Un secreto en Paris

Capitulo XII:Espetros del pasado

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Abro los ojos y veo que aun no aterrizamos, Cristóbal parece seguir durmiendo en el asiento junto a mi, se ve muy tranquilo cuando duerme, Reinaldo por otra parte parece estar en un mini coma, es algo común en el

Me levanto y camino por el pasillo del avión hasta la pequeña habitación en el fondo del, que bien todo esta mas que correcto

La pequeña Ema sigue descansando, su nacimiento fue algo que de verdad nunca llegue a pensar que sería posible, Cristóbal y yo, una familia, un hogar

Me siento en una de las pequeñas mesas del avión y me sirvo un pequeño baso de bourbon para pensar mejor

Recuerdo perfectamente ese día, uno de los mejores de toda mi vida

-Casi llegamos tarde de nuevo-exclama una joven morena de cabello castaño

-Calma, el profesor Ricardo siempre llega tarde Emili, no es nada como para prestarle atención-contesta la otra joven de piel blanca y cabello rojizo

-Elizabeth, la verdad recuerda que somos nuevas, el profesor le da clases a los estudiantes de 4 y 5 año, no a nosotros-habla nuevamente la morena

-Calma Emili, al fin y al cabo no van a hacernos nada-contesta Elizabeth

Al llegar al colegio entramos con calma, por favor, ni que los alumnos del profesor Ricardo fueran la gran cosa

Al entrar al salón ambas quedan totalmente en silencio al mirar como este se encuentra totalmente lleno, el profesor el cual esta parado justo frente al pizarrón le hace una seña indicándoles que pasen a lo que las jóvenes acatan sin dudar ni un segundo

-Muy bien, antes de la pequeña interrupción de estas estudiantes de 3 año, les recordare que si hay una cosa que valoro es la puntualidad y respeto, la próximamente las dejare afuera y no tendrán derecho a la presentación de la siguiente prueba que les haga-habla firmemente el profesor

La puerta se abre de golpe y entran dos jóvenes de mayor edad, uno es alto de musculatura notable y cabello rubio, mientras el otro es un poco mas bajo de piel blanca y cabello negro

-Buenos dias profesor-saluda el mas alto

-Yo diría tardes Ramirez-exclama el profesor

-Vamos, solo vine a ver la presentación de mi querido hermano, asi que ahora, porque mejor no comenzamos antes que se haga aburrido-exclama el joven mientras se sienta en una de las sillas

-Me parece perfecto, Buenavista-habla el profesor mientras mira al joven de cabello negro

El joven se para derecho mientras pone su bolso en el suelo, la verdad admito que es algo extraño, no se ve muy influitivo, mucho menos interesante, pero, ¿porque esta dando una presentación a nosotros?

-Buenos días, me llamo Cristóbal Buenavista, hoy el profesor Ricardo me pidió que lo ayudara en un introducción en psicología

La verdad no deseaba tomar este taller pero necesito los puntos correspondientes, creo que descuidarme este lapso no fue para nada una buena idea

-Quiero mostrarles que la psicología puede ser una carrera bastante interesante a criterio de cada uno de ustedes por supuesto, entender la psicología del ser humano es uno de los temas que normalmente parece bastante extraño al igual que algo molesto y tedioso

Volteo los ojos en forma de fastidio, la verdad ver como piensa la gente es algo bastante aburrido en mi opinio, cada quien en su mundo, ¿Acaso esa no es la ciencia de tener mente propia?

