A la mañana siguiente, cuando desperté me di cuenta que Tyler no estaba a mi lado como la noche anterior, me asuste un momento pero después gire la mirada y lo vi a una corta distancia avivando las llamas de una fogata.
Me quede ahí observándolo romper en pequeños pedazos unas ramas, y luego arrojarlas a las llamas. Su cara estaba mas pálida de lo normal, lo mas probable es que el frió le esta afectando al igual que a mi. Se percato de que lo miraba, me sonrió débilmente como la primera vez que nos encontramos.
-Buenos días-.Dice aun sonriéndome.
-Buenos días-.Respondo, me tiembla la voz, el aire frío se volvió insoportable en ese momento.
-Será mejor que te acerques a calentarte-.Dice señalando a la fogata.
Me levante lentamente, me quede un rato quieta, deje que la sangre circularla mejor en mis piernas. Avancé con paso lento hacia él y tarde un rato, a pesar de que la distancia que nos separaba no era tanta.
Cuando llegue, me senté a su lado, en un tronco seco en el que se apoyaba, lleve la manta conmigo.
Estire las manos y un poco los pies para que estuvieran mas cerca del fuego, como aquella vez en la cabaña, cerré los ojos y me concentre en el calor en mis extremidades, era placentero, pero definitivamente, nada se iba a comparar a el poder sentir el calor de otra persona al dormir. Eso si es reconfortante. Eso si te hace entrar en calor, simplemente dos cuerpos estrechándole.
-¿Cómo la encendiste?-.Pregunte de repente.
-Con magia-.Dijo sonriendo burlonamente, ladee la cabeza viendolo divertida.
Soltó una risita burlona.
-Yo tenia un encendedor, el plateado con las flamas negras, ¿lo recuerdas?-.Dice seguido de un ataque de tos.
-Lo recuerdo-.Respondo, veo su mano en el tronco y decido posar mi mano sobre la suya, el abre lo suficiente los dedos para que entrelacemos nuestras manos una sobre la otra.
-Estupido frío-.Dice cuando se recupera.
No dije nada, solo me acerque un poco más a él para cubrirlo con mi manta, cuando lo hice él me tomó por la cintura para estrecharme más a él. Me recargue en su hombro y así permanecimos en silencio un gran rato en lo que las brasas del fuego se consumieron.
-Deberíamos conseguir algunos analgésicos-.Digo levantando la cabeza de su hombro.-Son algo que nos serviría a cualquiera de los dos.
-Cuando encontremos a Melanie te permitiré preocuparte por una insignificante gripa.-Dice y yo guardo silencio-.Y además, tal vez ella las necesite.
Pensar en que mi hermana podría estar en la intemperie en este momento, con este frió, me hace un nudo en la garganta, intente tragar pero fue inútil pues ahí se conservo el nudo.
-Ten-.Dice entregándome una lata de carne recién cocinada.
La tome comí un poco, no tenia nada de hambre. O más bien, no quería nada en mi estómago que más tarde vomitaría.
-¿Ahora para donde nos dirigimos?-.Pregunta Tyler parándose del tronco.
-No lo se-.Digo metiéndome otra cucharada de carne a la boca. Aunque el hambre no era la razón de que comiera, estaba caliente y era una buena sensación al momento de tragar. Lo que daría por una taza de café caliente.
-Bueno, hay que caminar al norte, supongo-.Dice estirándose un poco.-¿Lista?
Yo sólo asiento.
Me levante y junto con Tyler guardamos las mantas, el resto de la lata nos la comimos mientras caminábamos en la dirección que el dijo.
Caminamos por un largo rato y en el camino, él me tomo de la mano, es raro pensar que ahora podría estar en la universidad y probablemente ya no lo volvería a ver nunca más, y a pesar de lo mucho que me lastimó, me siento bien con su mano entrelazada con la mía, es bueno tener a alguien conocido en un momento difícil y siendo sincera creo que nunca deje de quererlo como nunca deje de odiarlo, no se si sea bueno o malo, pero que puedo decir, fue el amor de mi vida. Nunca ame a nadie más como lo ame a él. Y aún así rompió mi corazón.
