TREINTA.

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No sabíamos realmente que pasaría. De vez en cuando nos tomábamos un pequeño break, pero muuuy de vez en cuando. La mayoría del tiempo nos la pasábamos entrenando, leyendo acerca de más zords y haciendo planes. Jayden y yo habíamos perdimos cercanía con el paso de los días, al igual que Mike y Emily. Todo el grupo se aplicó más en esto.

El que más se veía afectado por el distanciamiento entre parejas era Mike. Desde que notó que todos debíamos ser más centrados, su semblante había cambiado, solo un poco. Como si su felicidad dependiera directamente de Emily cuando yo había platicado con él una y mil veces que la felicidad de nosotros no está en nadie.

—Así que suponemos que el próximo ataque no tarda llegar. Como ustedes saben, los últimos tres ataques han ido aumentando desde que Xandred se fue, tenemos las batallas más difíciles actualmente— el Mentor se paseaba de un lado a otro mientras escuchábamos atentos sus palabras. —Estoy orgulloso de ustedes porque nunca han bajado la guardia. Siempre han salido victoriosos hasta ahorita y espero que así sea hasta el día que acabe nuestra misión. Otra cosa— el hombre mencionó con seriedad — Jayden, Lilian, Mike y Emily, tienen prohibido hasta nuevo aviso relacionarse de manera amorosa. Podrán seguir siendo amigos y compañeros, pero hasta que este asunto no esté resuelto— Nos volteamos a ver entre todos al escuchar sus órdenes con la intención de reclamar algo —Cállense— ordenó —Nada de salidas, nada de películas o cualquier cosa que implique que se distraigan o...

—Pero Ji— el hombre se vio interrumpido por Jayden —Hemos tenido cerca de cinco peleas y toda ha ido bien, hemos entrenado hasta el cansancio y todo ha salido bien, merecemos un descanso justo, no pido que sea todo el día pero al menos un pequeño momento— el castaño imploró.

—Jayden tiene razón. Siem...

—Eh dicho que no, muchachos. ¿No se dan cuenta que tenemos un enemigo el triple de fuerte que el primero?, piensen en eso, piensen en que literalmente todo el mundo está en sus manos, tienen la vida del mundo a su completa responsabilidad. Cualquier detalle puede costar la vida de todo el planeta, ¡por Dios!— Ji se escuchaba sumamente alertado por la situación, incluso nos elevó la voz en nuestras caras. No hicimos más que agachar la cabeza. Era un regaño y el más fuerte que habíamos tenido por su parte.

Asentimos solamente a su regaño y sus indicaciones. Había un silencio enorme en la sala después de eso luego de que el resto de los chicos se marchara. 

—Lo importante aquí es que nos separaremos por trabajo y no por que tengamos ojos en otras personas— los chicos cambiaron su rostro un poco aunque todos estábamos tristes.

—De hecho si— habló en verde —Y más por esto hay que confiar en que derrotaremos a ese villano para que volvamos a estar juntos, porque eso es lo que queremos, ¿no es así— dijo entusiasmado y nosotros solo asentimos.

—Será un largo tiempo sin un beso de mi bebé— hice un pequeño puchero para ponerme de puntitas y darle un pequeño beso y él me jalo hacia a él por la cintura.

—No por mucho, amor— correspondió el beso gustoso. —Creo que debemos alejarnos solo un tiempo, espero que nada cambie entre nosotros.

Mike y Emily nos pidieron un tiempo a solas. Los dos parecían nerviosos y no sabíamos el porqué.

—Pareces nervioso, ¿pasa algo?— la chica de piel blanca de acercó a su novio para tratar de saber que pasaba. El chico tenía la cabeza gacha y de vez en cuando se encontraba con la mirada de Emily viéndolo con preocupación. —Cariño, sabes que si te pasa algo puedes confiar en mi— tomó de su cara un momento para levantarlo y que le viera a los ojos.

—Em.. es solo que— el chico jugaba nervioso con sus manos en cada oración que decía —No quiero que en este transcurso de tiempo que estaremos distanciados encuentres otro chico por casualidad— por sus ojos comenzaban a deslizarse pequeñas lágrimas y Emily lo notó.

El Samurái Blanco: Súper Samurái.Where stories live. Discover now