-El joven Cristóbal es uno de mis mejores estudiantes, espero y vean este ciencia como un buen panorama para el futuro y gusto de alguno de ustedes, y en un futuro ser grandes licenciados-habla el profesor

-Profesor le pido disculpas pero la verdad ahora que estoy aquí, deseo estar en su clase, ¿Me consideraría el honor?-pregunta Cristóbal educadamente

-Por supuesto como no hacerlo, será un gusto-contesta el profesor

-Disculpa broo, pero creo que vi algo y debo cerciorarme-se disculpa Cristóbal mirando a Reinaldo

-Esta bien, si tu lo dices, nos vemos luego-se despide el joven mientras sale

Este chico tiene algo extraño, admito que ahora que lo miro mas detalladamente noto que tiene unos ojos muy enigmáticos como si escondiera algo, bastante raro

-Toma asiento donde gustes, siéntete en casa y no lo olvides si deseas aportar no lo dudes-exclama el profesor

-Gracias, lo tendre en cuenta

El joven toma una silla y comienza a mirar alrededor del aula hasta que sus ojos se centran justo en mi, me esta mirando, como si su mirada no me aturdiera lo suficiente este comienza a caminar hacia mi de forma recta hasta estar justo enfrente de mi

-¿Puedo sentarme?-pregunta el joven

Me quedo en silencio y noto que las miradas de todos están justo encima de nosotros, ahora que lo tengo cerca parece bastante intimidante, como si su presencia fuera oscura que me eriza la piel por completo

-Si... No hay problema

-¿Sabes? Debes dejar de hacer ese tipo de cosas, puedes hacerte daño-habla el joven mientras se sienta

-No se de que estas hablando-contesta Elizabeth con mala mirada

El chico me toma del brazo y mi piel se eriza al notarlo, acaricia con suavidad las heridas como si no quisiera hacer el mínimo daño, deseo que alguien lo note pero la clase ya comenzó y nadie parece notar lo que hace

-Están bastante recientes, hacerte daño a ti misma no lograra que nada mejore, tienes una hermosa piel no debes dañarla asi-habla el joven sin mirar el rostro de Elizabeth

-No es tu puto problema-exclama Elizabeth mientras retira su brazo

El chico raro me ve directamente y sonríe mientras un extraño brillo aparece en sus ojos, ¿acaso se esta burlando de mi? O que mierda le pica

-Creo que nos llevaremos muy bien-sonríe el joven

-No lo creo, ahora quita tu pie de mi mesa, nadie te dio permiso de ponerlo hay-bufa la joven molesta

-Tampoco pedí tu permiso bella-ríe y luego centra su mirada al pizarrón

La voz de Cristóbal capta mi atención de inmediato haciendo vuelva al presente y que suba la mirada hasta donde el esta

-Eli, ¿Esta todo bien?-pregunta Cristóbal adormilado

-Si, solo... Estoy algo pensativa, recordé ciertas cosas es todo-habla Elizabeth mientras mira por la ventana del avión

-Te entiendo-este se levanta y camina hasta donde esta ella-Se que aun tienes recuerdos horribles del pasado-contesta mientras se sienta y acaricia la cadera de Elizabeth tocando una amplia cicatriz

-Se que ya no volveré a vivir algo como eso... Pero si... Si nuevamente...-antes de que hable Cristóbal le pone uno de sus dedos en sus labios indicándole silencio

-No me gusta hablar de eso y lo sabes, por favor deja de atormentarte por el pasado disfruta de este, quiero que tu y Ema disfruten lo mas posible, es lo mínimo que puedo darles-habla Cristóbal mientras bebe un trago del vaso de Elizabeth

-¿Por qué siempre eres tan tierno?-pregunta Elizabeth mientra lo mira

-Ambos sabemos que no lo soy, solo digo lo que siento y pienso, soy asi-contesta Cristobal mientras ve hacia el pasillo

-Lo se, lo se, por eso nunca me arrepiento de esa invitacion-exclama Elizabeth mientra se sonroja

-Y yo tampoco-habla Cristobal mientras la mira

Esa sonrisa, simple pero siempre logra confortarme, sus brazos me rodean y me siento segura una vez mas

Cristobal Buenavista, despues de tanto daño, tantas heridas, tantas mentiras... Aun me protege como lo prometio esa noche... No merezco alguien asi