Llagamos a una carretera cubierta casi totalmente de nieve, caminamos en la dirección contraria al sentido de la misma. La nieve cae lentamente, estiro mi otra mano y un copo cae sobre mi palma...
Era el baile de invierno, yo como todos los años ayude para la organización del mismo, era algo que siempre me encantó: contratar el banquete, el DJ, decorar el lugar. Me gustaba tener el control de todo lo que se hacía.
Tyler y yo estábamos nominados como reyes del baile, llegamos en su viejo carro. Era un clásico, pero necesitaba mucho mantenimiento que Tyler no podía costear. Él me explico que quiso llevarme en limosina pero su padre no le dio más dinero. Tuvo qué rentar un nuevo traje porque el que él tenía ya estaba muy gastado.
Llegó a mi casa y toco la puerta despacio. Mi mamá fue quien le abrió, lo saludo emocionada y no tardo en tomarle fotos para su álbum de recuerdos, mi madre adoraba a Tyler, bueno hasta que pasó lo que pasó. Papá estaba leyendo un libro y fumando pipa, sólo lo saludo cortésmente pero siguió en su lectura. Melanie le hacía comentarios acerca de que era la primera vez que no lo veía como un vago.
Baje por las escaleras muy nerviosa, mi vestido era blanco. Era suelto y tenía piedras brillantes en el corte corazón. Era sencillo, pero muy hermoso. Todavía recuerdo la cara de Tyler y las dos palabras que me dijo: "estas perfecta".Mi cabello rubio lucia por primera vez hermoso. Mamá tardo hora arreglándolo pero valió la pena. Todo era perfecto hasta el momento antes de que nombraran a los ganadores, busque a Tyler por todas partes para avisarle que ya era hora, me dijeron que lo habían visto entrar a baño de hombres, toque la puerta y como nadie me contesto entre, escuche algunos ruidos en uno de los baños, vi dos pares de pies por abajo así que por automático abrí la puerta del baño. Me quede en silencio y ellos igual, Tyler me miraba fijamente y Cristina sólo sostenía su brazo con la cabeza gacha, era tan más obvio lo que estaba pasando.
Salí corriendo del baño, él corrió detrás de mi y Cristina detrás de él, cuando logro alcanzarme me intento explicar que ella se le había encimado que él solamente tenia la invención de ir al baño, claro que no le creí y en ese instante lo termine.
Cuando mencionaron a los reyes del baile, nos nombraron a él y a mi, él subió por culpa de sus amigos futbolistas y todas las miradas se clavaron en mi, cuando decidí no moverme.
Al final avancé al escenario y acepte con la frente en alto mi tiara, era hermosa, el director tenia el micrófono y anuncio que el rey y la reina bailarían al centro para comenzar el baile general-un tanto cliché para mi gusto-.
Tyler me miro como pidiéndome que en verdad me pusiera a bailar con él, pero yo solo moví a cabeza en señal de que no aceptaría. Estaba destrozada, pero no iba a dejar que me humillara en frente de tanta gente, no iba a bailar con él después de lo que me había hecho.
Todos guardaron silencio esperando a que pasáramos al frente, pero yo solo sonreí y camine en dirección a Cristina.
Me quite la tiara y se la tire a los pies.
-Quédatela-.Le dije.-Al fin y al cabo, eres la perra que quería mi trono, todo tuyo linda.
Y salí del con el dedo de en medio en alto, en la dirección de Tyler.
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Crónicas de una Sobreviviente: Tempestad.
أدب الهواةSinopsis: ¿Cómo llegamos a esto? ¿Cómo es posible que pasara de tener una vida normal, a tener que luchar por mi vida? En un cerrar de ojos me encuentro sola, con un vacío en mi corazón, el dolor me envuelve, pero yo debo seguir, por ella, por Melan...