Novio de alquiler ♡ | SEUNGYUL

➵ Capítulo 5

—Entonces... —dijo Jinhyuk lentamente— ¿dónde se conocieron?

—En la plaza.

—En un sitio web.

Todos en la mesa miraron a Seungyoun y a Hangyul: el primero frunció el ceño tratando de no lucir enfadado en tanto el segundo se encogía de hombros, sin dejar de sonreír.

—En un café.

—Se acercó mientras vendía mis pastelitos.

Seungyoun se giró hacia Hangyul con los ojos entrecerrados.

—¿Haces pastelitos?

—Si te dedicaras a algo más que tocarme el trasero, te fijarías que te hago pastelitos. —mintió Hangyul con una expresión indignada.

Jinhyuk se atoró con su saliva, pero antes de que pudiera hacer algo más, Wooseok se movió para evitar un desastre. Sin embargo, de poco le sirvió ya que Eunsang le escupió el agua que había estado bebiendo.

Con un chillido de indignación, Wooseok le dio un golpe a Eunsang.

Seungyoun hizo rechinar sus dientes.

—Nos conocimos en un café que queda en la plaza luego de haber hablado por un sitio web. —soltó Seungyoun dándole un pellizco a Hangyul en la pierna para que no dijera nada.

Wooseok, limpiando su rostro con una servilleta, los miró con los labios arrugados.

—¿Seguro, Seungyoun? —le dijo con sospecha— Nunca antes nos habías hablado de este chico —la sonrisa de Hangyul se tambaleó un momento— ¿No nos éstas mintiendo?

Seungyoun observó al chico con frialdad y una expresión imperturbable, sin dejar de traslucir un poco parte de la mentira. Sin embargo, estaba tardando mucho en responder, y Hangyul decidió que lo mejor sería intervenir.

¿Y qué mejor manera de intervenir que humillando a Seungyoun?

—¡Gatito, ¿no le has contado de mí a tus amigos?! —dijo tomándolo del brazo, llamando su atención.

El de cabello negro soltó un resoplido, pero antes de poder decir algo, Eunsang comenzó a reírse como un desquiciado.

—¡¿Gatito?! —soltó entre risas— ¡Seungyoun, eres su lindo gatito! —Jinhyuk bajó la vista, ocultando su sonrisa— ¿En la cama maullas, Seungyoun? —incluso Wooseok tuvo que tapar su boca para no reírse mientras Eunsang se sostenía de la mesa para no caerse debido a la risa.

—Oh, voy a matarte. —Seungyoun se puso de pie mientras Hangyul comenzaba a reírse también.

—No si yo lo hago primero, anciano.

Antes de lanzarse sobre su amigo, alguien tomó del hombro a Seungyoun y tiró de él, volteándolo. Todos se giraron a ver el momento exacto en el que el pelinegro de antes, que había estado abrazando a Hangyul, golpeaba a Seungyoun en la mejilla con su puño, con el ceño ligeramente fruncido.

Seungyoun cayó al suelo mientras Hangyul soltaba un grito bajo.

—¡Yohanie, ¿qué demonios éstas haciendo?! —chilló Hangyul poniéndose de pie.

Seungyoun debía admitirlo: por un breve momento, quería saber cómo se vería Hangyul diciendo maldiciones y cosas sucias en la cama.

Borró la imagen mental que se hizo antes de lanzarse sobre el pelinegro, ambos cayendo al suelo.

—¡Seungyoun! —chilló Hangyul.

—¡Oigan, deténganse! —gritó Wooseok— ¡Hyukie, haz algo!

—¿Qué quieres que haga?

—¡PELEA, PELEA! —alentó Eunsang— ¡Le apuesto al cara de conejo!

—¡Yo le apuesto a mi gatito! —gritó Hangyul, y todos lo miraron— ¿No?

Todos rodaron los ojos.