo sollozar, cubriendo su rostro con sus manos.

—¿No te gustó? —tartamudeó abochornado— Ay, mierda, Hangyulie...

—Cállate... —balbuceó Hangyul— ¿Por qué haces esto? Me haces llorar y me pongo feo...

Seungyoun soltó una risa entrecortada, sintiéndose más nervioso que nunca en la vida. En especial cuando Hangyul sacó el pequeño collar con un colgante de luna al final, hecho en plata, y unas palabras en inglés.