(…)
— oye Alastor... — hablé cansada — no me siento muy bien...
— lo lamento querida, pasó muy rápido el tiempo — de repente Vi todo negro, me ¿Desmaye?
(…)
me desperté poco a poco, bostece y me senté en la cama mientras tallaba mis ojos
— en donde estoy... — no había visto bien el cuarto en donde estaba pero las sábanas era rojas
— en tu casa querida — esa voz...mire hacia donde escuché la voz y Vi a Alastor parado con una taza de café en las manos, estaba en su forma humana
— ¿por qué mis sábanas son rojas? Y como llegue aquí? — me dió la taza de café y se sentó en una orilla de la cama
— en primera; no me gustaba el color azul rey que tenías antes y en segunda; obvio yo te traje, el infierno te afecto de sierra forma dejándote débil, tendré que cuidarte sin te enfermas que es lo más probable. levántate voy a hacer el desayuno, el café es para que te despiertes un poco más — yo hacenti, bebí un poco del café y el salió del cuarto
(…)
— gracias — dije mientras dejaba el plato con el desayuno en la mesa, el se sentó en la silla que estaba frente de mi
Se está comportando algo extraño, no suele comportarse así ¿Estará drogado o algo así?
Pensaba mientras comida, tenía hambre.
— ¿Es domingo? — el asintió
— llegamos como a las 7:29 p.m y no despertaste hasta hoy — hablo calmado, poco tiempo después volvío a hablar — tienes que hacer tarea, por eso sacaste a tu amiga de la casa ¿No?
— si...en parte era sierto, tú hiciste la tuya? —
— la entregué el mismo día — sonrió
— ventajas de ser un demonio supongo — el río leve
— no todos —
(...)
— a dormir — hablo Alastor entrando al cuarto
— si mamá... — hablé algo burlona, no le dió gracias a él
No dijo nada solo se fue, suspiré y me levanté acomode los libros en mi mochila para mañana y me cambié, me puse algo cómodo para dormir, me acosté mire la hora 11:38 p.m, se hizo tarde, suspiré y me acomode para dormir
(…)
— buenos días querida ___! Espero durmieras bien — hablo con energía al inicio y lo último lo dijo tranquilo
— gracias, una duda ¿Qué hora es? — saco un rejor de la nada y lo miro
— no falta mucho para que empiecen las clases faltan como 40 minutos — hablo Con calma
— desayuno, me cambio y nos vamos entonces — el solo asintió
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