20. Eres un monstruo

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Estaba en el fondo de la piscina, su cabello flotaba, sus ojos estaban cerrados, la tome de la cintura, tome ambos de sus brazos para colocarlos alrededor de mi cuello, y nade hasta la superficie.

Ambos tomamos una gran bocanada de aire, ella comenzó a toser mientras la llevaba a la parte menos profunda de la piscina. Mechones empapados estaban pegados a su rostro, los aparte para verla mejor. Al fijar sus ojos en mi una sonrisa se formó en sus labios.

—Sabia que me rescatarías.

—¿De que estás...?— me quede sin palabras ¿Lo había hecho a propósito?  —¡¿Estas loca?! No vuelvas a hacer eso en tu vida, jam...— reprendí.

—Lo siento, tenia que hacerlo- murmuró interrumpiéndome. 

—¿Para qué? -inquirí, nuestros a los ojos se conectaron por unos breves segundos, baje los míos hacia sus labios, me estaba reprimiendo en no besarla ahora mismo.

Pero volví a sus ojos azules y verdes, había cierta duda, los aparto por un segundo indecisa. —O ¿Por qué?—presione.

Suspiro, y volvió su mirada en mi, era no sé como describirla en palabras ¿profunda?Algo en ella cambio, su forma de verme no era a la de siempre. — Tengo que aclarar algo. No he podido quitarme esto de la cabeza desde... — las palabras se le quedaron atoradas.

—¿Desde que casi nos besamos?— termine por ella.
Ella volteó avergonzada hacia otro lado asintiendo.

—¿Sientes algo? —pregunté. Ella seguía sostenido sus brazos en mi cuello. Tome su mentón para que ella me viera directamente a los ojos para transmitirle seguridad.

Ella acarició de mi mejilla hasta mi barbilla con la parte de atrás de su mano. -No estoy segura. - esbozó una sonrisa triste. Pensé que después de decir esto se separaría de mi, e iría a la orilla de la piscina para irse. Pero no fue así.

 Lo que hizo me sorprendió.

—Pero... solo hay una forma de averiguarlo

Ella tomó ambos lados de mi cara en sus manos y su mirada cayó de mis ojos a mis labios, poco a poco se acercaba más a mi, cerrando el espacio entre nosotros.

Mi conciencia me decía que probablemente ella no estaba en sus cabales, ¿Y si la beso y ella mañana no lo recordará? no sabia si esto bien o mal.

Pero dejé de escuchar esa voz en mi cabeza en el momento en el que ella presionó suavemente sus labios contra los míos, sabían a tequila con un toque de chocolate, la sensación de ellos me hizo querer más. Pero aún así no le seguí el beso, y ella se separó de mi para ver mi reacción.

Vacilé, pero esa ola de duda desapareció al ver en sus ojos habían un destello de arrepentimiento y decepción. Sentí mi pecho oprimirse.

Se giró para irse, pero tomé su brazo girándola para acercarla a mi. Ella chocó contra mi pecho, muy pocos centímetros separaban nuestros labios. Su respiración topaba con la mía.

Ya no podía contenerme, contener esto que llevo sintiendo desde hace años, y que iba creciendo cada vez más. Con cada momento que pasaba con ella, con su sonrisa, su manera de ver las cosas, lo fuerte que es y fue en los momentos más difíciles de su vida, siempre había tenido esta necesidad de protegerla, ese miedo a perderla. No dejare que nadie le haga daño, nunca.

Nuestros labios comenzaron a rozarse. Y le pedí algo antes de llegar de perder el control. -Por favor- jadee -no olvides esto.

Y la bese, como si fuera lo más valioso que tengo, algo tan frágil que jamás me perdonaría si fuera a romperlo. Si, era su primer beso, y quería que fuera perfecto. Poco a poco nuestros labios comenzaron a sincronizarse, fue lento, después se amoldaron perfectamente. Aceleré el ritmo, mis manos acariciaron su espalda, hasta quedarse en su cintura. Deje de pensar, cada roce de nuestros labios estaba tan lleno de emociones. 

Hidden Souls ©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora